DESTINO ESPAÑA, la investigación de Maldita.es y Planta Baixa, ha corroborado errores en la aplicación Spain Travel Health. La aplicación, que tiene que rellenar cualquier persona para entrar a España desde el extranjero, se puso en marcha en unas pocas semanas después de que acabara el estado de alarma y comenzó a operar en julio de 2020, coincidiendo con la apertura de fronteras.
La titularidad exclusiva de los datos que se han recogido desde entonces es del Ministerio de Sanidad, sobre los cuales no ha aportado muchas explicaciones ante las preguntas de DESTINO ESPAÑA. Ha habido viajeros que, por ejemplo, durante meses indicaron que iban a volar desde España, algo que no era posible porque la aplicación sirve para declarar la entrada a nuestro país; no la salida.
DESTINO ESPAÑA también ha podido saber que el Ministerio Sanidad no ha registrado los pasaportes COVID falsos que se hayan podido detectar en los aeropuertos y que un comité al que se comprometieron el ministerio y AENA para supervisar el control sanitario en los aeropuertos, nunca llegó a formarse.
DESTINO ESPAÑA ha detectado errores en los datos: durante varios meses muchos viajeros declararon España como país de origen del vuelo
Al comienzo de la implantación de Spain Travel Health un alto número de viajeros declararon que el país de origen de sus vuelos era España. Esto no debería ser posible ya que la aplicación es tan sólo obligatoria para los viajeros que viniesen desde otros países. Es decir, sólo sirve para registrar las entradas a España.
Durante los dos primeros meses de implantación de la aplicación, más de uno de cada 10 viajeros llegaron a introducir los datos erróneamente.
Ante las preguntas de DESTINO ESPAÑA, el Ministerio de Sanidad no ha negado que la aplicación tuviera este error, pero ha declarado que “no es usual” que la gente introduzca erróneamente los datos al rellenar el formulario.
El organismo también ha explicado que el formulario de Spain Travel Health es una “autodeclaración” realizada por parte del viajero y que sólo se revisa a la llegada de manera “aleatoria”, a los pasajeros procedentes de países de riesgo. Después de eso, cuando DESTINO ESPAÑA pidió datos más recientes de las llegadas de viajeros, el ministerio cambió de versión y pasó a decir que sí verificaban la información que las personas indicaban en el formulario. Este es precisamente el argumento que Sanidad ha pasado a utilizar como motivo para no poder volver a facilitar estos datos.
Una de las funciones de la aplicación, sobre todo a partir de noviembre de 2020, ha sido la de controlar si venían personas procedentes de países considerados como de riesgo por sus niveles de COVID-19. Pero el error que muestran los datos de DESTINO ESPAÑA confirma que hubo gente que entraba al país y no sé sabía de cuál venía. Si, aunque fuera por un fallo, en el formulario constaba que el origen era España, no es posible saber si el origen real del pasajero era un país considerado zona de riesgo o no.
La titularidad de los datos siempre ha sido del Ministerio de Sanidad
Desde que se realizó el convenio entre AENA y el Ministerio de Sanidad, la titularidad exclusiva de los datos sanitarios obtenidos en el control de llegadas siempre ha sido de Sanidad. El convenio decía explícitamente que AENA no podía almacenar, acceder ni tratar estos datos.
El ministerio ha explicado a DESTINO ESPAÑA a través de una solicitud de información vía ley de transparencia, que estos datos sólo se podían compartir con otros organismos y autoridades sanitarias (nacionales e internacionales) con fines de investigación epidemiológica. Según dicen, es el único tratamiento de datos que autorizan los viajeros que rellenan los formularios de Spain Travel Health. A pesar de ello, el Consejo de Transparencia estimó una reclamación de DESTINO ESPAÑA y Sanidad ha tenido que hacer públicos los datos anonimizados.
Desde junio de 2021, el ministerio también se hizo responsable del mantenimiento del sistema informático de Spain Travel Health, que hasta el momento había sido de AENA. Algo que ha costado casi seis millones de euros. La totalidad de la aplicación pasa desde entonces a depender del Ministerio de Sanidad.
Nunca se ha convocado la comisión de seguimiento del convenio entre AENA y el Ministerio de Sanidad
Cuando AENA y el Ministerio de Sanidad firmaron el convenio para el control de fronteras a raíz del cual se crea Spain Travel Health, se comprometieron a la creación de una Comisión de Seguimiento. De hecho, era uno de los puntos principales del convenio [el séptimo] y su función era la de resolver posibles problemas entre ambos organismos y diseñar las medidas necesarias y que resultasen “de interés” para el control.
DESTINO ESPAÑA ha podido saber gracias a una solicitud de información pública, que tras casi dos años desde que se firmó el convenio, esta comisión no se ha convocado nunca.
En la respuesta el Ministerio de Sanidad asegura que, según ellos, no ha sido necesario convocarla debido a la “permanente comunicación y estrecha colaboración entre ambos organismos”.
Desde noviembre de 2020 un 85% de los viajeros trajeron preparado el QR desde sus países
Desde noviembre las aerolíneas tenían que informar de la obligatoriedad de presentar el formulario y la prueba diagnóstica antes de volar. De hecho, los pasajeros tenían que mostrar a las aerolíneas el QR generado por Spain Travel Health o el certificado sanitario correspondiente para poder embarcar. Las aerolíneas se limitan a comprobar que el pasajero presenta el certificado y corrobora su identidad sin acceder a la información sanitario.
Si el pasajero no tenía el código QR ni había podido rellenar el formulario antes de viajar, se hacía en papel de forma presencial en los aeropuertos ayudado por el personal de control primario. El Ministerio de Sanidad ha explicado a DESTINO ESPAÑA que estos formularios rellenados en papel, de forma manual, eran posteriormente escaneados para incluirlos en la base de datos general.
En el último mes de los datos obtenidos por DESTINO ESPAÑA, en junio de 2021, también comenzó a usarse el certificado COVID digital UE, en el que se armonizaba la forma de demostrar la certificación sanitaria en toda la Unión Europea (UE). En este certificado se puede incluir la información sobre la vacunación, los test diagnósticos realizados o si una persona se ha recuperado de la enfermedad. Sin embargo, este certificado estaba en período de pruebas en junio y no fue hasta el 1 de julio que entró en vigor de forma oficial en toda la UE.
Los meses en que más incidencias sobre la app (problemas notificados por los usuarios) se registraron fueron en verano de 2021, coincidiendo con la llegada del pasaporte COVID de la UE, pero también con el período en que han llegado más viajeros internacionales desde el inicio de la pandemia. En total desde julio de 2020 hasta diciembre de 2021, se notificaron 209.151 incidencias, según los propios datos del ministerio obtenidos por DESTINO ESPAÑA vía ley de transparencia.
Sanidad asegura que no registró los pasaportes COVID falsos que se pudieran detectar en los aeropuertos
Preguntados por los datos de certificados falsos detectados en las lecturas de QR, el Ministerio de Sanidad ha comunicado a DESTINO ESPAÑA que no tiene un registro de pruebas diagnósticas falsas.
Según Sanidad, en caso de sospecha de una documentación incorrecta, se debía hacer una prueba diagnóstica al viajero. Los datos de las pruebas realizadas por aeropuertos reflejan que hubo disparidad entre aeropuertos para determinar cuáles eran los motivos por los que se hacían las pruebas.
En teoría AENA registraba esta información, ya que una de las funciones del personal de la empresa encargada del control primario en los aeropuertos, Interserve Facilities Services, era anotar cuántos formularios falsos se detectaban y comunicárselo a AENA. Así lo indican los pliegos técnicos del contrato que se adjudicó a la multinacional británica.
Este es un problema del que ya se ha hablado en Maldita.es. Durante la pandemia ha habido redes de estafa para conseguir certificados COVID-19 falsos. Tras esa primera respuesta de Sanidad asegurando que no había registros de los pasaportes falsos detectados, DESTINO ESPAÑA solicitó la información a AENA. La empresa pública derivó la solicitud al Ministerio de Sanidad “por ser competencia del mismo”. Y Sanidad volvió a insistir en lo mismo: “no se dispone de un registro de pruebas diagnósticas falsas”. No sabemos a cuántos viajeros se ha detectado en los aeropuertos con pasaportes COVID que en realidad no eran tal.