En Maldita Ciencia ya os hemos contado por qué no es cierto que las vacunas alteren nuestro ADN, estén fabricadas a base de células de fetos abortados o causen autismo. En las últimas semanas se han viralizado múltiples bulos y desinformaciones sobre las vacunas contra la COVID-19 que ya se han empezado a administrar en algunos países.
No es cierto que el primer paquete de vacunas contra la COVID-19 que ha llegado a España lleve el logo de una empresa de microchips ni que la vacuna rusa Sputnik V haya provocado reacciones en la piel a una tal Sandra Romero ni la muerte a una cabo del Ejército argentino. Tampoco es verdad que hayan vacunado con tapa a Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Os lo explicamos.
No, el primer paquete de vacunas contra la COVID-19 que ha llegado a España no lleva el logo de una empresa de microchips
Ha circulado por redes sociales una imagen del primer paquete de vacunas contra la COVID-19 que llegó a España el pasado 26 de diciembre y en el que aparece el logo de la empresa Softbox. Esta foto va acompañada de una captura de la búsqueda en Google de una web denominada softboxsilverskin en la que aparecen las palabras "electrónica y microchips". Pero es un bulo que el paquete lleve un logo de una empresa de microchips.
El logo que aparece en el paquete de vacunas es el de la empresa Softbox, que se dedica al envasado con control de temperatura. Como ya os hemos explicado en Maldita Ciencia, la vacuna de Pfizer y BioNTech, que es la que llegó el 26 de diciembre a nuestro país, debe almacenarse a -70 grados centígrados, por lo que se ha transportado en contenedores térmicos.
La web que aparece en la imagen que se está moviendo es la de SilverSkin, que es la marca de Softbox especializada en la venta de cubiertas protectoras térmicas para el transporte de mercancías. Entre sus productos, cuentan con cubiertas térmicas para dispositivos electrónicos y microchips. Pero ni Softbox ni SilverSkin son marcas de "electrónica y microchips", sino de embalaje y contenedores.
No, la vacuna Sputnik V no ha provocado reacciones en la piel a una tal Sandra Romero
En los últimos días también se ha difundido un tuit con una foto de unas piernas con manchas rojas en la piel acompañada del siguiente mensaje: “Hola, soy Sandra Romero, DNI 37263954. Me puse la vacuna Sputnik V el martes por la tarde y el jueves me produjo reacciones en la piel". Es un bulo: se trata de una cuenta falsa que ha reconocido que su testimonio es "mentira".
Además, la imagen es antigua y no está relacionada con la COVID-19: circula desde al menos 2012, siete años antes de que se detectaran los primeros casos de SARS-CoV-2. El DNI que se menciona tampoco pertenece a una persona llamada Sandra Romero, sino a un hombre llamado Ignacio Rodrigo, tal y como ha comprobado Maldita.es a través del buscador Dateas.
La foto de perfil tampoco es de una tal Sandra Romero, sino de la exdiputada argentina Elisa Carrió, también conocida como Lilita Carrió. Ella misma difundió la foto a través de sus cuentas de Twitter y Facebook en julio de 2018.
La cuenta @sandraro62 aseguraba en su tuit que, además de las manchas en la pierna, presentó "un fuerte dolor de cabeza y malestar estomacal" dos días después de que le pusieran la vacuna Sputnik V. Sin embargo, el autor de la publicación, que ya ha sido eliminada, ha publicado un hilo reconociendo que su testimonio es "mentira" y que lo publicó a modo de "experimento social".
No, una cabo primera del Ejército argentino no ha muerto por la vacuna Sputnik V, puesto que no la recibió
También se han viralizado en redes sociales algunas publicaciones que indican que ha muerto una cabo primera enfermera del Ejército argentino, “con tan solo 29 años, tras recibir la vacuna transgénica rusa”. “Nos están matando. El genocidio ya es un éxito”, señalan los mensajes. Es un bulo.
Las publicaciones mencionadas atribuyen la muerte de una cabo del Ejército argentino en Zapala, en la provincia del Neuquén, a un efecto adverso ocasionado por la vacuna rusa Sputnik V. Pero el Ejército argentino, a través de la Sexta Brigada de Montaña, ha difundido un comunicado donde explica que la joven murió por "una falla cardíaca" e inciden en que no se vacunó contra la COVID-19.
También un coronel del Ejército argentino, así como una amiga de la fallecida han asegurado al diario local LM Neuquén que la joven no murió a causa de la vacuna, ya que nunca la recibió. Por otro lado, tanto la ministra de Salud de Neuquén, Andrea Peve, como el Gobierno provincial han negado que la muerte de una persona en la provincia esté relacionada con la vacuna Sputnik V.
Ni Nancy Pelosi se ha vacunado con tapa ni las agujas desaparecen: los bulos del vídeo 'Vacuna Show'
Un vídeo viral, con el título 'Vacuna Show' y que comienza con imágenes de 'Los Simpsons', recopila numerosos bulos y desinformaciones sobre las vacunas contra el coronavirus. Por ejemplo, se muestra una imagen de la supuesta vacuna de Pfizer contra la COVID-19 en la que se afirma que ha sido fabricada en China. Pero es un bulo: se trata de un montaje que muestra un inhalador de THC (un componente del cannabis). Además, la vacuna no se está elaborando en China: Pfizer y BioNTech utilizan su red de fabricación combinada situada en Alemania, Bélgica y Estados Unidos.
En el vídeo también se muestran supuestas vacunaciones falsas de políticos como Beni Ben Muvchar. Unas imágenes muestran cómo el político israelí fue supuestamente vacunado falsamente sin aguja, sin carga y sin apretar el émbolo. Pero, como han verificado Les Observateurs del medio francés France 24, perteneciente al International Fact-Checking Network (IFCN) del que también forma parte Maldita.es, Ben Muvchar fue realmente vacunado contra el coronavirus. El vídeo viral fue grabado el 23 de diciembre. En él, una enfermera finge vacunarlo, pero anteriormente se grabó cómo fue realmente vacunado, tal y como muestra el vídeo que él mismo subió a su cuenta de Facebook.
En 'Vacuna Show' también aparece un vídeo de la vacunación contra el coronavirus de la vicepresidenta electa de Estados Unidos, Kamala Harris, en el que no se ve la aguja. Sin embargo, el mismo vídeo en alta definición sí permite ver la aguja de la jeringuilla.
Uno de los bulos que se mencionan en el vídeo y se ha viralizado en las últimas semanas indica que las agujas de las jeringuillas que utilizan para la vacunación contra la COVID-19 desaparecen. No es así. Las agujas no desaparecen, son agujas retráctiles. La BBC, de donde salen las imágenes, ha negado que la aguja desaparezca. Por otro lado, en 2015, la Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo un llamamiento a utilizar este tipo de agujas para proteger al personal sanitario.
Otra parte del vídeo viral muestra una imagen de la vacunación contra el coronavirus de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, supuestamente "con tapa". Pero es un bulo. Las fotografías de AFP muestran que lo que llaman "tapa" en realidad es una parte de la jeringuilla que precede a la aguja, que sí es visible en sus fotografías.
Lo mismo ocurre con unas imágenes de la primera ministra de Queensland (Australia), Annastacia Palaszczuk, en las que se ve la jeringuilla con la tapa puesta. Estas imágenes se han utilizado para reforzar una teoría antivacunas y afirmar que la política en realidad no se vacunó. También es un bulo: en un vídeo grabado antes sí que se ve que la jeringuilla tiene la tapa quitada. La grabación que se difunde es una representación del momento para conseguir más imágenes.
“Menos bulos, más rigor científico” es un proyecto de DKV Salud con contenido editorial de Maldita.es.