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¡Feliz sábado, malditas y malditos! Esperamos que hayáis tenido una buena semana y que los ánimos marchen bien; sabemos que puede ser complicado en estos momentos, y por eso hoy vamos a centrarnos en cómo estamos viviendo en nuestra vida digital todo lo relacionado con los ataques en Gaza y la situación en el mundo árabe. Pero, como resulta inevitable en la vida, los temas terribles se mezclan con otros que nos dan un poco de risa y respiro: ¿tu pimiento de WhatsApp es rojo o verde?
Riesgos del ‘doomscrolling’
Es difícil salir de la nube negra cuando entramos en una dinámica de leer una y otra veces malas noticias. Desde luego, es difícil hacerlo en el momento en el que estamos, constantemente informados (o malinformados, cuidado con los bulos) sobre lo que está pasando en Palestina e Israel. Claro que necesitamos estar pendientes de la actualidad y de la realidad, el problema llega cuando no podemos parar de consumir contenidos negativos… y en esto es muy fácil caer cuando estamos en las redes sociales. Nos pasa.
Es lo que se conoce como doomscrolling, eso de estar pantalla arriba, pantalla abajo, haciendo un scroll infinito en Twitter o TikTok. Doom en inglés significa “muerte” o “fatalidad”. Además, ya sabes que no es casualidad lo que nos aparece en nuestro feed en redes sociales: los algoritmos que colocan esas publicaciones potenciarán que esos temas sean los que más veamos si son con los que más interactuamos, los que más rato pasamos viendo, los que favoriteamos…
Si sientes que te está pasando esto, échale una reflexión porque puede tener consecuencias negativas a nivel psicológico. Este tipo de informaciones consumidas una y otra vez nos pueden impactar (nosotros como periodistas tristemente lo sabemos muy bien). Si notas que te pasas el día haciendo doomscrolling, lo mejor es que te marques una rutina de uso para tus redes sociales, configures el móvil para limitar el tiempo que pasas en estas apps y hagas vida más allá del dispositivo. Vete a dar un paseo, lee un libro, habla con amigos, cocina… Distráete y trata de pensar en cosas alegres, que no todo puede ser el timeline negro de Twitter y tenemos que cuidar nuestra salud mental. (Justo esta semana hemos hablado de salud mental y tecnología en Aragón Radio, dale una escucha).
Desinformación en Twitter, Meta y TikTok
Hablando de lo oscuras que están las redes sociales, también lo están en la parte que nos toca a nosotros en Maldita.es: la desinformación sobre la situación en Palestina e Israel está siendo brutal. Llevamos la friolera de 55 bulos desmentidos (quizá cuando tú leas esto ya sean más) y, por supuesto, estos se difunden en redes sociales.
Las plataformas tienen responsabilidad sobre esto: ¿recuerdas todo lo que te contamos sobre la DSA, la Ley de Servicios Digitales? Twitter, Meta y TikTok (como plataformas en línea de gran tamaño) están obligadas desde el 25 de agosto a, entre otras cosas, evaluar y mitigar los riesgos relacionados con la difusión de contenidos ilícitos y la desinformación, y evitar que sus servicios se exploten para difundir o amplificar contenidos con efectos negativos.
Pues Bruselas ha abierto investigaciones a Twitter (ahora X), Meta y TikTok sobre las medidas que han puesto en marcha las plataformas, a raíz de la desinformación que está proliferando sobre Israel y Hamás, como recoge elDiario.es. El marco de la DSA posibilita que puedan pedir explicaciones sobre qué están haciendo para parar la difusión de noticias falsas y contenidos ilegales, como aquellos sobre terrorismo, violencia e incitación al odio.
Según las comunicaciones de la Comisión Europea, Twitter tenía hasta este pasado miércoles para responder. Meta y TikTok, hasta el 25 de octubre. Estaremos pendientes. Si no contestan adecuadamente o si, efectivamente, la están liando y no están cumpliendo con la DSA, pueden ser multadas.
En cinco bits
- ¿Tu pimiento es rojo o verde? A ver, la preguntita va por cómo te aparece a ti este emoji en WhatsApp, no sea que te pase como a este usuario y su triste historia sobre cómo no compró el pimiento correcto porque a él le aparecía el pimiento rojo y a su mujer, verde. La clave es que él tiene un móvil con Android y ella un iPhone. Unicode (un estándar de codificación de caracteres diseñado para facilitar el tratamiento e intercambio de datos en informática) no describe el color del pimiento, así que queda a elección de sistemas y plataformas. En esta página se pueden ver distintos diseños.
- Cómo nos afectan los ataques informáticos y cómo protegernos. Octubre es el Mes Europeo de la Ciberseguridad, un momento para recordar la importancia de estar protegidos en nuestra vida online, algo que seguro que tenemos interiorizado después de situaciones recientes como el ciberataque y filtración de datos a Air Europa. ¿Cuáles son las consecuencias de los fallos en ciberseguridad? ¿Qué pueden hacer con nuestros datos si se filtran? ¿Qué medidas podemos tomar para protegernos? Dale al play y ponte nuestro Twitch de esta semana, que respondemos a todo esto.
- Delgadez en redes sociales. Esta semana hemos leído en elDiario.es un tema que nos ha preocupado, que alerta de que puede que esté volviendo la esclavitud de la delgadez extrema y todo eso del body positive igual acaba en algo meramente comercial. Volvemos al tema de la salud mental y física: ojo a lo que nos taladra el cerebro en redes sociales y a ver cuerpos “perfectos” una y otra vez, y a los contenidos que pueden potenciar trastornos de alimentación. Ante pensamientos raros, acudamos a profesionales para hablar del tema.
- La doble vida de la inteligencia artificial. Una lectura para el fin de semana: recorrido por la historia y la evolución de las inteligencias artificiales (claro, no hay solo una), autómatas, modelos simbólicos, redes neuronales y aprendizaje automático. En el magazine digital del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona por la periodista e investigadora especializada en la relación entre tecnología y poder Marta Peirano.
- Vacaciones en Roma, mejor sin timos en Booking. ¿Buscando un apartamento para tus vacaciones en la ciudad eterna, o en cualquier otra? Cuidado, porque los timos abundan. El último en Booking: te piden contactar con el anfitrión por Telegram para poder reservarlo y clonan la web de la plataforma para timarte. Ya sabes, revisa todo mil veces antes de poner tus datos bancarios. Audrey Hepburn lo haría.
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