Tanto la Organización Mundial de la Salud como los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos recomiendan no tocarse la cara para reducir el riesgo de contagiarse del coronavirus SARS-CoV-2. Además de la nariz y la boca, los ojos también pueden ser una vía de contagio. Pero aún existen preguntas al respecto. ¿Hasta qué punto es probable que esto ocurra? ¿Cómo es posible saber si alguien se ha infectado a través de los ojos? ¿Las lágrimas también contagian? Os explicamos todo lo que sabemos (y lo que no) al respecto.
El contagio por los ojos existe aunque no es la forma principal de infección
Rubén Pascual, oftalmólogo y fundador del Proyecto Ocularis, explica a Maldita Ciencia que los ojos son una posible vía de transmisión del SARS-CoV-2. Pero el oftalmólogo insiste en que aún hacen falta más estudios al respecto. “Hay bastante consenso en que sería una vía menor, mucho menos importante que el contagio a través de la nariz o la boca. Incluso teniendo en cuenta la mascarilla”, indica.
El experto subraya que cuando respiramos estamos, por una parte, expulsando aerosoles y gotículas, y por otra, aspirando e introduciendo las partículas, gotas y aerosoles de nuestro alrededor. La superficie ocular no funciona así: “Ni dispersa ‘a chorro’ la película lagrimal por el aire ni tiene un ‘aspirador’ que atrae el aire del entorno”.
En la misma línea se posiciona Karen Walsh, científica del Centro de Investigación y Educación Ocular (CORE) de la Universidad de Waterloo (Canadá), que cuenta a Maldita Ciencia que existen varios estudios con diferentes conclusiones que analizan si el coronavirus puede transmitirse a través de los ojos. Algunos como este, este o este indican que sí es posible. Otros como este, este o este señalan que es poco probable que ocurra pero que pueden darse casos y recomiendan protección ocular para evitar infecciones por esta vía en el personal sanitario.
¿Cómo se transmite el coronavirus a través de los ojos?
Pascual explica que la superficie ocular, sobre todo la conjuntiva (membrana delgada que cubre la superficie interna del párpado y la parte blanca del globo ocular), tiene similitudes con la superficie interna del sistema respiratorio. Según cuenta, las mucosas de la nariz, la boca y la garganta se parecen a la conjuntiva por lo que “los virus que se asientan y reproducen por la vías respiratorias a veces pueden mantenerse viables en la superficie del ojo”.
“Como la lágrima circula y se drena en las fosas nasales, teóricamente una cantidad suficiente de virus viables (que hayan llegado desde fuera) en la película lagrimal puede llegar hasta la mucosa de la nariz y producir la infección”, indica. Walsh señala que aún hacen falta más estudios al respecto para saber con certeza qué es exactamente lo que ocurre si una persona se ha infectado a través de los ojos.
Pero, ¿se puede saber si una persona se ha contagiado a través de los ojos? “No es posible saberlo. De infectarse primero por la conjuntiva, el virus pasa a la nariz antes de que haya síntomas de COVID-19”, responde Pascual.
Las lágrimas son una posible fuente de contagio
Por su parte, el profesor y doctor en oftalmología Jorge Alió explica a Maldita Ciencia que algunos pacientes, al comienzo de su signos clínicos o incluso antes de tener nada, han presentado una conjuntivitis que les provoca tener los ojos irritados, sentir molestias y segregar lágrimas.
Estas lágrimas, según indica, pueden ser transportadoras del virus. Hay estudios como este, este o este en los que se ha detectado el ARN del virus o carga viral en los ojos o lágrimas de pacientes.
Si hay suficiente carga viral en las lágrimas, un contagiado podría llegar a transmitir el virus a otras personas “bien porque les toque con las manos o con algún pañuelo u objeto con el que se toque la cara o bien porque alguien les toque la cara, por ejemplo al ponerle un colirio”.
Alió explica que se pueden diferenciar dos etapas en la conjuntivitis de algunos pacientes: una inicial (vírica), con PCR positiva en la lágrima, y otra que ocurre cuando el paciente está grave, en general ya en la UVI, en la cual tiene los ojos irritados “debido a la situación inflamatoria general que padece”. “Esta segunda conjuntivitis no es contagiosa por las lágrimas puesto que la PCR es negativa en la lágrima”, añade.
El riesgo de contagiarse con protección ocular es del 6% frente al 16% si no se lleva
¿Es recomendable proteger los ojos de alguna manera para evitar contagios? Desde la Delegación de Galicia del Colegio Nacional de Ópticos Optometristas (CNOO) señalan a Maldita Ciencia que es muy recomendable utilizar protección ocular. Alió añade que sobre todo es aconsejable en ambientes donde la contaminación es más posible o la carga vírica mayor (hospitales o lugares con mucha gente o con posibles personas infectadas).
Los protectores faciales y las gafas se asocian con un menor riesgo de infección en comparación con la ausencia de cobertura ocular, según esta revisión de estudios publicada en la revista científica The Lancet.
El riesgo de contagiarse al usar gafas o protección facial es del 6% frente al 16% si no se llevan, según 13 estudios analizados (en los que participaron 3.713 personas) y como ya os explicamos aquí.
Pascual explica que el objetivo de llevar gafas (ya sean de sol o graduadas) es evitar que las gotículas de saliva que hay por el aire lleguen a la superficie del ojo. Aunque, para él, “ayudaría más acordarnos de no tocarnos los ojos (mejor la cara en general), llevemos gafas o no”.
De hecho, desde la Delegación de Galicia del CNOO consideran que lo ideal sería utilizar gafas de protección que cubran también los laterales para minimizar la posibilidad de contacto con los ojos o pantallas de protección. “Estos dos elementos, aparte de proteger nuestros ojos de la entrada de partículas contaminantes que están en el aire, también evitan que nos toquemos los ojos con las manos”, indica.
El Ministerio de Sanidad recomienda que, al volver a casa, desinfectemos los objetos que hayamos utilizado en la calle. Las gafas (tanto los cristales como la montura) deben ser limpiadas con agua y jabón para acabar con el coronavirus y no dañarlas, tal y como explica el Centro de Investigación y Educación Ocular de la Universidad de Waterloo en una infografía con consejos para el cuidado de los ojos.
Evitar tocarse la cara y lavarse las manos: otras recomendaciones para prevenir contagios
Como ya os hemos explicado, para reducir el riesgo de contagio es importante no tocarse la cara y lavarse las manos con jabón y agua o desinfectante con base de alcohol. Quienes usan lentillas tienen que tener un cuidado extremo en llevar una higiene de manos correctas antes de ponérselas.
No hay evidencias científicas de que quienes utilizan lentillas tengan un mayor riesgo de contraer la COVID-19 que quienes llevan gafas. Pero, en caso de que nos causen cualquier molestia que nos lleve a tocarnos los ojos, es mejor cambiarlas por las gafas, como ya os explicamos aquí.
“Menos bulos, más rigor científico” es un proyecto de DKV Salud con contenido editorial de Maldita.es.
Primera fecha de publicación del artículo: 17/09/2020.