El 28 de septiembre es el Día de Acción Global por un Aborto Legal y Seguro. En España existe el derecho a interrumpir voluntariamente el embarazo por cualquier circunstancia durante las primeras 14 semanas de gestación desde 2010. Pero, ¿qué opinan los españoles sobre el aborto? Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) la visión ha avolucionado bastante: de un rechazo por parte del 60% de la población en 1979 a tan sólo un 26% que se oponía en cualquier tipo de caso a esta práctica en 2011, última fecha en la que se preguntó.
En España el aborto se despenalizó en 1985, pero el CIS ya llevaba preguntando preguntando por él 6 años: las primeras opiniones se publicaron en el barómetro de noviembre de 1979. En él se recogía que sólo el 27% de la población estaba a favor de legalizarlo mientras que el 60% estaba en contra de hacerlo.
La siguiente pregunta del estudio matizaba la respuesta y un 31% de los españoles sí que estaba de acuerdo con que se permitiera cuando estuviera en peligro la vida de la madre o el hijo. Además, el 18% apoyaba que se practicara cuando hubiera riesgo de que el bebé naciera con discapacidad intelectual (en la encuesta del CIS aparece la palabra ‘subnormal’ porque era el término que se utilizaba en los años 60 y 70 para referirse a las personas con discapacidad intelectual). Sólo un 19% defendía que se practicara por libre decisión de la mujer.
El apoyo al aborto en casi todas las circunstancias creció durante los años 80
Después, entre 1983 y 1991, el CIS preguntó en 8 ocasiones a los españoles por situaciones en las que estaban de acuerdo con la interrupción voluntaria del embarazo. En estos años el apoyo a que se pudiera abortar “siempre que la madre lo decida libremente” aumentó con respecto a 1979: en febrero de 1983 ya era del 26% y en abril de 1991, del 44,4%.
Los españoles apoyaban más los abortos en los que existía riesgo para la madre, tanto ante una amenaza para su salud como para su propia vida. La mayoría de encuestados también defendía que se practicaran si se sabía que el bebé tendría una grave enfermedad incurable.
Aunque el apoyo a los abortos en casi todas las circunstancias creció entre 1983 y 1991, hay un motivo que cada vez menos españoles veían aceptable: los que se producían cuando el nacimiento de un niño pudiera causar a la madre "serias dificultades en el medio en el que vive". En 1986, la primera vez que se preguntó por esta opción, la apoyaban el 37% de los encuestados; en 1991, sólo el 29,7%.
La última vez que se preguntó por el aborto libre fue en 2011: el 47% de los españoles se mostraban a favor de él y el 26% en contra
En el siglo XXI sólo ha habido dos ocasiones en las que el CIS ha preguntado a los españoles si están de acuerdo con el aborto libre: en 2008 y en 2011. En febrero de 2008 un barómetro sobre religiosidad preguntó a los españoles si estaban de acuerdo con el aborto: el 22,8% de los españoles respondió afirmativamente, el 14,6% dijo que sí pero con reservas, el 33,6% que sólo estaba de acuerdo en casos específicos y el 25,8% que no estaba de acuerdo nunca.
Tres años después el CIS volvió a preguntar por el aborto, pero cambiando la pregunta y las opciones de respuesta. En enero de 2011 se pidió a los encuestados que puntuaran del 0 al 10 su grado de acuerdo con el aborto libre y sin restricciones. Casi 3 de cada 10 expresaron un apoyo de 9 o de 10, la máxima puntuación: las puntuaciones positivas (de 7 a 10) suman un 47,4% y las negativas (de 0 a 3), un 26%.
Hay que tener en cuenta que cuando salió este último estudio ya había entrado en vigor la ley de 2010 que legaliza el aborto en cualquier circunstancia durante las primeras 14 semanas de gestación, hasta la semana 22 en caso de riesgo para la embarazada o para el feto y sin límites en caso de anomalías fetales incompatibles con la vida. Eso sí, desde 2015 las menores de edad necesitan permiso paterno para interrumpir voluntariamente su embarazo.