MENÚ
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, realiza un promedio de 5,15 viajes al mes con el Super Puma u otros helicópteros del Ministerio de Defensa, según los datos de Presidencia del Gobierno. Este promedio de Sánchez es mayor que el de Aznar, 4,7 viajes mensuales, o Rajoy, 0 viajes mensuales, pero menor que el de Zapatero.
El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero lidera el ranking de jefes de Gobierno que más han usado el Super Puma con un promedio de 6,16 viajes mensuales. Rajoy, en cambio, se queda a la cola, ya que no utilizaba este vehículo aéreo tras sufrir un accidente en uno de ellos junto a Esperanza Aguirre en 2005. Aunque la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría “sí lo hacía de forma esporádica”, según la propia Moncloa.
Sánchez ha realizado 58 viajes con el helicóptero presidencial desde que llegó a Moncloa, el 2 de junio de 2018, hasta el 6 de mayo de 2019, fecha en la que se solicitó esta información a través de la Ley de Transparencia.
Luis Salom, asesor del PP valenciano, fue quien solicitó esta información. Moncloa no se la aportó y tuvo que acudir al Consejo de Transparencia y Buen Gobierno (CTBG). Los viajes de los expresidentes Rajoy, Zapatero y Aznar, en cambio, Moncloa los ha hecho públicos en cuanto se le han solicitado, tanto en preguntas parlamentarias como a través de una petición de acceso a la información pública realizada por Maldita.es.
Lo que ha sucedido con la petición de Salom sobre los vuelos en helicóptero de Pedro Sánchez ya pasó cuando Maldito Dato pidió los vuelos en Falcon de los presidentes del Gobierno de la historia democrática. Presidencia no informó sobre los vuelos de Sánchez hasta que el Consejo de Transparencia estimó la reclamación interpuesta por este medio. Esos datos demostraron que Sánchez es el presidente del Gobierno que más usa el Falcón.
A pesar de todo, es la primera vez que Moncloa cumple una resolución del CTBG sobre los vuelos de Sánchez en helicóptero. Servimedia ya lo había solicitado y el Consejo le había dado la razón el pasado mes de marzo, pero Moncloa no ha hecho públicos los datos hasta ahora.
Sánchez utiliza el Super Puma para ir a la base aérea de Torrejón de Ardoz
No obstante, Moncloa debería haber entregado también a Salom, el solicitante, la fecha y los destinos de los vuelos en helicóptero de Sánchez, tal y como resolvió el Consejo de Transparencia. A pesar de ello, Presidencia no ha cumplido con esa parte de la resolución alegando “motivos de seguridad”.
El Gobierno tampoco ha informado de los altos cargos que acompañaron a Sánchez en esos viajes, otro de los elementos que pidió Salom y que estimó el Consejo. Moncloa sigue, por lo tanto, incumpliendo gran parte de la resolución del CTBG y se ampara en considerar la información que no entrega como clasificada, un argumento que el Consejo ha desmentido tanto en esta resolución como en muchas otras.
A pesar de que Presidencia sigue ocultando el destino y fecha de cada uno de los vuelos en el Super Puma del presidente del Gobierno, sí ha informado de que “la práctica totalidad de ellos es a la base militar de operaciones del Grupo 45 del Ejército del aire”. Esta base se encuentra en Torrejón de Ardoz y es donde se encuentra el Falcon que Sánchez utiliza para sus viajes en avión oficial.
Precisamente la cifra de viajes en helicóptero de Sánchez (58 con datos a 6 de mayo) es muy parecida a los que ha hecho en el Falcon (59 con datos a 28 de mayo). De hecho, Sánchez utiliza el helicóptero, sobre todo, para el trayecto entre Moncloa y Torrejón de Ardoz, tal y como ha publicado la prensa y reconoce ahora la propia Presidencia del Gobierno. Ese recorrido en coche supondría 25,7 kilómetros de trayecto y un tiempo aproximado de media hora, según Google Maps.
Moncloa sigue sin publicar los gastos del Super Puma
Presidencia del Gobierno, además, sigue sin publicar cuanto cuestan los viajes de Sánchez en el Super Puma. Moncloa ha decidido cumplir con las resoluciones del Consejo de Transparencia y hacer público el número total de viajes en el helicóptero presidencial, pero no el coste de estos.
El pasado mes de marzo el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno dio la razón a Maldita.es en una resolución y dijo que Moncloa debía hacer público cuánto costaban estos vuelos. A pesar de ello, Presidencia no ha cumplido ni ha recurrido ante los tribunales, pero el Consejo de Transparencia no puede hacer nada al no tener capacidad sancionadora.
Moncloa, tras la resolución del Consejo de Transparencia, reiteró ante la solicitud de Maldito Dato que “en cuanto al coste de los viajes (o el del carburante) se ha venido considerando desde siempre materia reservada que exige la necesidad de restringir este tipo de información, cuya divulgación a personas no autorizadas puede generar riesgos o perjuicios graves para la seguridad y defensa del Estado”.
Esta interpretación de Moncloa la ha desmentido el Consejo de Transparencia en multitud de ocasiones, lo hizo incluso en esa ocasión tras la reclamación de Maldita.es. “El acuerdo de Consejo de Ministros de 1986, que clasifica esta información no lo hace al completo. Es decir, no clasifica el gasto total”.
Es más, el Consejo remachó que “lo esgrimido por Presidencia no sirve para clasificar ni para denegar la información solicitada” y que “los gastos de viajes de los miembros del Gobierno constituyen información de carácter económico y se nutren de partidas presupuestarias establecidas en los presupuestos generales del Estado; es pues dinero público y su manejo y destino debe ser conocido por la ciudadanía”. A pesar de ello, Moncloa sigue sin dar esa información.
Presidencia no cuenta cuánto cuesta el carburante del Super Puma
Moncloa se ha negado a hacer público cuánto cuestan viajes o vuelos completos de Pedro Sánchez en el helicóptero presidencial, pero no es lo único. Tampoco ha querido aclarar cuánto cuesta el carburante del Super Puma, a pesar de que el Consejo de Transparencia también les haya advertido por ello.
Maldita.es pidió ese coste para el viaje que hizo en junio de 2018 en Super Puma a La Rioja. Ese vuelo fue para acudir a la boda de su cuñado en la Rioja, según publicó El Confidencial. A pesar de que el Consejo de Transparencia dio la razón a Maldito Dato, Moncloa incumplió la resolución alegando que técnicamente no podía saber cuánto había costado el carburante para un vuelo concreto.
