Este artículo se irá actualizando con posibles respuestas de las juntas electorales o personas expertas en la materia
En los mapas de resultados calle por calle de las elecciones europeas del 9 de junio que se han publicado en medios de comunicación, los resultados de Junts en fuera de Cataluña en sitios como Madrid, Zaragoza o las Islas Canarias han generado sospechas, señalamientos y acusaciones entre diversos usuarios.
La explicación más probable es un error humano en la transmisión de datos al cierre de la jornada electoral, cuando una persona de la administración introduce los datos del acta de la mesa electoral en una aplicación informática y los envía al Ministerio del Interior. También pueden haber errores al rellenar las actas de las mesas.
Estos datos provisionales en ocasiones contienen errores, como ya se ha visto en otras ocasiones. Los definitivos y por tanto válidos a efectos legales se determinarán entre el 14 y el 17 de junio en el escrutinio general en el que se revisan y contrastan las actas de todas las mesas.
Las anomalías señaladas se han producido en diferentes puntos de España y con diferentes partidos
Con la publicación de mapas en los que se muestran los resultados de las votaciones del 9 de junio por secciones censales, varios usuarios se valieron de las redes sociales para reclamar que en localidades fuera de Cataluña, como Madrid, Zaragoza o las Islas Canarias, la agrupación Junts obtuvo victorias puntuales. Estos usuarios compartieron los mapas con mensajes de “sospechosas irregularidades”, “¡Escándalo!” o acusaciones directas de amaño electoral.
Poco a poco, han surgido señalamientos similares con más localidades, en secciones censales en Sevilla, Murcia, Salamanca, Valencia o Extremadura en los que, en medio de votos hacia el PSOE o hacia el PP, aparecen tonos verdes de Junts en el mapa.
Se detectan anomalías en varias mesas en los que el PSOE no tiene ningún voto, pero donde Junts o Andalucistas sí
Maldita.es ha consultado los resultados provisionales proporcionados por las delegaciones del Gobierno en los que se basan los mapas. Estos datos muestran que las anomalías en los datos se producen de forma similar en varios lugares y que no guardan correlación con los resultados de las mesas de sus zonas contiguas.
Aquí puedes ver algunos ejemplos de mesas en las que se han denunciado resultados anómalos según los datos de las delegaciones del Gobierno. El orden de las columnas es el mismo que el que proporciona el Gobierno en los datos y el que aparece en las actas:
En estos casos se puede apreciar que cuando Junts registra resultados demasiado altos para su zona, el PSOE no ha tenido votos. No pasa solo con Junts, también a veces se asignan estas anomalías al partido Andalucistas, al partido Escaños en Blanco o a CRT, todos ellos con un apoyo muy escaso en las mesas electorales de sus alrededores.
En Maldita.es hemos detectado 254 mesas con posibles resultados anómalos para cinco partidos, PSOE, PP, Vox, Se Acabó la Fiesta o Podemos. Según este análisis, el más perjudicado de los cinco habría sido el PSOE, y el que menos, Vox.
Maldita.es accede a la copia de un acta que muestra que los resultados son diferentes a los que muestran los datos provisionales
Un apoderado de un partido, que prefiere permanecer en el anonimato, ha facilitado a Maldita.es una copia del acta de la mesa en la sección 29 del distrito 1 de Madrid ubicada en el barrio de Lavapiés. En esa sección electoral, el partido más votado ha sido el PSOE, con 167 votos, y no Junts, como muestran los datos del acta.
Los datos son diferentes a los comunicados a la Delegación del Gobierno. Por ejemplo, mientras que en los de la delegación, PP y Vox cuentan con 76 y 0 votos, en el acta aparece que tienen 24 y 76 respectivamente.
En general, parece que los resultados han sido desplazados y desde el partido que ha facilitado el acta a Maldita.es indican que pudo tratarse de un “error en el volcado de datos” al centro de datos electorales mediante una tablet, una vez ya había concluido el recuento y se habían firmado las actas.
Los mapas de resultados calle a calle pueden contener errores: ha ocurrido también en otras ocasiones, como en 2019
Los mapas publicados por medios de comunicación como elDiario.es, El País, RTVE o El Confidencial pueden contener datos erróneos. Como hemos comentado, los mapas contienen los resultados provisionales que proporcionan las delegaciones del Gobierno y que son transmitidos durante la noche electoral por el personal de la administración presente en los colegios.
Esto supone que puede tratarse de un error humano producido durante el recuento electoral, el cual puede ser subsanado, como os hemos contado en Maldita.es.
En 2019 hubo un caso similar. En las municipales (que coincidieron con las europeas), el Ministerio del Interior reconoció errores en los resultados provisionales. elDiario.es ubicó algunos de estos errores en Almería, Córdoba, Madrid o Zaragoza.
Según reportó en ese momento elDiario.es, la causa de los errores fue que “SCYTL, la empresa adjudicataria de las elecciones del 26M y de la difusión provisional de los datos, ha seguido un criterio que ha ‘provocado malentendidos’”.
A Junts le bastaron sus resultados en Cataluña para conseguir un eurodiputado: los votos en el resto de España no han tenido un gran impacto en el resultado final
El coste medio para haber accedido a un escaño en estas elecciones ha sido de 283.728 votos y, según los resultados provisionales, Junts consiguió un eurodiputado con 443.275 votos. Es decir, le habrían sobrado más de 150.000 votos para obtener representación.
El partido catalán sólo recibió 12.350 votos (2,8% del total de sus votos) fuera de su comunidad, por lo que estos pocos miles de votos no afectaron al reparto final.
Los votos fuera de Cataluña tampoco le han servido para acercarse a un posible segundo escaño. Habría tenido que salvar una distancia de más de 80.000 votos con el PSOE, según muestra el portal de resultados provisionales. De hecho, Junts ha sido el más perjudicado en relación votos/escaños en esta cita electoral.
En el análisis de posibles anomalías detectadas por Maldita.es, Junts habría recibido votos que podrían haber sido para el PSOE, por lo que sería improbable que la corrección de errores disminuyese esta distancia y que facilitase este segundo escaño.
También puede haber errores en las actas: las actas relevantes para el recuento definitivo son las de sesión, no las de escrutinio
No solo son los mapas. Se han difundido fotografías de actas electorales que muestran datos anómalos para Junts, como en esta de un colegio electoral de Barbastro (Huesca).
Al comparar sus resultados en los datos de la Delegación del Gobierno de Aragón, se puede observar que se trata de nuevo, al igual que en los casos ya expuestos, de una anomalía, ya que no guardan coherencia con los de las mesas electorales de su alrededor.
El acta que se comparte en este caso concreto es un acta de escrutinio y no el acta de sesión, que es la que se envía a la Junta Electoral para su posterior revisión en el escrutinio general.
Las actas de sesión se revisan y comparan entre sí posteriormente y si se detecta algún error aritmético o material en el recuento de votos se debe corregir. La profesora de Ciencias Políticas de la Universitat de Barcelona, Esther Pano, ha explicado a Maldita.es, que si el acta de sesión es correcta y ha habido un error en la transmisión de datos o en un acta de escrutinio, se debe corregir.
Ahora, si el acta de sesión coincide con la de escrutinio, estos resultados se dan por buenos. Según Esther Pano “los documentos originales firmados por los miembros de la mesa son oficiales y los votos se destruyen tras el recuento”. La experta aclara que ante la falta de otra evidencia de contraste, “el acta de sesión es el documento válido”.
Las anomalías en los datos y las actas pueden deberse a errores humanos que deben subsanarse en el escrutinio general del 14 al 17 de junio: los partidos pueden plantear recursos si detectan irregularidades
Cuando termina el escrutinio, son los miembros de las mesas los que cuentan los votos y rellenan las actas. Posteriormente, una persona envía a la Administración por teléfono o mediante una aplicación informática esos resultados provisionales al centro de datos electorales, encargado de su difusión, tal y como se explica en el pliego del contrato con Indra.
Tras el cierre de los colegios electorales a las 20 horas del 9 de junio (excepto en Torrelodones), el presidente de cada mesa electoral se encargó de hacer el recuento extrayendo uno a uno los sobres de la urna y diciendo en voz alta la candidatura votada en el Parlamento Europeo.
Tras el recuento se comprueba que el número de sobres es el mismo que el de los votos anotados.
De este escrutinio se levanta acta y se hacen varias copias: a cada representante de candidatura que lo solicite se le da una, y a la Administración se envían los resultados provisionales por teléfono o mediante una aplicación informática al centro de datos electorales, que es quien los difunde.
Más tarde, durante el escrutinio definitivo (del 14 al 17 de junio en las europeas) las copias de las actas deben ser revisadas y comparadas entre sí, para ver si contienen errores. Las juntas electorales no pueden cambiar los votos incluidos en las actas a no ser que considere que ha habido “error material o de hecho o aritmético”, en cuyo caso lo corregirán [art. 106].
Si algún partido no está de acuerdo con este escrutinio general por posibles irregularidades, puedepresentar reclamaciones ante las propias juntas electorales, que deben resolverse en los dos días siguientes. También pueden recurrir la decisión de la junta ante un juzgado si así lo estiman oportuno, como os contamos en Maldita.es.
*Actualización a 13 de junio de 2024: Hemos incluido el caso de un acta electoral que muestra una anomalía en los resultados de Barbastro (Huesca).
*Actualización a 17 de junio de 2024: Hemos incluido que a Junts le bastan sus resultados en Cataluña para tener representación y la respuesta de una experta en Ciencias Políticas a Maldita.es sobre los posibles errores en las actas
Primera fecha de publicación de este artículo: 12/06/2024