“Nunca antes había participado activamente en la política, pero creo que esta vez está en juego la civilización tal como la conocemos. Si queremos preservar la libertad y la meritocracia en Estados Unidos, Trump debe ganar”. Así ha descrito Elon Musk, el dueño de X, Tesla y Space X y la persona más rica del mundo (según la agencia Bloomberg), su postura en las elecciones de EEUU del 5 de noviembre de 2024.
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Musk ha donado millones de dólares a organizaciones y comités de acción política pro Trump que hacen campañas contra Harris
En marzo de 2024, Musk tuitéo: “Para ser muy claro, no donaré dinero a ninguno de los candidatos a presidente de Estados Unidos”. Pero en muy poco tiempo esto cambió. En octubre, datos de la Comisión Electoral Federal detallaron que el millonario había donado casi 75 millones de dólares al comité de acción política (PAC, por sus siglas en inglés) pro Trump que fundó él mismo, llamado America, en siete donaciones entre julio y septiembre de 2024. Según Brendan Fischer, director ejecutivo del proyecto de periodismo de investigación Documented, Musk habría hecho otra donación durante la primera mitad de octubre, llegando a un total 118.550.000 de dólares. Actualmente, America PAC está siendo investigado en Michigan por recopilar datos personales a través de la web que habilitaron para registrar votantes.
Además, a través de America PAC, Musk está sorteando un millón de dólares (unos 925.000 euros) cada día hasta las elecciones entre las personas que se registren a votar en los estados bisagra o swing states (que pueden determinar los resultados de las elecciones) y firmen una petición en apoyo a la libertad de expresión y al derecho de portar armas. El fiscal del distrito de Filadelfia presentó una demanda civil contra el sorteo para “proteger al público de la interferencia con la integridad de las elecciones”.
Pero las donaciones de Musk no terminan ahí. Una investigación del Wall Street Journal (WSJ) reveló que el empresario había donado decenas de millones de dólares a grupos con lazos con Trump. “Estas donaciones lo convierten en uno de los mayores donantes a causas conservadoras, lo que, en combinación con su gran cantidad de seguidores en redes sociales, lo vuelven una de las figuras más influyentes en la política estadounidense”, señaló el WSJ.
Uno de estos grupos con vinculación a Donald Trump, Building America’s Future, creó Progress 2028, una web que se hace pasar por una web de campaña de Harris que incluye versiones exageradas o engañosas de sus propuestas que desinforman a los votantes. Esta organización política sin ánimo de lucro ha invertido más de 328.000 dólares en anuncios en Facebook e Instagram durante la última semana para que esta web llegue, principalmente, a mujeres en los estados bisagra (también la difunde a través de mensajes de texto).
Según la investigación del WSJ, Building America’s Future entregó dinero de sus donaciones a otros PAC como Future Coalition. Este comité está detrás de la campaña de anuncios que mostraban a una Kamala Harris propalestina en Pensilvania, el estado con la mayor población judía de EEUU, y una Harris proisraelí en Michigan, un estado con mucha población árabe-musulmana.
Musk utiliza su cuenta de X, la más seguida de la plataforma, para publicar mensajes polémicos y desinformadores sobre Harris y cuestionar la seguridad de las elecciones
Si Musk tiene algo que decir, ya sabemos por donde lo dirá: X. Su perfil es el más seguido en la red social, con más de 202 millones de seguidores, lo que le da un alcance enorme a sus mensajes. Según una investigación de CBS News, desde enero de este año, Musk ha acumulado casi 3,3 miles de millones de visualizaciones en tuits que generan dudas sobre la seguridad de las elecciones. Además, un 55% de estas publicaciones incluyen contenido falso o engañoso, o amplifican publicaciones que lo contienen.
Un análisis de Bloomberg afirma que el tema sobre el que más ha publicado Musk este 2024 ha sido el supuesto vínculo entre la inmigración y el fraude electoral. El millonario ha publicado más de 1.300 veces sobre el tema, con más de 330 posts en los últimos dos meses. Su teoría es que los demócratas pretenden legalizar a los inmigrantes para que voten por ellos en las elecciones. Un tuit del empresario, que tiene 45,8 millones de visualizaciones, dice: “La meta todo el tiempo ha sido importar la mayor cantidad de votantes ilegales posibles”. Otro, con más de 310.000 visualizaciones, elabora sobre este punto: “Mi predicción es que si Kamala gana, los demócratas importarán y legalizarán suficientes inmigrantes para asegurar un Gobierno permanente de un solo partido, que sea cada vez más socialista (hasta un nivel confiscatorio) y represivo”. Sin embargo, la ley federal establece que los inmigrantes que no tienen la nacionalidad estadounidense no pueden elegir presidentes ni congresistas.
Este vínculo entre demócratas e inmigrantes es recurrente en sus tuits. Durante el huracán Helene en EEUU, Musk se sumó a la narrativa desinformadora de que no había fondos para hacer frente a la emergencia porque se habían desviado para transportar “inmigrantes ilegales” al país. Según PolitiFact, el millonario repitió esta falsa narrativa por lo menos nueve veces en X, entre el 30 de septiembre y el 14 de octubre.
Durante estos meses de campaña, Musk también ha encontrado espacio para publicar declaraciones polémicas. Después del atentado contra Trump en Pensilvania, se preguntó en un tuit (que eliminó) por qué nadie estaba intentando asesinar a Biden y Harris. También tuiteó a Taylor Swift que “le daría un hijo y cuidaría a sus gatos con su vida”, después de que la cantante hiciera público su apoyo a Harris.
Además, ha compartido imágenes creadas con inteligencia artificial, como la imagen de Harris con un uniforme rojo con el símbolo comunista y el mensaje: “Kamala jura ser una dictadora comunista desde el primer día. ¿Puedes creer que lleve ese atuendo?”. La publicación de Musk tiene más de 84 millones de visualizaciones.
En su perfil apoya reiteradamente la candidatura de Trump (también con bulos), quien le ha prometido un rol en su nuevo Gobierno
Musk no solo se dedica a desprestigiar la campaña demócrata, también se toma el tiempo de publicar mensajes de apoyo para Trump, que incluso incluye en la descripción de su perfil: “Lee @America para saber por qué estoy apoyando a Trump para presidente”. El enlace de su perfil redirige a la web de America PAC y retuitea constantemente los contenidos de la cuenta oficial del PAC @america.
También utiliza su perfil para amplificar narrativas desinformadoras que pueden beneficiar a Trump. Por ejemplo, compartió una imagen creada con IA del expresidente abrazando a un pato y un gato, en relación a la campaña desinformativa que dice que los inmigrantes haitianos “ilegales” se comen a las mascotas de los estadounidenses. El tuit, que pinta de forma heroica a Trump, tiene más de 84 millones de visualizaciones.
Musk también motiva a sus seguidores a hacer público su apoyo a los candidatos republicanos Trump y J.D. Vance. “Lo mejor que podrías hacer en un vecindario demócrata es poner carteles de Trump/Vance en tu césped. Por favor, publica fotos en este hilo”, animó en un hilo que tiene más de 12 mil respuestas.
Sobre los resultados, el empresario va y viene entre mensajes positivos y otros que alertan sobre la supuesta manipulación demócrata. En su cuenta habla de “un cambio de sensaciones masivo en favor a Trump” y del aumento en el registro de votantes republicanos en estados bisagra como Pensilvania. También critica como “los demócratas gastan mucho más que los republicanos, cuentan con el respaldo de casi todos los medios de comunicación tradicionales y en línea y con casi todo Hollywood. Y siguen perdiendo”.
Pero, ¿qué gana Musk con una victoria republicana? Según una investigación del New York Times, el millonario ya cuenta con una influencia “extraordinaria” en el Gobierno federal. Sus empresas han recibido por lo menos 15.400 millones de dólares en contratos gubernamentales en los últimos diez años, pero también son el blanco de por lo menos 20 investigaciones recientes.
Una victoria de Trump podría hacer esta influencia aún mayor. El candidato republicano le ha prometido a Musk la jefatura de una nueva ‘comisión de eficiencia del Gobierno’, que le daría poder para recomendar recortes a las agencias federales y hacer cambios en las leyes. El propio Musk tuiteó una imagen generada con IA de sí mismo ocupando el puesto. “Esencialmente daría al hombre más rico del mundo y el mayor contratista gubernamental el poder de regular a los reguladores que controlan sus empresas, lo que equivaldría a un conflicto de intereses potencialmente enorme”, señala la investigación.
No solo lo hace durante las elecciones: Musk comparte desinformación, genera controversia sobre la libertad de expresión y hace señalamientos en X constantemente
El hombre más rico del mundo sabe bien cómo mover los hilos con un simple tuit. Por ejemplo, en 2022 revirtió la suspensión de la cuenta de Donald Trump (que fue cancelada después del asalto del capitolio) con una encuesta en X. Ese mismo año también difundió el hilo ‘Twitter Files’ sobre un supuesto debate para frenar la difusión de un artículo comprometedor del hijo de Joe Biden, Hunter.
Dos años después, Musk sigue haciendo y deshaciendo a través de la plataforma. El millonario compartió desinformación en X durante los disturbios de Reino Unido. Además, el bloqueo de la red en Brasil expuso, nuevamente, sus contradictorias opiniones sobre la libertad de expresión: se negó a bloquear cuentas en Brasil, pero sí había eliminado contenido en la India y Turquía. Después de criticar duramente el bloqueo y al juez Alexandre de Moraes (compartiendo una imagen generada con IA del juez encarcelado), la red social cedió en las exigencias y Musk optó por el silencio total.
Actualmente, Musk se enfrenta la investigación abierta de la Comisión Europea contra X por incumplir la Ley de Servicios Digitales (DSA). La investigación se abrió porque la red social “no cumplió con sus obligaciones” sobre contenidos ilegales y desinformación. Las conclusiones preliminares cuestionan el sistema de verificación, la transparencia en los anuncios y el acceso a los datos públicos.