“La Comisión Europea reconoce los casos mortales de las miocarditis y pericarditis de las vacunas del COVID-19”. Se han viralizado publicaciones que afirman que la Comisión Europea (CE) admite que las vacunas contra la COVID-19 pueden causar muertes por miocarditis (inflamación del músculo cardíaco) y pericarditis (inflamación de la membrana que rodea el corazón). En realidad, la ficha técnica de la vacuna de Pfizer (Comirnaty) se actualizó en agosto de 2023 para indicar que, aunque algunos casos requieren soporte de cuidados intensivos y se han observado algunos mortales, la mayoría de los casos de miocarditis y pericarditis tras la administración de la vacuna se recuperan. Además, estas dos inflamaciones son más frecuentes como consecuencia de la infección por COVID-19 que por las vacunas, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Se conoce este efecto secundario “muy raro” desde 2021
En julio de 2021, la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) actualizó la ficha técnica de la vacuna contra la COVID-19 de Pfizer al conocerse “casos muy raros” de miocarditis y pericarditis tras la administración de estos fármacos de ARN mensajero. Aun así, y según la EMA, “los beneficios de todas las vacunas autorizadas contra la COVID-19 siguen siendo superiores a sus riesgos” al reducir las muertes y hospitalizaciones debidas a la COVID-19.
En 2023 se incluyó en la ficha técnica que la mayoría de casos se recuperan y que solo algunos han sido mortales
El 29 de agosto de 2023, la EMA volvió a actualizar la ficha técnica de Comirnaty. Esta vez se añadieron dos frases respecto a la miocarditis y pericarditis: “Los datos disponibles indican que la mayoría de los casos se recuperan. Algunos casos requirieron soporte de cuidados intensivos y se han observado casos mortales”.
Lo que dicen la OMS, los CDC de Estados Unidos y la evidencia científica
A día de hoy, la OMS mantiene en su página web un apartado con preguntas y respuestas sobre la miocarditis y las vacunas de COVID-19, con fecha de octubre de 2021. En él aclara que se han notificado “casos muy raros” de miocarditis y pericarditis tras la administración de vacunas de ARNm (Pfizer y Moderna) contra esta infección, la mayoría de las veces después de la segunda dosis. También destaca que estas dos inflamaciones son más frecuentes por la propia infección COVID-19 que por las vacunas.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) también señalan que los casos de miocarditis y pericarditis después de la vacunación contra la COVID-19 “son raros” y que la mayoría de los pacientes “respondieron bien a la medicación y el reposo, y se recuperaron rápidamente”. La agencia concluye que “los beneficios de la vacunación superan cualquier riesgo conocido”.
Un estudio en más de 99 millones de personas vacunadas contra la COVID-19 publicada en febrero de 2024 analizó 13 de sus efectos secundarios de especial interés, entre ellos la miocarditis y la pericarditis, hasta 42 días después de la vacunación. La investigación concluyó que, aunque ocurren, los casos de miocarditis y pericarditis tras la primera y segunda dosis de vacunas de ARN mensajero “son raros”. En concreto, el riesgo de miocarditis fue de 6,1 por cada 100.000 personas vacunadas con la segunda dosis de la vacuna de Moderna. En cuanto a pericarditis, se reportó en 2,64 personas por cada 100.000 vacunados con la cuarta dosis de Moderna.
En la población europea, se ha estimado la frecuencia de miocarditis y pericarditis entre en uno y 10 casos al año por cada 100.000 habitantes, según la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). En España es de 11 casos anuales por cada 100.000 habitantes.
Sin rastro de un aumento significativo de muertes por miocarditis o pericarditis en España
Los datos de defunciones en España para 2021 y 2022 del Instituto Nacional de Estadística (INE) según la causa básica de defunción muestran que no hay un motivo para creer que las vacunas contra la COVID-19 estén causando un aumento de muertes por pericarditis o miocarditis. Según los datos publicados por el INE, en España fallecieron 43 personas por miocarditis en 2022, 13 más que en 2019, y 40 personas por pericarditis, 3 menos que en 2019.