menu MENÚ
MALDITA CIENCIA

La ilusión óptica del ‘agujero en expansión’: qué dice la evidencia científica y cómo funciona

Publicado
Comparte
Etiquetas

Si hay un tema sobre el que hemos escrito largo y tendido en Maldita.es es sobre ilusiones ópticas. Principalmente, hemos desmentido contenidos que atribuyen a estas imágenes la capacidad de indicar si un observador tiene un hemisferio predominante en el cerebro —condición que no existe—. En esta ocasión, te presentamos una ilusión óptica que ha despertado interés científico y que se ha empleado para recopilar más evidencias sobre cómo actúa nuestro cerebro y nuestras pupilas ante esta ilustración: la del ‘agujero en expansión’.

La imagen está compuesta de un agujero central negro que parece expandirse sobre un fondo blanco con puntos negros. A pesar de que se trata de una ilustración estática, el ojo humano lo interpreta como si estuviera en movimiento. Para conseguir un mayor efecto de esta ilusión, recomendamos observarla a pantalla completa. Ahora bien, ¿por qué resulta interesante, desde el punto de vista científico? Os contamos.

La pupila se ‘ajusta’ a esta ilusión óptica, según un estudio

¿Cuanto más miras el agujero central, más y más grande parece, hasta el punto que parece oscurecerse y hacerte sentir como si ‘entraras’ en un túnel? Esta sensación es subjetiva, sí, pero la pupila —el orificio que regula la luz que entra a nuestros ojos— también se ajusta a esta percepción cuando se ve la ilusión óptica, a pesar de que la cantidad de luz que reciben nuestros ojos no varía.

Esta es una de las conclusiones de una investigación publicada en mayo de 2022 en la revista Frontiers in Human Neuroscience. Para realizar el estudio, se pidió a los participantes que miraran la imagen y puntuaran la sensación de movimiento o expansión del agujero central. Al mismo tiempo, el equipo de investigadores midió con un rastreador ocular el grado de dilatación de las pupilas. El resultado fue una correlación entre la sensación —a priori, subjetiva— de movimiento y cuánto se dilataban las pupilas.

“La pupila reacciona a cómo percibimos la luz, incluso si esta ‘luz’ es imaginaria como en la ilusión, y no solo a la cantidad de energía luminosa que realmente ingresa al ojo. La ilusión del agujero en expansión provoca una dilatación correspondiente de la pupila, como sucedería si la oscuridad realmente aumentara”, explicó Bruno Laeng, investigador del departamento de Psicología de la Universidad de Oslo (Noruega) y primer autor del estudio, a Deutsche Welle.

Los investigadores también chequearon si se seguía estableciendo correlación a partir de esta sensación subjetiva cuando se diseñaba la ilusión óptica para aparentar la sensación contraria: la de un círculo que se ‘acerca’ y parece reflejar más luz cuanto más tiempo se mira. Aunque también vieron cambios en la contracción de la pupila, estos no eran tan nítidos como los que se daban con la ilusión del agujero negro.

Una de las ilusiones ópticas, llamada ‘ilusión Asashi’, que usa el efecto contrario de luz para comprobar si la pupila se contrae. Para notar mejor este efecto, recomendamos ver la imagen a pantalla completa.

Laeng también planteó en su cuenta de Twitter que la medición de las pupilas pueden ayudar a la comunidad científica a entender cuáles son los mecanismos que operan en nuestro organismo cuando estamos ante una ilusión óptica.

Cómo funcionan las ilusiones ópticas

Conchi Lillo, neurobióloga especializada en trastornos de la retina, explicaba a Maldita.es que percibimos muchas ilusiones ópticas gracias a que nuestro cerebro no tiene toda la información necesaria para procesar una imagen.

Así, el cerebro usa los datos disponibles más los que ‘guarda’ de situaciones previas similares. “Lo hace para ayudarnos y sin que seamos conscientes ni lo decidamos nosotros”, detalla. En esta, en concreto, en torno al 20% de los participantes no notaron el efecto de la ilusión óptica. El equipo cree que no contaban con esas experiencias previas necesarias para ‘rellenar’ la información y solo veían la imagen en dos dimensiones.

En este caso, los investigadores plantean que las ilusiones ópticas como la del ‘agujero negro’ —no parece tener nombre oficial como sí la tiene la ‘ilusión Asashi’, pero así la bautizamos nosotros—, que parecen tener dinamismo en su forma y suponer un cambio espacial, generan la percepción de movimiento en quien lo ve. Esta información visual recogida por la retina requiere una ‘interpretación’ cerebral que compense esa sensación de movimiento, que realmente no existe.

Hazte maldito, Hazte maldita
Te necesitamos para combatir los bulos y la mentira: sólo juntos podemos pararla. En Maldita.es queremos darte herramientas para protegerte contra la desinformación, pero sólo con tu apoyo será posible.

Eres muy importante en esta batalla para que no nos la cuelen. Seguro que tienes conocimientos útiles para nuestra batalla contra los bulos. ¿Tienes conocimientos de idiomas? ¿Lo tuyo es la historia? ¿Sabes mucho sobre leyes? ¡Préstanos tu Superpoder y acabemos juntos con los bulos!

También puedes apoyarnos económicamente. Maldita.es una entidad sin ánimo de lucro y que sea sostenible e independiente, libre de publicidad y con profesionales bien remunerados dedicados a luchar, contigo, contra la desinformación depende de tu ayuda. Cada aportación cuenta, cualquier cantidad es importante.