Como ya os hemos contado, durante meses el Ministerio de Sanidad y la OMS han defendido que la población general sana no necesita utilizar mascarillas para hacer frente a la pandemia de COVID-19. Más tarde estos organismos han recomendado su uso generalizado. También lo hacen algunos estudios. Os lo contamos.
El Ministerio de Sanidad al principio recomendaba las mascarillas personas enfermas, el personal sanitario, las personas que cuidan a enfermos y a aquellos a quienes el personal sanitario indique "en aquellas situaciones en las que se considere necesario". Después las hizo obligatorias en espacios públicos, tal y como os contamos aquí.
El 3 de marzo el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Tedros Adhanom Ghebreyesus denunció que "la escasez está dejando a los médicos, enfermeras y otros trabajadores sanitarios de primera línea peligrosamente mal equipados para atender a los pacientes de COVID-19, debido al limitado acceso a suministros como guantes, mascarillas médicas, respiradores, gafas, protectores faciales, batas y delantales",
La OMS ha defendido durante meses que la población general sana no necesita utilizar mascarillas para hacer frente a la pandemia de COVID-19.
Pero el día 5 de junio emitió una serie de nuevas recomendaciones sobre el uso de mascarillas que incluía que “para prevenir la transmisión comunitaria de la COVID-19, los gobiernos deberían alentar al público general que use mascarilla en situaciones y entornos específicos como parte de un enfoque integral para interrumpir la transmisión del SARS-CoV-2”. Por ejemplo, en el transporte público, tiendas, los centros de trabajo, reuniones, escuelas, iglesias, mezquitas u otros lugares concurridos. *********
Además, nos habéis señalado que en otros países y algunos artículos científicos sí promueven y recomiendan el uso generalizad de mascarillas contra el COVID-19. Os contamos lo que sabemos.
¿Mascarillas para todos?
Es cierto que las mascarillas, hasta las caseras, protegen aunque sea parcialmente contra el coronavirus. "Los virus suelen estar en gotitas minúsculas de saliva, y eso puede quedar retenido por unas dos o tres capas de tela. Es poco probable que un virus atraviese todas esas capas. El ponerle barreras al virus es un sistema eficaz para protegerse y proteger a los demás", explicó a Maldita.es la jefa del grupo de Inmunología y Genómica del Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo, centro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Beatriz Novoa.
"Sólo funcionan de forma segura las mascarillas que se usan en los hospitales fabricadas para específicamente retener virus. Y esas tenemos que dejárselas al personal sanitario que las necesitan mucho y no podemos desabastecer el mercado", aclara Novoa. Un estudio publicado en 2013 considera que las mascarillas caseras "sólo deberían se consideradas como un último recurso para prevenir la transmisión" de la gripe, "pero sería mejor que no haya protección".
Sanidad recomienda usar mascarilla en el transporte público (y las va a repartir allí)*****
Ante la vuelta al trabajo de muchas personas que no ocupan puestos considerados esenciales este lunes 13 de abril, el ministro de Sanidad Salvador Illa ha dicho en rueda de prensa este viernes 10 que, siguiendo las indicaciones del Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC), la recomendación es usar una nueva categoría de mascarilla, llamadas higiénicas, si el desplazamiento hasta el puesto de trabajo se hace en transporte público, y por tanto se van a facilitar en estaciones de metro y de cercanías. Ha especificado que no serán necesarias si el desplazamiento se hace en vehículo privado o andando.
Los CDCs estadounidenses ya las recomiendan a la población general***
Los últimos en cambiar de postura al respecto han sido los Centros de Control de Enfermedades estadounidenses, que la pasada noche del viernes 3 de abril publicaban un comunicado en el que recomendaban el uso generalizado de mascarillas o de otros sistemas para taparse la boca y la nariz a la población general, especialmente en lugares donde sea difícil guardar la distancia de seguridad, como tiendas y farmacias, y especialmente en regiones donde exista una alta transmisión de la enfermedad.
El cambio de postura, han explicado, se debe a que "recientes estudios han demostrado que una importante proporción de los individuos con COVID-19 no muestran síntomas (los llamados asintomáticos) e incluso aquellos que los terminarán desarrollando pueden transmitir el virus a otros antes de hacerlo (los presintomáticos)."
Esta nueva recomendación no sustituye a las indicaciones de mantener la distancia de seguridad con otras personas, han añadido. "Mantener un mínimo de 6 pies (aproximadamente 1,8 metros) de distancia social sigue siendo importante para frenar la expansión del COVID-19 Los CDCs también recomiendan el uso de telas para cubrirse la cara para frenar esa expansión y ayudar a que personas que puedan tener el virus y no saberlo no se lo transmitan a otras".
El Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades considera el uso general de mascarillas sobre todo en sitios públicos cerrados***
Por su parte, el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) el 8 de abril ha publicado un nuevo informe titulado El uso de mascarillas faciales en la comunidad: reducción de la transmisión de COVID-19 en personas potencialmente asintomáticas o presintomáticas mediante el uso de máscaras faciales. El texto apunta que "podría considerarse el uso de las mascarillas faciales en la comunidad, especialmente cuando se visitan espacios ocupados y cerrados, como supermercados, centros comerciales o cuando se usa el transporte público, etc."
El organismo también recalca en su documento que el uso de mascarillas faciales médicas por parte de los trabajadores de la salud debe tener prioridad sobre el uso en la comunidad. No obstante, apunta que el empleo de las mascarillas faciales en público puede servir como un medio de control de para reducir la propagación de la infección al minimizar la excreción de gotitas respiratorias de individuos infectados que aún no han desarrollado síntomas o que permanecen asintomáticos. "No se sabe en qué proporción el uso de mascarillas en la comunidad puede contribuir a una disminución en la transmisión, además de las otras contramedidas", puntualizan.
Respecto a las mascarillas caseras, "se podría considerar el uso de mascarillas faciales no médicas hechas de varios textiles, especialmente si, debido a problemas de suministro, se debe dar prioridad a las mascarillas médicas para su uso como equipo de protección personal por parte de los trabajadores de la salud".
Además, el ECDC destaca que el uso de mascarillas faciales en la comunidad debe considerarse solo como una medida complementaria y no como un reemplazo de las medidas preventivas establecidas (como son el distanciamiento físico, la higiene meticulosa de las manos y evitar tocarse la cara, la nariz, los ojos y la boca).
Algunos estudios apoyan su uso generalizado
"El material de la mascarilla quirúrgica reduce la probabilidad y la gravedad de la COVID-19 al reducir sustancialmente la concentración viral en el aire. Las mascarillas también protegen a los individuos no infectados de los aerosoles del SARS-CoV-2s". Eso afirma un artículo publicado en Science sobre cómo reducir la transmisión del coronavirus que causa la COVID-19. "Se necesitan mascarillas y pruebas para combatir la propagación asintomática en los aerosoles y las gotículas", concluye el artículo".********
Un trabajo científico analizó la transmisión del síndrome respiratorio agudo severo (SARS) en Pekín, una epidemia provocó la muerte de 800 personas entre 2002 y 2003. Los científicos concluyeron que el uso de mascarillas fue muy protector frente al SARS entre la población general: usar siempre una mascarilla cuando se salía de casa se asoció con una reducción del 70% del riesgo infectarse respecto a no usar nunca una mascarilla. "Nuestro hallazgo de que el uso de la mascarilla redujo el riesgo apoya el uso de esta estrategia" por parte de la población general, opinan los autores del estudio.
"Por supuesto, es cierto que las mascarillas no funcionan perfectamente, que no reemplazan el lavado de manos y el distanciamiento social, y que funcionan mejor si se ajustan adecuadamente. Y por supuesto, las mascarillas quirúrgicas no filtran las pequeñas partículas virales" como lo hacen las mascarillas FFP2 y FFP3. "Sin embargo, incluso las mascarillas quirúrgicas protegen un poco más que no usar mascarillas en absoluto", se argumenta en un artículo de opinión en The New York Times que cita un artículo científico sobre la relativa eficacia del uso de mascarillas quirúrgicas frente a la gripe.
"Sabemos, gracias a las investigaciones sobre la gripe, que el uso de mascarillas puede ayudar a reducir las tasas de transmisión, así como el frecuente lavado de manos y el distanciamiento social. Ahora que nos enfrentamos a una escasez de mascarillas con filtro, los Centros Federales para el Control y la Prevención de Enfermedades [de Estados Unidos] recomiendan que las mascarillas quirúrgicas sean "una alternativa aceptable" para los trabajadores de la salud - de nuevo, obviamente porque alguna protección, aunque sea imperfecta, es mejor que ninguna", según el artículo de The New York Times.
La autora del artículo argumenta que dado que hay "evidencia creciente de transmisión asintomática" del coronavirus y la OMS recomienda a las personas enfermas llevar mascarilla porque disminuye "las posibilidades de que las personas infectadas infecten a otros, entonces todos debemos usar mascarillas".
En países asiáticos han recomendado el uso universal de mascarillas contra el COVID-19
El artículo de opinión de The New York Times destaca que aunque la Organización Mundial de la Salud y países como Estados Unidos no recomienden el uso universal de mascarillas frente al COVID-19, otros gobiernos sí pidieron a toda su población que usase mascarillas y han tenido "la pandemia bajo un control mucho mayor, a pesar de haber tener muchos viajeros desde China continental".
Es el caso de Hong Kong. Yuen Kwok-yung, microbiólogo de la Universidad de Hong Kong y asesor de las autoridades de esta región administrativa especial de China para contener el coronavirus, considera que la petición al comienzo del brote de que todos usan mascarilla ayudó a parar la transmisión del virus en Hong Kong y ha recomendado en una entrevista "usar una mascarilla para protegerse no sólo a sí mismo sino también a los demás, porque si usted está infectado pero es asintomático, aún podría detener la propagación usando una mascarilla".
Según un estudio científico no revisado por expertos, entre el 74,5% y el 97,5% de la población adulta general de Hong Kong llevaba mascarillas cuando estaban fuera de casa entre enero y febrero de 2020.
En Singapur las autoridades distribuyeron a comienzos de febrero 5,2 millones de mascarillas entre la población general. En Corea del Sur los medios de comunicación y autoridades recomendaban usar mascarillas, entre otras medidas. El gobierno surcoreano también distribuyó mascarillas y limitó la compra a dos mascarillas por semana y persona. Las medidas tomadas por Corea del Sur para parar la transmisión del virus han sido alabadas por la Organización Mundial de la Salud.
Por su parte, las autoridades de Taiwán recomendaron el uso de mascarillas en las visitas a hospitales, en personas con síntomas de infección respiratoria y para cuando las personas con enfermedades crónicas saliesen de casa pero "las personas sanas y los estudiantes no necesitan mascarillas", según un aviso del 4 de febrero. Eso sí, el Gobierno taiwanés aumentó la producción de mascarillas al comienzo del brote en China, permitió la compra de dos mascarillas por persona y semana (como Corea del Sur) y priorizó la distribución entre ancianos que viven solos y personas con diversidad funcional física o mental.
Además, el primer ministro de Japón anunció el 1 de abril que el gobierno distribuirá mascarillas de tela a unos 50 millones de hogares, ya que las mascarillas se han agotado en las farmacias y otras tiendas.
El director general del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades ha declarado en una entrevista a Science Magazine ha declarado que en su opinión el gran error de Estados Unidos y Europa frente al COVID-19 es que "la gente no está poniéndose mascarillas". Según este científico, "muchas personas tienen infecciones asintomáticas o presintomáticas. Si usan máscaras faciales, pueden evitar que las gotitas que transportan el virus se escapen e infecten a otros".**
Varios países europeos fomentan u obligan a usar mascarillas*
De hecho, el Gobierno de Austria ha anunciado que todas las personas deben llevar mascarillas mientras hacen la compra. En República Checa el Gobierno hizo obligatorio el uso de mascarillas en público y ahora el uso es casi del 100% aunque la mayoría sean caseras, según el medio checo Prague Morning. En Eslovaquia también son obligatorias.
Obligatoriedad de mascarillas en lugares públicos******
Este sábado 2 de mayo, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez ha anunciado en rueda de prensa que a partir del lunes 4 de mayo será obligatorio el uso de mascarilla en el transporte público y que para facilitar el cumplimiento se repartirán 6 millones de mascarillas en los nudos de conexión, 7 millones a la Federación Española de Municipios y Provincias y 1,5 millones entre organizaciones como Cáritas o la Cruz Roja.
La portavoz de Gobierno, María Jesús Montero, indicó el pasado domingo 17 de mayo en rueda de prensa que, dada la opinión unánime de las Comunidades Autónomas sobre la conveniencia de hacer uso obligatorio de las mascarillas en los lugares públicos, "el Ministerio de Sanidad regulará la medida en los próximos días".
Por su parte, Salvador Illa, ministro de Sanidad, también confirmó tras la reunión con las Comunidades Autónomas del mismo domingo que "hay un consenso muy amplio en reforzar la obligatoriedad del uso de la mascarilla" por lo que "se está evaluando esta medida con las comunidades autónomas y con el conjunto de expertos para precisar en una orden ministerial en los próximos días". "Sí que habrá un reforzamiento de la obligatoriedad de las mascarillas pero, hasta que la orden no esté cerrada, no se podrán avanzar más detalles al respecto", concluía el ministro.
Según recoge el Boletín Oficial del Estado (BOE), a partir del jueves 21 de mayo el uso de mascarillas será obligatorio a partir de los seis años (aunque también es recomendable para los niños de entre tres y cinco), tanto en la vía pública, como en espacios al aire libre y en cualquier otro espacio público cerrado, siempre que no sea posible mantener la distancia de seguridad interpersonal (al menos dos metros).
Es decir, salvo en determinadas excepciones, como en personas que presenten algún tipo de dificultad respiratoria que pueda verse agravada al utilizarla y en aquellas cuyo uso se encuentre contraindicado por motivos de salud, a partir del 21 de mayo es obligatorio utilizar mascarilla (preferiblemente higiénica o quirúrgica) para la población general en las situaciones indicadas.
Además, el BOE recuerda la necesidad e importancia de seguir manteniendo la distancia interpersonal, el lavado frecuente de manos y las demás medidas de prevención recomendadas hasta el momento.
* Actualizado el 30 de marzo con más países que han impuesto el uso de la mascarilla.
** Actualizado el 2 de abril de 2020 con la medida de Japón y la entrevista al director general del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades.
*** Actualizado el 6 de abril para incluir la nueva postura de los CDC.
**** Actualizado el 8 de abril para incluir el nuevo informe del ECDC.
***** Actualizado el 10 de abril para incluir la recomendación del Ministerio de Sanidad.
****** Actualizado el 18 de mayo para incluir las novedades sobre la obligatoriedad del uso de mascarillas en lugares públicos anunciadas por Salvador Illa.
******* Actualizado el 20 de mayo para incluir la actualización del BOE en relación al uso obligatorio de mascarillas.
******** Actualizado el 28 de mayo con un estudio de Science.
********* Actualizado el 13 de julio con la decisión de la OMS de recomendar el uso generalizado de mascarillas.