Ya hemos aclarado que los pedos no previenen el cáncer pero también nos habéis preguntado si los mocos previenen enfermedades. Vamos a ello: efectivamente es un bulo.
Precisamente porque una función de los mocos es impedir la entrada de sustancias extrañas y bacterias a nuestro organismo NO deberíamos ingerirlos. No existe ningún estudio que recoja los supuestos efectos beneficiosos de esta peculiar práctica. Además, hurgarse en la nariz puede provocar hemorragias nasales graves, especialmente los niños.
El origen de este bulo se encuentra en la publicación de varios medios y originada en Kidspot que citan este estudio donde supuestamente se dice que “los mocos pueden tener muchos beneficios para la salud e incluso pueden ayudar a proteger los dientes”. La realidad es que el citado trabajo científico analiza el papel de las mucinas (unas proteínas) presente en la saliva en impedir la proliferación de las caries en los dientes. Nada que ver con comerse con los mocos de nuestra nariz.
Las publicaciones que han difundido este bulo también citan a Friedrich Bischinger, un médico austríaco especialista en neumología que defiende que "ingerir los restos de mucosidad seca es una forma ideal de reforzar el sistema inmunitario. Desde el punto de vista médico, es recomendable y es una actividad completamente natural. Para el sistema inmunitario, la nariz es un filtro en el que se acumula una gran cantidad de bacterias y cuando esta mezcla llega a los intestinos, funciona igual que una medicina". Este argumento no parece suficiente: la tierra también tiene una gran cantidad de bacterias y no la comemos.
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