¡Feliz viernes, malditas y malditos! Nuestro servicio de consultas no cierra en agosto así que aquí llegamos, una semana más, a resolver algunas de las dudas que nos habéis hecho llegar en los últimos días. Recordad que podéis seguir enviándonos preguntas a través de nuestro e-mail ([email protected]), WhatsApp (655 198 538), Twitter y Facebook.
¿Es perjudicial crujirse los nudillos?
Es un hábito gustoso para quien lo ejerce pero puede resultar muy molesto para las personas a su aldededor: apretarse los nudillos de los dedos con la mano contraria hasta chascarlos o crujirlos. Precisamente porque puede resultar un poco desagradable al escucharlo, nunca falta quien advierte al que lo hace de que esa costumbre puede causarles daños. La palabra artrosis suene mencionarse a menudo. ¿Hay algo de cierto en esto?
Pues todo apunta a que no. El sonido característico que se escucha al crujir los nudillos proviene de las pequeñas burbujas de gas que se forman entre las articulaciones, que al ser estiradas un poco más de lo habitual explotan produciendo ese sonido. El motivo por el que no se puede chascar el mismo nudillo varias veces seguidas es que esas burbujas tardan algo de tiempo en formarse de nuevo.
Según este artículo publicado en la página web de la Harvard Medical School, no parece haber un problema para la salud en este hábito: "Aunque ha habido informes ocasionales de dislocaciones o lesiones de tendones por crujirse los nudillos de forma demasiado vigorosa, estos incidentes son una rara excepción y no la regla".
Algunos estudios han analizado este tema y su conclusión coincide. Este, por ejemplo, estudió a 28 residentes de una residencia de ancianos que declararon si habían tenido el hábito de crujirse los nudillos y observaron que no parecía haber diferencia en el estado de sus articulaciones. En este curioso estudio, un mismo científico llevó el experimento en sí mismo: durante décadas se chascó los nudillos solo de una mano, siempre la misma, para observar si eso repercutía en la salud de sus articulaciones, y su conclusión era que no había diferencia en el estado de ambas manos. Su persistente autoexperimento le sirvió para ganar un premio IgNobel, la parodia de los Nobel, en 2009.
¿Crecen los niños cuando tienen fiebre?
Es una pregunta habitual que nos habéis hecho en muchas ocasiones: ¿qué relación hay exactamente entre la fiebre y el crecimiento de los niños? ¿Por qué después de un episodio de temperatura alta parecen haber dado un estirón? ¿Es la fiebre lo que les hace crecer o, por el contrario, es el crecimiento lo que hace que pasen unos días con la temperatura más alta de lo normal...?
"Esto es una percepción individual y no se produce cada vez que tienen fiebre pero detrás de esta apreciación hay algo de verdad", explica Gonzalo Oñoro, pediatra y uno de los autores del blog divulgativo Dos pediatras en casa.
La clave está en la acción de la hormona del crecimiento (HG por sus siglas en inglés), cuya producción puede aumentar durante los procesos febriles infantiles. "Es una hormona que se segrega principalmente durante las horas de sueño. Durante un proceso febril o infeccioso es normal que un niño duerma más horas de lo que lo hace habitualmente (la culpa es de las citoquinas, unas moléculas que el cuerpo segrega para combatir la infección, producen sueño) así que la secreción de la GH será mayor en estos periodos, lo que a la postre se traduce en un estirón", explica Oñoro.
Pero además, existen algunos estímulos que aumentan la secreción de esta hormona, como por ejemplo el ejercicio, el estrés físico, un traumatismo, una enfermedad aguda o la propia fiebre. "A menudo se asocia la hormona de crecimiento solamente con que los niños crezcan, pero es importante recordar que esta hormona ejerce otras funciones como son la síntesis de proteínas o el aumento de la glucosa en sangre, circunstancias necesarias para mantener una correcta homeostasis del organismo, tanto en situaciones de salud como de enfermedad", comenta Oñoro. En estos casos, por tanto, el cuerpo no aumenta la secreción de HG para crecer, algo que sería una especie de efecto secundario.
"En resumen, la unión de estos dos hechos, que los niños duerman más mientras están enfermos y que la fiebre estimula la liberación de la hormona de crecimiento, explicarían que los niños peguen un estirón pasar una enfermedad".
¿La comida calentada en el microondas se enfría antes?
De todas las formas posibles de calentar la comida, utilizar el microondas se lleva la palma en cuanto a la desconfianza que produce. ¿Destruye sus nutrientes? ¿Vuelve la comida peligrosa? En este caso, nos habéis preguntado si los alimentos que calentamos en este electrodoméstico pierden antes el calor y se enfrían antes.
Esto puede ocurrir en algunos casos, pero la culpa no es del funcionamiento del microondas, sino de las circunstancias diferentes en que se calientan los alimentos en este aparato en comparación con hacerlo al fuego o sobre una placa vitrocerámica o de inducción. Te lo explicamos.
El funcionamiento del microondas se basa en el uso de ondas para transmitir energía a las moléculas de agua que hay en los alimentos. Esas ondas hacen vibrar a las moléculas, que es lo que llamamos el calor. Una vez que un alimento está caliente, el proceso por el que pierde ese calor es siempre el mismo, da igual cómo se haya calentado: por transmisión de esa energía a otros cuerpos con los que esté en contacto que estén más fríos, como por ejemplo el recipiente que los contenga, otros alimentos que tengan menor temperatura o el propio aire que los rodea.
Y aquí es donde entran en juego algunas características del funcionamiento de un microondas que pueden hacer que los alimentos pierdan antes el calor. Por un lado, porque a diferencia de las ollas puestas al fuego o las bandejas en el horno, muchos recipientes no se calientan en el microondas, por ejemplo los hechos de cerámica o de cristal. Y si el alimento está caliente pero el recipiente no, el primero pasará parte del calor al segundo. Cuando nos quemamos los dedos al sacar un vaso de leche caliente del microondas no es porque las ondas hayan calentado el vaso. Es la leche caliente la que le ha pasado parte de su calor, perdiéndolo ella misma.
Por otro lado, a diferencia de los alimentos calentados al fuego, que vamos removiendo para que el calor les llegue de forma homogénea, en el microondas el calentamiento es más heterogéneo, es decir, unas partes del alimento pueden recibir más energía que otras y por tanto calentarse más. Las partes más calientes pasan calor a las más frías, resultando en que el alimento en su conjunto queda pronto más templado que caliente.
Por último, la cantidad de comida que calentamos en el microondas suele ser menor que cuando utilizamos otros métodos, y eso también favorece la pérdida de calor: una taza de café frente a la cafetera entera, o una ración de lasaña frente a una bandeja de lasaña completa. El motivo es que estas porciones tienen más superficie en contacto con otros materiales o con el aire, a los que traspasan parte de su calor.
¿La Coca-Cola sirve para limpiar metales y desatascar tuberías?
Existen muchos mitos en torno a esta bebida y uno de los más comunes es que sirve como limpiametales o para desatascar tuberías. ¿Tiene esto algo de cierto?
En realidad sí, pero solo un poco. La Coca-Cola, igual que los productos que se utilizan para limpiar metales o desatascar tuberías, es un líquido con ph ácido. Esa acidez se debe principalmente a uno de sus componentes, el ácido fosfórico, que se utiliza precisamente como limpiametales. Sin embargo, antes de pensar que la Cocacola es equivalente a un limpiador hay que tener en cuenta las distintas concentraciones de uno y otro producto.
Tal y como explica Beatriz Robles, dietista y tecnóloga de los alimentos, "la concentración de ácido fosfórico es muy inferior a la que podemos encontrar en productos específicamente formulados para limpieza: en la Cocacola el ácido fosfórico está en una concentración de, aproximadamente, un 0,058 % mientras que en los productos de limpieza la concentración es a partir de un 20 % (que, aunque se empleen diluidos al 1%, seguirán teniendo una concentración de acido fosfórico mucho más alta -un 0,2%)".
Por otro lado, la alta concentración de azúcar de la Coca-Cola es lo que lo convierte en un mal limpiametales (además de en un producto poco recomendable): "Esto hace que sea pegajosa y, al evaporarse el agua, cree una costra de azúcar en las superficies (lo que no ayuda a su limpieza, precisamente)."
Para terminar...
Una semana más, queremos agradeceros todos esos mensajes, tuits y correos. ¡Nos encanta saber que contáis con nosotros para resolver preguntas varias! Daremos respuesta a todo aquello que esté en nuestra mano, pero recuerda: no somos especialistas médicos. Para diagnósticos y dudas sobre casos particulares, mejor acude a un profesional.