En Maldita.es llevamos un año analizando las narrativas que circulan en torno a las políticas de cohesión de la Unión Europea, una iniciativa comunitaria que busca reducir las desigualdades económicas, sociales y territoriales de los diferentes Estados miembros a través de diferentes fondos. Hemos localizado mensajes que acusan al Gobierno de España de hacer una supuesta mala gestión de estos fondos europeos, otros que afirman que “benefician más a las personas inmigrantes” que a los españoles o que el presupuesto del país varía en función del número de denuncias por violencia de género que se hayan registrado en el mismo. Un grupo significativo de estos contenidos hacían alusión a dinero derivado de los fondos de recuperación habilitados tras la pandemia del COVID-19, que se han convertido en un foco de desinformación prácticamente desde su creación.
Las narrativas que atacan al Gobierno se centran en la supuesta mala gestión de los fondos por parte de la Administración
La UE ha reservado 392.000 millones de euros comunitarios (casi un tercio de su presupuesto total) para las políticas de cohesión. Más del 95% de este importe se reparte entre el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), el Fondo Social Europeo Plus (FSE+), el Fondo de Cohesión y el Fondo de Transición Justa. España es el tercer país que más dinero recibe de los dos primeros (que se reparten entre todos los Estados miembros según su nivel de desarrollo) con una asignación para estos años de más de 34.600 millones de euros. Precisamente el dinero de estas políticas es uno de los temas en torno a los que han surgido más narrativas: las más habituales acusan al Gobierno de España de gestionar mal estos fondos europeos.
Aunque nosotros no evaluamos la gestión de estos fondos, sí podemos contarte que la narrativa más repetida, según el análisis elaborado por Maldita.es en diciembre de 2024, se centraba en el supuesto desvío de fondos por parte del Ejecutivo. Algunos de los contenidos estudiados acusan al Gobierno de España de “quedarse dinero”, mientras que otros afirman que “no ha asignado el dinero” y la Unión Europea los ha “congelado” a modo de castigo.
La realidad es que los fondos europeos son gestionados por el Estado a través de proyectos que considera estratégicos o relevantes. Una vez diseñado un proyecto, se lanza una convocatoria a la que, en la mayoría de las ocasiones, concurren empresas privadas, que son las beneficiarias finalistas del dinero europeo. Algunas de las publicaciones identificadas que hablaban de la supuesta congelación de fondos se remontaban a 2023 y se trataba de un bulo: la entonces portavoz de Economía de la Comisión Europea aseguró que era una afirmación “infundada” y que España había cumplido “satisfactoriamente todos los hitos y objetivos vinculados a todas las solicitudes de pago presentadas hasta la fecha”. Sin embargo, sí ha habido ocasiones en las que se ha retenido parte del presupuesto por incumplimientos de objetivos.
Otra de las narrativas (la que más parece preocupar a los usuarios según el número de consultas recibidas) dice que no es posible fiscalizar qué hace el Gobierno con este dinero. En 2022, verificamos un vídeo que circulaba con mensajes que afirmaban que “la presidenta de la Comisión Europea” decía que no tenía ni idea “de lo que ha hecho el Gobierno de España con 11.500 millones de euros”. Al año siguiente, se compartían mensajes que afirmaban que “los hombres de negro” llegaban a España supuestamente para evaluar el uso de los fondos. Y en 2024 se viralizó un mensaje que aseguraba que el Tribunal de Cuentas anunció que “no era posible investigar a dónde han ido los fondos” repartidos por el Gobierno de España.
No hay rastro de ninguna publicación del Tribunal de Cuentas Español en el que se afirme que no es posible investigar dónde se destina el dinero de estos fondos. Además, la Comisión Europea tiene disponible una página web con datos y cifras sobre el gasto por países que van actualizando periódicamente. De hecho, en febrero contamos cuál era la situación de España y el dinero de las políticas de cohesión europeas. Ahora, según las últimas cifras actualizadas (a 24 de septiembre de 2025), el Gobierno español ha solicitado y, por tanto, recibido 1.453.429.727 euros. Esto supone el 4,1% sobre el total de dinero concedido al país para el periodo 2021-2027.

En cuanto al dinero ejecutado, España ha pasado de no haber gastado nada en octubre de 2024 a haber invertido el 4,8% a 30 de junio de 2025 (últimos datos disponibles publicados por la Comisión Europea). Los Estados miembros deben transmitir a la Comisión datos sobre el progreso en la implementación del programa cinco veces al año, que, tras la revisión de los datos por parte del organismo europeo, se publican online. La última actualización estaba programada para agosto y se publicará previsiblemente a principios del mes de noviembre.
Los fondos Next Generation, un foco de desinformación
El dinero en torno al que se han generado la mayoría de estos contenidos procedía de los fondos europeos de recuperación Next Generation (una herramienta creada para reparar el daño económico y social causado por la COVID-19, con una de sus patas centrada en políticas de cohesión). Y es que éste ha sido uno de los focos de desinformación en cuanto a la gestión del dinero relacionado con este mecanismo de la UE durante años.
La narrativa principal afirma que este instrumento excepcional de recuperación “se está desperdiciando”, destinando su dinero, según estos mensajes, a programas o actuaciones que no están justificadas o que no persiguen el beneficio colectivo. Un ejemplo son los mensajes que acusan al Gobierno de gastar millones de euros de este plan de recuperación en “reformar sedes sindicales”. Según esta nota de prensa del Ministerio de Hacienda sobre el Consejo de Ministros del 16 de noviembre de 2021, se aprobó un presupuesto de 98.232.000 euros para llevar a cabo estas obras en un máximo de cuatro años (con posibilidad de prórroga). Estas actuaciones se enmarcan en el Plan de Modernización de las administraciones públicas, incluído en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) financiado por los fondos Next Generation.
Otra de las narrativas asegura que el dinero de este mecanismo de recuperación se “regala”. “Papá Estado te regala 1.000€ para que te compres un ordenador si eres autónomo”, dice uno de los contenidos por los que nos han preguntado en Maldita.es. Estos dispositivos sí están financiados por estos fondos europeos, pero no son para todo el mundo. Se trata de una ayuda para la digitalización de pequeñas empresas, microempresas y autónomos de entre cero y tres empleados. Esta iniciativa forma parte del programa Kit Digital, un proyecto financiado por los fondos Next Generation y que se enmarca en el Plan de Digitalización de pymes 2021-2025 del Gobierno de España.
También se acusa al Gobierno de una supuesta falta de transparencia en cuanto a la gestión de este dinero europeo. En Maldita.es no entramos a analizar la gestión de estos recursos, pero te contamos cómo consultar la información disponible sobre su administración. El Gobierno de España ha habilitado la plataforma ELISA, una página web en la que puede hacerse un seguimiento de la ejecución de este plan de recuperación. Los usuarios también pueden descargarse datos actualizados emitidos por el Ministerio de Hacienda y los organismos de la Administración General del Estados sobre la ejecución y distribución de este plan e información sobre los mayores perceptores.
La violencia de género y la inmigración son dos contextos recurrentes en los que han surgido narrativas y desinformación
Habitualmente las personas inmigrantes son el objetivo de la desinformación. En numerosas ocasiones hemos alertado de narrativas estigmatizantes que les asocia con la violencia (como, por ejemplo, durante los incidentes en Torre Pacheco tras la agresión a un vecino de la localidad murciana el 9 de julio de 2025 o con el tiroteo en Suecia el 4 de febrero del mismo año en una escuela de adultos) o con privilegios en el acceso a las ayudas sociales. Dentro de este segundo grupo, encontramos contenidos que afirman que el dinero de las políticas de cohesión de la UE se utiliza para “beneficiar a los inmigrantes”.
Un ejemplo de estos contenidos es el que afirma que las personas extranjeras reciben más ayudas de estos fondos que los ciudadanos españoles es un mensaje que dice que “el 25% del Fondo Social Europeo está destinado a inmigrantes y MENAS” (sic.). El Fondo Social Europeo Puls (FSE+) es un fondo dentro de las políticas de cohesión para invertir en política laboral, social, educativa y de formación. Todos los Estados miembros deben destinar al menos el 25% de sus recursos del FSE+ a medidas de inclusión social “a grupos marginados”, entre los que se encuentran las personas en situación de pobreza, independientemente de su origen, a la población romaní, las personas con discapacidad o enfermedades crónicas, las personas sin hogar, los niños y las personas mayores. Parte del presupuesto de España para estos seis años (más de 11.000 millones de euros) se invertirá en medidas para “la cohesión social, las capacidades y el empleo” de las “personas de origen migrante”, entre otros colectivos.

También se tacha a las personas inmigrantes de ser desagradecidas. Circula una narrativa que les acusa de tirar a la basura los alimentos financiados por la Unión Europea a través de estas políticas de cohesión. Los contenidos desinformadores, habitualmente en formato de vídeo, muestran alimentos en la basura y señalan sin pruebas a personas inmigrantes y musulmanas de haberlos tirado. En Maldita.es llevamos verificando este tipo de contenidos desde 2019, aunque ya circulaban por redes sociales desde al menos un año antes.
Y todavía continúan viralizándose. En febrero de 2025 en Maldita.es ya alertamos de un vídeo que muestra varios alimentos asegurando que “dos mujeres marroquíes” los habrían tirado al lado de un contenedor. En las imágenes se pueden ver diferentes productos con etiquetas que señalan que pertenecen al “Programa de ayuda alimentaria para las personas más desfavorecidas”. Este proyecto está cofinanciado por el FSE+ y en ningún caso se hace distinción ni por nacionalidad ni por religión de los beneficiarios (define como persona desfavorecida aquella que se encuentre “en situación de pobreza económica”, “sin hogar y otras personas en situación de especial vulnerabilidad social”). En el vídeo que se difundió hace unos meses aparecen alimentos frescos y congelados (como sopa o pescado) o refrescos, que no entran en este programa. Además, en ningún momento en el vídeo se aportan pruebas de que hayan sido tirados a un contenedor o de quién supuestamente los ha tirado.

Por otro lado, otra de las narrativas sobre la distribución de este presupuesto europeo asegura que los países con más denuncias por violencia de género reciben más dinero. Sin embargo, la financiación europea "no se basa directamente en el número de denuncias", según aseguró la Comisión Europea a Maldita.es y en las ayudas a proyectos no se mencionan. Los fondos derivados de las políticas de cohesión europeas para luchar contra la violencia de género se reparten según la riqueza relativa del país: los territorios menos desarrollados (o más alejados de los objetivos de la Unión Europea) son los que más reciben para corregir esta tendencia a través de diferentes partidas.
Cuidado con los anuncios que ofrecen servicios o ayudas supuestamente financiadas por los fondos europeos
Entre los mensajes sobre los fondos de las políticas de cohesión europeas encontramos algunos que utilizan programas reales financiados por los fondos europeos y la imagen de instituciones para engañar a los usuarios. Por ejemplo, en noviembre de 2024, la Policía Nacional también advirtió de unas llamadas telefónicas en las que se ofrecía realizar aislamiento acústico y térmico de buhardillas en áticos y unifamiliares. Este supuesto servicio tenía un coste de un euro porque, según afirmaban, estaba financiado por los fondos Next Generation.
Maldita.es localizó anuncios en Facebook que también ofrecían este supuesto servicio de aislamiento gratuito en los que invitan a los usuarios a pinchar en un enlace para comprobar “su elegibilidad”. Ahí son redirigidos a una página web con los logos del Gobierno de España y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) junto al sello del Certificado de Ahorro Energético (CAE). Desde la Subdirección General de Eficiencia y Acceso al MITECO explicaron a Maldita.es que el contenido de los anuncios es “burdo, está plagado de falsedades e inexactitudes e invita a la desconfianza".
Mucho cuidado con este tipo de contenidos porque buscan hacerse con los datos personales y bancarios de los usuarios. En general, es recomendable no introducir datos personales ni bancarios en páginas web no oficiales o que generan desconfianza. Y, si lo has hecho, es recomendable realizar egosurfing: búscalos en internet para ver si se han publicado sin tu consentimiento.
