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¡Feliz sábado, malditas y malditos! Esperamos que hayáis podido disfrutar de los días festivos y hayáis empezado con ganas el mes de abril. Aquí muy felices después de leer vuestras respuestas a la encuesta que os dejamos hace dos semanas. Muchísimas gracias a todos los que habéis respondido y gracias de corazón por vuestras palabras. Al 88% os parece bien que se envíe los viernes (si quieres recibirla, puedes suscribirte aquí), así que aquí seguiremos.
Nueve de cada diez lectores nos habéis dicho que os gusta esta extensión y la mayoría estáis a gusto con lo que contiene, así que eso también lo mantendremos. Eso sí, hay sugerencias para añadir cosillas de todos los tipos y colores (¡y algunos queréis lo opuesto a otros!), así que intentaremos encontrar una solución mágica y poco a poco iremos incluyendo todas las que sean posibles. Gracias otra vez 💙 Vamos con la actualidad tech.
Sarah, consejos de salud, enlaces… y datos biométricos
Desde que se democratizaron los chatbots de IA con ChatGPT venimos advirtiendo de la importancia de no creer a pie juntillas lo que nos contestan, especialmente cuando se trata de temas que pueden poner en riesgo nuestra salud, como para la elaboración de dietas. Pues ahora, la Organización Mundial de la Salud ha presentado un asistente virtual basado en inteligencia artificial para que podamos hacerle preguntas sobre hábitos saludables y sanidad. Se llama Sarah. Sí, de nuevo nombre de mujer, qué sorpresa: pasó con Siri y Alexa y sigue sucediendo (y no es casualidad).
El caso es que la OMS directamente advierte que este asistente no se puede usar como un sustituto al asesoramiento profesional porque sus respuestas pueden no ser exactas, pero dicen que es una forma a futuro de dar mayor acceso y de manera más interactiva a la información sobre salud.
Si quieres probarlo, aquí te dejo el enlace, pero antes tengo que advertirte de que hay dudas sobre qué información personal puede recoger, porque para usar Sarah hay que dar acceso a nuestra cámara web y a nuestro micrófono. La OMS dice que esta información se anonimiza y que no se guarda, ni se divulga, ni se comparte con terceros, y que la usa para ofrecernos la mejor experiencia de usuario.
Pero hay que recordar que nuestro rostro y nuestra voz están considerados datos biométricos, con lo que esto implica. De hecho, según la política de privacidad de la compañía que ha desarrollado el chatbot, nos solicitarán consentimiento explícito para “recoger y usar información sensible”. Ya sabes, siempre hay que leer la letra pequeña y los términos y condiciones… En este caso, hemos comprobado que Sarah solo nos informa de la política de privacidad si no aceptamos los permisos de la cámara y el micrófono; si los aceptamos, no aparece el mensaje. Esto a veces pasa con algunos servicios, pero no deja de ser chungo. Hemos preguntado a la OMS por esta y otras cuestiones, te contamos lo que sabemos de momento sobre este asistente virtual aquí.
Hemos hecho algunas pruebas para enseñároslo (se puede tapar la cámara, no hablar y solo escribir 😏), y lo que hace es dirigirte a enlaces de la página web de la OMS.
Gracias, Sarah. Por cierto, hay un tema(zo) del grupo Revolver que dice: “Sara, oh oh ohhh, Saraaaa, no repitas lo que te enseñé”. Y ya sabemos que los chatbots de IA hacen eso: repetir como loros (y sin entenderlo) lo que han “aprendido” entrenados con cantidades ingentes de datos. ¿Le habrá pedido ayuda la OMS a Carlos Goñi para elegir el nombre? Les preguntaremos también.
¡Si solo ha sido un vistazo rápido a Twitter!
La última vez que saliste entre semana, ¿subiste una foto a Instagram bebiéndote una cerveza? ¿Has pensado esta mañana al llegar al trabajo con ojeras que igual no fue la mejor idea publicarla? Es normal que nos asalte la congoja, sobre todo si tenemos nuestras redes sociales abiertas o a nuestros compañeros (y jefes y jefas) en ellas.
No es la única duda relacionada con redes sociales y trabajo. Nos pusimos a darle vueltas y nos salieron un montón. ¿Pueden echarme por usar las redes sociales en el trabajo? ¿Y por expresar mi opinión política en la red? ¿Y si insulto a otras personas o subo contenidos inadecuados? Y si hago esto… pero para criticar a mi empresa o a mis colegas de curro, ¿sería un despido procedente? Bueno, bueno, y ¿qué pasa si se descubre a través de las redes sociales que he mentido para irme de vacaciones en lugar de estar de baja?
Por resumir muy mucho: el uso de las redes sociales sí puede ser una causa de despido si afecta a nuestro rendimiento o si está restringido en las condiciones del contrato; también puede haber consecuencias si insultamos a nuestros compañeros o dañamos la imagen de la empresa en la red. Tienes el resto de respuestas aquí.
En cinco bits
Senatus Populusque Romanus Tecnologus. Queríais más memes, aquí van más memes. Nos despedimos de la Semana Santa con esta ocurrencia que me sirve para recordar que ojo con los códigos QR que nos encontramos por ahí, porque pueden colarnos virus o archivos maliciosos en el móvil, y hasta hacernos caer en un fraude. Aquí consejos para evitar que nos la cuelen con el (SP)QR, que también se puede usar como forma de pago.
Alegato a favor de las contraseñas fuertes. Hablando de colárnosla, una forma muy fácil de que estemos expuestos en nuestra vida digital es teniendo contraseñas débiles. Ya sabes, no es buena idea eso de usar ‘admin’ o ‘1234’, pero tampoco combinaciones cortas y solo numéricas. Para entender muy claramente por qué, escucha esto: cualquier ordenador moderno es capaz (probando combinaciones de forma automática) de sacar una fecha de nacimiento de ocho dígitos en un segundo o menos, mientras que una clave de 12 caracteres con mayúsculas, minúsculas, números y símbolos tardaría más de 200 años en ser hackeada. Aquí tienes toda la información.
Qué pasa con los contenidos políticos en Meta. Esto aún no ha llegado a España (y no sabemos si llegará), pero te avisamos por si acaso o por si vives en Estados Unidos: Meta ha cambiado sus políticas de contenidos en Instagram, Threads y Facebook, y ha dejado de mostrar publicaciones políticas en ese país, incluidas las cuentas de figuras políticas. Varios usuarios han denunciado que estos cambios se han activado en Instagram por defecto y sin avisar, aunque se puede desactivar (si te enteras, claro).
No es tan de incógnito como parece. Google destruirá los datos de millones de usuarios para resolver una demanda colectiva en la que se acusa a la empresa de rastrear sin consentimiento a los internautas que utilizan la navegación privada, es decir, el modo incógnito. La big tech no ha informado de si hay datos de ciudadanos europeos afectados, hemos leído en elDiario.es.
El problema de los tres cuerpos, y el de qué hago yo si la serie no renueva. También nos pedisteis propuestas culturales en Tech en un clic, y aquí van. Seguro que has oído hablar de El problema de los tres cuerpos, la nueva serie de Netflix que aúna un par de cosas que probablemente a ti también te encantan: ciencia ficción y tecnología. No nos ha supermegahiperfascinado, pero que haya una producción así donde se hable de ciencia, nos gana (aunque hay quien piensa que ese es precisamente su problema). El tema es que parece que la audiencia no ha sido muy buena y hay rumores de una posible cancelación. En el peor de los casos, podemos leer el libro (es la adaptación de la primera de las novelas de la Trilogía de los tres cuerpos). Si la ves, dinos qué te parece y qué opinas del impacto de la tecnología en el universo que proponen, que no queremos hacer spoilers.
¿Tienes dudas sobre el día a día online? ¿Hay algún tema del mundo de la tecnología que te genere curiosidad y sobre el que te gustaría que ampliáramos información? ¿Quieres compartir algún tema interesante con la comunidad maldita? ¡Escríbenos a [email protected]! Y no olvides suscribirte.
