¡OJO! Originalmente este artículo formaba parte de una pieza que ha sido dividida en dos. Su versión anterior (que se puede consultar aquí) incluía otras situaciones relacionadas con la libertad de expresión, que ahora se pueden leer actualizadas aquí.
“El pájaro está liberado”. Con estas palabras celebró el multimillonario Elon Musk la compra de la red social Twitter por 44.000 millones de dólares, como recoge El País. El movimiento se cerró el 27 de octubre de 2022 tras meses de negociaciones, después de que las primeras operaciones comenzaran el pasado 25 de abril del mismo año.
Los meses que duró este movimiento fueron acompañados de múltiples mensajes publicados por el multimillonario, en los que enarboló la bandera por la libertad de expresión, de la que dice ser un auténtico “absolutista”. Pasados unos meses de la compra, Musk continuó haciendo alarde de que es un férreo defensor de la libertad de expresión, asegurando que es una "batalla" a librar para el "futuro de la civilización": "Si la libertad de expresión se pierde incluso en Estados Unidos, la tiranía es lo único que nos espera", aseguró en su perfil de Twitter.
No fue la única vez que el magnate habló sobre la plataforma y el concepto de "plaza pública". Musk aseguró que adquirió la red social porque “es importante para el futuro de la civilización tener una plaza digital común”, en la que “un rango de creencias se puede debatir de forma saludable, sin recurrir a la violencia”. “Lo hice para intentar ayudar a la humanidad, a la que quiero”, argumentó en un comunicado en Twitter tras la compra.
Desde que se anunció la transacción, esta ha suscitado más preguntas que respuestas. El primer movimiento del dueño de Twitter fue despedir a los principales directivos de la plataforma, apunta Reuters, mientras que su consejero delegado aseguró a los inversores de la compañía que planeaba recortar hasta casi el 75% del personal una vez que Musk tomara el control, según recoge The Washington Post. Durante una entrevista en la BBC en abril de 2023 Musk declaró que había recortado cerca del 80% de la plantilla.
Musk también ha ido advirtiendo en los últimos años de los cambios que ve necesarios para esta red social: desde la posibilidad de editar una publicación, eliminar en medida de lo posible los bots, hasta hacer públicos los algoritmos de la plataforma. No son pocos los planes que Elon Musk ha anunciado, y algunos de ellos ya os los hemos explicado en Maldita.es. También están actualizados los cambios que ha implementado desde que es dueño de Twitter.
Pero de todas las críticas y modificaciones que el multimillonario quiere implantar en Twitter, son los que tienen que ver con su concepción personal de la libertad de expresión los que más incertidumbre levantan entre los usuarios. La relación del empresario con este derecho es, cuanto menos, polémica.
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Denunciar a organizaciones contra el discurso de odio por supuestamente dañar a Twitter
Suspende cuentas tras decir que no lo haría por su supuesto compromiso con la libertad de expresión
Despedir a un ingeniero de Twitter después de llevarle la contraria en una conversación
Denunciar a organizaciones contra el discurso de odio por supuestamente dañar a Twitter
El 20 de julio de 2023 X Corp., la compañía que ha creado Elon Musk en su camino para transformar Twitter en la superapp X, envió una carta al Center for Countering Digital Hate (CCDH), una organización sin ánimo de lucro que lucha contra el discurso de odio en redes sociales, en la que asegura que las publicaciones de la ONG buscan dañar a Twitter y su modelo de negocio, según recoge The New York Times.
La carta, firmada por Alex Spiro (el abogado de Elon Musk) en representación de X Corp., asegura que la organización realiza “afirmaciones incendiarias, escandalosas y falsas o engañosas sobre Twitter y sus operaciones” que pretenden “perjudicar el negocio de Twitter alejando a los anunciantes de la plataforma”. En concreto, X Corp. señala una publicación en la que el CCDH asegura que Twitter no modera el discurso de odio de los perfiles que cuentan con una suscripción a Twitter Blue.
X Corp. también acusa a la organización de estar financiada por los rivales de Twitter y otras entidades gubernamentales para apoyar una “agenda ulterior”. Según el CCDH, esta carta supone un esfuerzo de la compañía de Elon Musk para “intimidar a quiénes tienen el valor de luchar contra el discurso de odio” y asegura que no acepta ninguna financiación de compañías tecnológicas o gobiernos.
Twitter aseguró en una publicación del 31 de julio (que ha superado las 11 millones de visualizaciones a 21 de noviembre de 2023**) haber presentado una denuncia contra la organización por participar en “una serie de actos ilícitos diseñados para acceder indebidamente a datos protegidos de X Corp.”, e incidía en que la organización está trabajando “para impedir la libertad de expresión”, según recogen Reuters y The Washington Post. Twitter apuntaba en concreto a una publicación del CCDH, recogida por Bloomberg, que habría utilizado los datos de la red social sin su autorización. En una actualización del 7 de agosto, X Corp. aseguró que la organización obtuvo acceso a los datos de Twitter gracias a la colaboración de la European Climate Foundation, que habría proporcionado "credenciales a CCDH incumpliendo sus obligaciones contractuales con Brandwatch".*
El 18 de noviembre Elon Musk anunció en una publicación en redes sociales que su compañía X Corp. se disponía a emprender acciones legales contra Media Matters for America, organización sin ánimo de lucro cuyo objetivo es la “desinformación conservadora”. “En el momento que abran los tribunales el lunes, X Copr presentará una demanda termonuclear contra Media Matters y todos aquellos que han contribuido en este ataque fraudulento contra nuestra empresa”, aseguró el empresario en la publicación, y que también detalló que iba a dirigirse contra “su junta, sus donantes, su red de dinero negro, todos ellos”.**
Media Matters for America publicó el 16 y el 17 de noviembre una serie de investigaciones sobre el sistema de publicidad de Twitter. Según la organización, la plataforma de Elon Musk estaría mostrando contenidos que apoyan el discurso nazi, el supremacisto blanco y mensajes antisemitas junto a publicidad de diferentes compañías como Apple, IBM u Oracle. De hecho, también el 16 de noviembre IBM anunció la retirada de sus anuncios de la red social tras las publicaciones de Media Matters, según The Financial Times. Unos días más tarde, el 21, X Corp. ha presentado una demanda ante los juzgados de Texas en la que piden la retirada de estas publicaciones y la reparación de los daños causados contra la compañía.**
Elon Musk dijo que “revertiría” el veto permanente a Donald Trump en Twitter si se cerraba la compra (y lo ha hecho)
En una conferencia organizada el 10 de mayo de 2022 por el Financial Times, Musk puso sobre la mesa su opinión sobre el veto permanente que pesaba sobre la cuenta del expresidente estadounidense Donald Trump y aclaró cuáles eran sus intenciones. “Revertiría la prohibición permanente (sobre Trump)”, aseguró el millonario, que incidió en que no sería “algo que vaya a suceder definitivamente”.
“Obviamente, todavía no soy dueño de Twitter”, argumentó el magnate, algo que cambió el 27 de octubre. Apenas tres semanas después de la compra, el 19 de noviembre, Musk lanzó una pregunta en su perfil personal sobre si debía restaurar la cuenta del expresidente, a lo que los usuarios respondieron mayoritariamente que sí. Esta acción fue suficiente para el empresario para reactivar la cuenta, que desde el 21 de noviembre está disponible. Trump volvió a realizar una publicación en Twitter el 25 de agosto de 2023, aunque a 12 de diciembre no ha vuelto a tener actividad en esta plataforma y por el momento ha preferido quedarse en su propia red social, Truth Social.
En un comunicado emitido el 8 de enero de 2021, el equipo de Twitter aseguró que la suspensión permanente del expresidente se llevó a cabo para prevenir el “riesgo de una mayor incitación a la violencia”, en el contexto del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021. Una medida que Musk tachó en la mencionada entrevista de ser “una mala decisión moral y extremadamente absurda”. “El veto a Donald Trump no acabó con su voz. Solo la amplificará dentro de la derecha”, argumentó. Otras compañías como Meta o Google también han levantado el veto a Donald Trump en 2023.
Tras hacer oficial la compra, uno de los primeros movimientos del magnate fue despedir a los principales directivos de la empresa. Entre ellos, Vijaya Gadde, uno de los nombres más relacionados con la salida de Trump de la red social, según recoge The Guardian.
No ha sido la única vez que Elon Musk ha dejado la decisión de levantar un veto a sus seguidores (o eso pretende dar a entender). El 9 de diciembre de 2023 el empresario lanzó una encuesta en su cuenta personal para restaurar la cuenta del fundador de InfoWars, Alex Jones, que fue expulsado de las redes sociales en 2018 por promover discursos de odio y por comportamiento abusivo. Pese a que en noviembre de 2022 Musk aseguró que no iba a restaurar su cuenta (y llegó a criticar a Jones en redes sociales), finalmente se ha retractado de su decisión asegurando que el “pueblo” había “hablado”. Pero tanto la encuesta sobre Jones como sobre Trump no se pueden considerar una votación representativa del sentir de Twitter, ya que “no son muestras representativas de la población”, señaló a Maldita.es el analista de datos Endika Núñez.
Twitter es una “plaza del pueblo digital”
No es la primera vez que Musk ha criticado las políticas de la red social, que en su opinión podrían ser “buenas” si “el 10% más extremista de la derecha y la izquierda están igual de descontentos" con ellas.
Desde que anunció su intención de comprar la red social, su actividad en este aspecto no ha hecho más que aumentar, asegurando que "la libertad de expresión es el fundamento de una democracia funcional, y Twitter es la plaza del pueblo digital donde se debaten temas vitales para el futuro de la humanidad".
Pero también llaman la atención otras publicaciones en las que ha utilizado memes del podcast de Joe Rogan (cómico estadounidense polémico por dar voz a discursos antivacunas y negacionistas de la COVID-19) para criticar la supuesta parcialidad de la red social en favor de la izquierda. O hacer como único responsable de la polarización política a la izquierda “woke” (un término con una connotación similar a la de “progre”).
Suspende cuentas tras decir que no lo haría por su supuesto compromiso con la libertad de expresión
También ha tenido contradicciones muy evidentes, hasta el punto de hacer algo que él mismo ha dicho que no haría, como suspender una cuenta por no privarla, supuestamente, de su libertad de expresión. Así, dijo el 7 de noviembre de 2022 que estaba tan "comprometido" con la libertad de expresión que no se había planteado suspender una cuenta que rastreaba su jet privado en la red social. El perfil se llamaba 'ElonJet' y lo gestionaba un programador que publicaba datos sobre los trayectos que hace el avión privado asociado al empresario.
Sin embargo, el 14 de diciembre la cuenta se suspendió por "incumplir las Reglas de Twitter", según la empresa. A 7 de agosto de 2023, esta cuenta sigue suspendida.
A raíz de este incidente con las cuentas que rastreaban datos de los aviones privados para publicarlos en Twitter, Musk optó también por suspender temporalmente las cuentas de varios periodistas que cubren asuntos tecnológicos -como todo lo acontecido con Twitter- y que habrían tuiteado enlaces compartidos por 'ElonJet' u otra información sobre estas cuentas: "Las reglas sobre revelación de información personal en Internet aplican a 'periodistas', igual que al resto", tuiteó Musk el 16 de diciembre. Así lo comunicó también en un 'Twitter Spaces' -un espacio de conversación en la red social- con otros periodistas que le rebatían sobre cómo esta acción entroncaba con su discurso sobre el respeto hacia la libertad de expresión.
Hizo además una encuesta para consultar con sus seguidores cuándo levantar el suspenso de estos perfiles, que borró por, supuestamente, "tener demasiadas opciones de respuesta". Luego publicó otra con solo dos opciones: inmediatamente o en siete días (en esta, la mayor parte pedía que se desbloquearan los perfiles). También la cuenta oficial de la plataforma Mastodon fue suspendida temporalmente, en teoría por incumplir las normas de Twitter (aunque, una vez más, no se especifican cuáles), después de compartir estos enlaces sobre el jet de Elon Musk, según recoge The Verge.
Despedir a un ingeniero de Twitter después de llevarle la contraria en una conversación
Poco después de la adquisición de Twitter, Musk comenzó a hacer cambios a diestro y siniestro en la plataforma y a tuitear una serie de afirmaciones sobre las cosas que, según él, no funcionaban en la red social. Entre muchas de las reacciones a los distintos mensajes, el extrabajador Eric Frohnhoefer mencionó uno de ellos, en el que Musk explicaba el 13 de noviembre por qué la aplicación iba lenta en algunos países, afirmando que lo que había dicho no era correcto, basado en su trabajo previo en la empresa.
Musk contestó al trabajador pidiéndole que "le corrija" y cuestionando su trabajo: "Twitter va super lento en Android. ¿Qué has hecho tú para arreglar eso?". Frohnhoefer ofreció una serie de respuestas, pero Musk no volvió a responder en esta conversación.
Poco después, otro usuario cuestionó la actitud de Frohnhoefer, a lo que Musk respondió asegurando que estaba "despedido". Unas horas después, el ingeniero denunció haber perdido el acceso a su ordenador y varios medios como Forbes o Bloomberg se hicieron eco del despido.
Musk borró el tuit en el que hacía esa afirmación, sin más referencias al asunto. En este caso, la libertad de expresión que supuestamente defiende el empresario le costó el puesto a uno de los trabajadores que habían sobrevivido a la purga inicial.
Sin embargo, en una publicación del 6 de agosto de 2023, el magnate aseguró que si algún usuario era “tratado injustamente” por su jefe después de publicar o compartir algo en Twitter, la plataforma se compromete a financiar los costes legales que puedan surgir, “sin límite”. Justo lo que sucedió con el ingeniero que trabajaba en Twitter. Frohnhoefer reaccionó a la publicación de Elon Musk. "¿Sin límite?", se preguntó el antiguo ingeniero de Twitter en la red social.
Este artículo se irá actualizando en función de que vayamos conociendo nuevas acciones por parte de Elon Musk relacionadas con la libertad de expresión. En cada añadido que modifique la pieza, se añadirá la fecha correspondiente en la que se ha actualizado.
Este articulo se ha actualizado el 8 de agosto de 2023 para incluir nuevas informaciones sobre las acciones de Twitter contra el Center for Countering Digital Hate, el 21 de noviembre de 2023 para incluir la demanda de X Corp. contra Media Matters for America, y el 12 de diciembre de 2023 para añadir información sobre la vuelta de Alex Jones a Twitter.
Primera fecha de publicación de este artículo: 11/05/2022