Las elecciones generales de 2019 han puesto de manifiesto que el último barómetro preelectoral del CIS no ha acertado las horquillas de escaños de todos los partidos que se presentaban a nivel nacional salvo Más País.
El último barómetro del CIS estimó una victoria más amplia del PSOE de la que finalmente tuvo, y no fue capaz de predecir la gran caída de Ciudadanos. La formación naranja aparece en la encuesta como tercera fuerza, y en las elecciones ha sido el sexto partido, por debajo de ERC.
Este estudio tampoco ha sido capaz de predecir la subida de Vox, que ha pasado de 24 a 52 escaños. La encuesta le estimaba entre 14 y 21 diputados, aún menos que en abril.
El trabajo de campo de este barómetro se realizó antes de la sentencia del juicio del Procés y de la exhumación de Franco
Las entrevistas de la encuesta preelectoral del CIS se realizaron entre el 21 de septiembre y el 13 de octubre, un día antes de que se hiciera pública la sentencia del juicio del Procés, y 12 días antes de la exhumación de Franco. El barómetro no pudo estimar el posible efecto que tuvieran estos actos en el resultado electoral. Esto es así porque las encuestas miden la opinión de la ciudadanía en un momento exacto, lo que puede cambiar.
José Félix Tezanos, el presidente del CIS, ha explicado en un desayuno informativo de Nueva Economía Fórum que este barómetro “lógicamente si ha sido antes, es lógico que no recoja estos dos efectos” [min 37:23].
Hay que tener en cuenta que, como ya hemos explicado en Maldita.es, las encuestas no están diseñadas para predecir resultados electorales. Según George H. Gallup (1957), sirven y están pensadas para tomar el pulso de la ciudadanía respecto a algunos asuntos públicos: políticos, económicos, culturales o sociales.