Un estudio científico publicado en enero de 2025 ha analizado los 1.000 vídeos más populares de TikTok que llevan la etiqueta #mentalhealth (salud mental). Tras clasificarlos en seis categorías, los resultados señalan que el 33% de los vídeos de una de ellas, “consejos e información” de salud mental, contenía información engañosa y que estos vídeos son más virales que los que comparten información correcta.
El 33% de vídeos analizados sobre consejos e información de salud mental tiene información engañosa
El resultado principal del estudio, hecho por investigadores de las universidades de Columbia Británica y Calgary (Canadá), es que el 33% de los vídeos analizados sobre “consejos e información” en relación a la salud mental contenían información engañosa. Aunque suponían una minoría en su grupo, estos vídeos fueron más virales: tenían más visitas, más likes, más comentarios y se compartían más.
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Para llegar a este resultado, los autores recopilaron los 1.000 vídeos de TikTok bajo la etiqueta #mentalhealth con más visitas. Después, analizaron su contenido para agruparlos por categorías: historias personales, consejos e información, expresión de emociones intensas, referencias a la muerte, referencias a estudios científicos y venta de productos o servicios.
El trabajo se centró en los 319 vídeos incluidos en la categoría “consejos e información” que un equipo de psicólogos y psiquiatras se encargó de analizar, estableciendo si lo que decía cada uno de ellos era o no engañoso.
Según este equipo, algunos de los vídeos contenían datos “abiertamente inexactos” mientras que otros proporcionaban muy poco contexto, generando un riesgo mayor de conclusiones erróneas o autodiagnósticos equivocados. Por ejemplo: datos falsos sobre trastornos mentales (“estos son los signos de TDAH”), sobre los estilos de apego, gaslighting o respuestas ante traumas.
Los investigadores destacan que algunas tendencias de TikTok, como el “put a finger down challenge” (un ‘reto’ en el que la persona baja un dedo por cada afirmación que comparte con la voz en off), pueden generalizar demasiado los síntomas asociados a problemas de salud mental. Esto “puede llevar a patologizar (considerar algo una enfermedad) comportamientos normales y a autodiagnosticarse, generando ansiedad por enfermedad”, explican. También creen que estos vídeos podrían motivar a la gente a que busque ayuda profesional, tengan o no un problema.
Los autores recuerdan que otros trabajos científicos sobre consejos de salud general en TikTok también han encontrado gran cantidad de desinformación. Por ejemplo, sobre cáncer de próstata (47% de vídeos analizados con desinformación), sobre disfunción eréctil (90%) y sobre trastorno de déficit de atención (52%).
En Maldita.es hemos escrito sobre el problema de perfiles de pseudopsicología en TikTok, usuarios que comparten “soluciones mágicas” sin ser profesionales ni compartir información respaldada por evidencia.
¿Por qué ocurre esto? Podría ser el algoritmo de TikTok, creen los investigadores
Los autores del estudio consideran que TikTok tiene “un inmenso potencial” para educar sobre salud mental, especialmente entre los jóvenes. Sin embargo, han observado “muchas barreras” para compartir información fiable sobre este tema. El motivo, consideran, es el algoritmo de la plataforma.
En base a los resultados, los investigadores creen que el algoritmo de “tiende a recomendar vídeos más cortos que reciben vistas completas (el usuario se queda hasta el final) y más interacciones”. Según ellos, esto hace difícil discutir temas complejos sobre salud mental y “limita la calidad de los contenidos”. Los contenidos en TikTok “pueden llevar a ideas erróneas” por “la incapacidad de la plataforma para adaptarse a las necesidades de cada usuario” y “la influencia que tiene el algoritmo, que no tiene en cuenta la evidencia científica”, opinan.
Hay que indicar, como hemos explicado en Maldita.es, que el algoritmo que ordena el contenido en TikTok es bastante opaco: la empresa aporta muy pocos datos sobre qué recomienda más o qué tienen en común los vídeos más virales. Además, es una plataforma que no necesita que el usuario siga a otros obligatoriamente para que le muestre contenido; en la pestaña ‘Para ti’ se muestran directamente vídeos recomendados (en ‘Siguiendo’, los de los usuarios que seguimos).
Otros resultados interesantes, limitaciones y posibles estudios futuros
Además de la investigación sobre desinformación, los autores también han echado un ojo a los datos demográficos de quienes hacen estos contenidos de salud mental. Aquí algunos de sus resultados:
Las mujeres aparecen más en estos vídeos de TikTok que los hombres, pero ellas reciben menos visitas, likes, comentarios y compartidos que ellos.
Los hombres blancos reciben, de media, más visitas y compartidos; seguido de mujeres racializadas, hombres racializados y mujeres blancas.
Los usuarios que son profesionales sanitarios acumulan casi las mismas visitas que los no profesionales, aun difundiendo contenido más preciso.
Como cualquier estudio científico serio, este trabajo tiene limitaciones. Una de ellas es que se han analizado los 1.000 vídeos más virales con la etiqueta #mentalhealth, pero esta muestra no tiene porqué coincidir con los vídeos más virales sobre este tema (que pueden tener otra o ninguna etiqueta). Otra es que solo han analizado vídeos en inglés, dejando otros idiomas fuera y con resultados que pueden ser diferentes en otros contextos o lenguas.
Por último, los autores proponen futuras investigaciones sobre este asunto: cómo los usuarios buscan información sobre salud mental en TikTok, cómo comparten sus sentimientos o experiencias en la plataforma, si existen diferencias en contenidos sobre salud mental en diferentes redes sociales o si hay algún tipo de vídeo que se asocie a problemas de salud mental urgentes.