MENÚ
¡Hola, malditos, hola, malditas! ¿Cómo habéis pasado la semana? Por aquí tenemos mucho que contaros, por ejemplo que, mientras aquí nos desvivimos por luchar contra las pseudociencias y la desinformación, durante bastante tiempo Facebook catalogaba a sus usuarios en categorías donde entraba esa misma: la "pseudociencia". ¿Para qué? Pues para colocar publicidad, como explica este artículo. Sin dejar Facebook, os hablamos de la cadena que afirma falsamente que solo 25 personas están "autorizadas" a ver nuestras publicaciones.
¡Qué más! Puede que en el consultorio de esta semana esté la respuesta a alguna de tus preguntas, échale un ojo aquí. Te damos consejos a la hora de leer políticas de privacidad eternas, contamos cómo denunciar imágenes de carácter sexual difundidas en Internet y también respondemos a una pregunta sobre Minecraft. Ahora, ¡a por nuestras recomendaciones de la semana!
La Guardia Civil incluye en un acuerdo de precontratación comercial el uso de reconocimiento facial
Se ha hablado mucho esta semana de un convenio que ha suscrito la Guardia Civil con el Centro para el Desarrollo de las Tecnologías Industriales en el que plantea probar el reconocimiento facial para identificar a personas con causas "pendientes" como parte de un paquete de medidas de seguridad. El objetivo sería implantarlo para el "control de eventos multitudinarios", como el festival Viña Rock de Albacete, y para garantizar la seguridad en el "entorno rural". Esto no significa que lo vaya a usar, pero sí es llamativo que se incluya en un preacuerdo. Lo explican todo en este artículo en Business Insider.
¿Reconocimiento facial y mascarillas? Mala combinación
Es lo que ha concluido la Empresa Municipal de Transportes (EMT) al cancelar su proyecto piloto de pago con un sistema de reconocimiento facial en los autobuses de Madrid, según explica este artículo en eldiario.es. El uso de mascarillas está poniendo incluso más trabas a esta tecnología de las que ya tiene y el no poder identificar bien a los usuarios ha llevado a la cancelación de las pruebas. La idea era que los usuarios registrarán sus datos personales y biométricos en una aplicación y vincularan una tarjeta para hacer el pago usando la cara.
La nueva moda de compartir de datos de salud, como si fueran selfies
¿Os acordáis del momento en el que explotó la popularidad de las selfies y las mandábamos a todas horas y llenábamos nuestras redes con ellas? A día de hoy ya es una práctica más que aceptada a nivel social, aunque una nueva moda se abre camino: el compartir cómo hemos dormido o los pasos que hemos dado en un día. Datos que normalmente se sacan de dispositivos wearables (que llevamos encima) como pulseras o aplicaciones que miden nuestros movimientos. ¿Que tiene sus riesgos? Lo has adivinado, claro. Hablamos de datos de salud que no deberían compartise a la ligera. Puedes leer más en este artículo en El País.
Investigación al sector del Internet de las Cosas, empezando por los asistentes de voz
La Comisión Europea ha inciado una investigación en el sector del "Internet of Things" o Internet de las Cosas para saber qué productos concretos se venden, cómo funciona el mercado en sí y qué tipo de datos personales se recogen para que luego las empresas ganen dinero. Por este último detalle están en la mira los asistentes de voz como Alexa, Siri y Google Assistant y que usamos en nuestro día a día. La investigación se centrará en términos de competencia, tal y como explica este artículo en Xataka.
La guerra india de Internet
Puede que haya mucha gente que piense que Internet es lo mismo para todo el mundo y en todas partes del planeta. Un caso en el que detenerse a estudiar es el de India, un país que lleva años apostando por la digitalización de la sociedad y su conexión a la red para luego suspenderla según decida el Gobierno . Este interesante reportaje publicado en el blog de Iuvia hace un recorrido por esos años en los que se instó a la población a conectarse entre ella y hacer uso de Internet frente lo que es ahora: un espacio en el que impera la neutralidad de la red y que se puede cortar si las cosas se ponen feas en determinadas regiones.
