¿Qué ha pasado?
A fecha 29 de septiembre, son más de 483 los casos de gastroenteritis reportados entre los vecinos de Tarazona (Zaragoza) y pueblos cercanos, origen de intensas diarreas y dolores intestinales desde los días 9 y 10 de septiembre.
¿A qué se debe el brote de gastroenteritis en Tarazona?
El motivo, según se ha comprobado a través de cultivos de laboratorio con heces de personas enfermas, ha sido la presencia en el agua del grifo procedente del río Queiles de un protozoo del género 'cryptosporidium', resistente al cloro. Como recuerda en X (antes Twitter) la farmacéutica Gemma del Caño, por norma general este organismo “es muy difícil de detectar porque se necesitan muestras muy grandes” y no es detectable en las muestras que habitualmente se toman para controlar posibles contaminaciones del agua dirigida al consumo. De ahí que normalmente sea en el momento en el que ya ha ocurrido un brote en personas o animales cuando se toma conciencia de su presencia.
¿Cómo se ha reaccionado ante el brote?
A fecha 27 de septiembre, más de 11.000 personas de Tarazona y alrededores no disponen de agua de grifo. “Ante el incremento significativo de casos de gastroenteritis, se recomienda a toda la población NO consumir agua del grifo ni siquiera para cocinar hasta nuevo aviso”, advertía el 11 de septiembre el ayuntamiento del municipio, que sigue repartiendo garrafas de agua entre los vecinos.
🦠🧫 En la mañana de hoy se ha confirmado la presencia en la red de suministro de agua potable de la Ciudad del protozoo que se sospechaba era el causante del brote de gastroenteritis.
— Ayuntamiento de Tarazona (@AytoTarazona) September 20, 2023
De inmediato se ha comenzado a realizar las siguientes actuaciones: https://t.co/4IYlHUkQ4k pic.twitter.com/tY0hMh6cX2
Recomendaciones a personas que tengan o hayan tenido síntomas
Desde el Ayuntamiento de Tarazona se recomienda, tanto a las personas que tengan o hayan tenido síntomas compatibles con la enfermedad, que extremen las medidas de higiene personal y el lavado de manos, especialmente tras cambiar pañales o ir al baño y antes y después de preparar alimentos. También evitar que personas con síntomas manipulen comida o cuiden de personas hospitalizadas o inmunodeprimidas hasta 48 después de la desaparición de la diarrea.
En caso de niños que acuden a la guardería, se recomienda que no se reincorporen a la misma antes de dos días tras haber desaparecido este síntoma. Por último, el ayuntamiento aconseja que durante esos 15 días posteriores a la diarrea se eviten los baños en piscinas y las relaciones sexuales.
Más allá de Tarazona… Recomendaciones en caso de gastroenteritis y diarrea
Hablamos de gastroenteritis al referirnos a la inflamación o hinchazón de la membrana interna del estómago e intestino, a causa, en la mayoría de las ocasiones (aunque no siempre), de una infección de origen vírico.
Uno de los síntomas más comunes de la gastroenteritis es la diarrea, situación en la que las deposiciones son heces sueltas o líquidas y la frecuencia con la que vamos al baño es tres o más veces diarias. La forma más efectiva de evitarla es prestar atención a lo que comemos y bebemos, por si los alimentos o las bebidas están contaminados, y a nuestro aseo diario, ya que los microorganismos que la causan se puede transmitir de una persona a otra por culpa de una higiene deficiente.
En caso de diarrea, la cantidad de líquido que pierde nuestro cuerpo al evacuar es mucho mayor que cuando las heces son sólidas. Con las deposiciones también eliminamos electrolitos (calcio, magnesio, potasio, sodio…). De ahí la importancia de reponer la pérdida “bebiendo tanto como perdemos (de litro y medio a dos litros diarios)", explicaba a Maldita.es Miguel Ángel Alcalde, dietista en la Unidad de Nutrición y Dietética en el Área Sanitaria Norte de Córdoba.
"La reposición hídrica (más allá del agua, la manzanilla, el caldo desgrasado, el suero de rehidratación oral…) debe ser progresiva para evitar vómitos y empeorar el cuadro clínico". Si te has preguntado si el Aquarius y similares serían útiles en este caso, la respuesta es no (por su alto contenido en azúcar y los electrolitos que repone, que no son los adecuados). Es especialmente importante incidir en este punto en niños y ancianos.
Con respecto a la alimentación durante procesos que afectan al aparato digestivo como úlceras, gastritis, gastroenteritis y diarrea, lo recomendable es acudir a alimentos que sean fáciles de digerir, lo que se conoce como una dieta astringente (que no blanda). Su objetivo es reducir al máximo la estimulación de las secreciones gastrointestinales y retrasar la velocidad de tránsito, con la finalidad de reducir el número y el volumen de las deposiciones diarias y mejorar su consistencia.
Fuente: Lucía Martínez (Dime qué comes) y Aitor Sánchez (Mi dieta cojea)
La Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), recomienda evitar las medicinas, salvo los antitérmicos (paracetamol) en caso de fiebre. “En general, los antibióticos están desaconsejados y los antidiarreicos contraindicados en caso de fiebre”.
La importancia del acceso al agua
El acceso al agua resulta de vital importancia para la salud pública. En ocasiones el agua puede estar contaminada, transmitir enfermedades e incluso provocar muertes. Lo ocurrido en Tarazona es uno de estos casos, que son poco frecuentes en países desarrollados.
Algunas sustancias nocivas —a menudo sustancias químicas o microorganismos— contaminan los ríos, lagos u océanos degradando la calidad del agua y volviéndola tóxica para los seres humanos o el medio ambiente, tal y como subraya el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales (NRDC, por sus siglas en inglés).
Esta agua contaminada puede ser un vehículo de transmisión de muchas enfermedades. Beatriz Robles, tecnóloga de los alimentos y nutricionista, mencionaba a Maldita.es el cólera, la hepatitis, la fiebre tifoidea (una infección que causa diarrea y una erupción cutánea), la disentería (infección del intestino que también provoca diarrea) o la polio (enfermedad infecciosa vírica con una alta tasa de contagio que afecta al sistema nervioso y que, en los casos más graves puede provocar una parálisis permanente).
Según la Organización Mundial de la Salud, “la diarrea es la enfermedad más conocida que guarda relación con el consumo de alimentos o agua contaminados”. En teoría unas 842.000 personas mueren cada año de diarrea “como consecuencia de la insalubridad del agua, de un saneamiento insuficiente o de una mala higiene de las manos”.