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MALDITA CIENCIA

Qué ha dicho el CEO de Pfizer y por qué no significa que se desmarque de las vacunas ARN mensajero

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Claves
  • Albert Bourla dijo en una entrevista en marzo de 2022 que hacer una vacuna de ARNm era “contraintuitivo”, pero su equipo le convenció de que era lo mejor
  • El clip no cuenta la respuesta completa de Bourla: Pfizer optó por esta tecnología porque era más rápida de producir y tiene menos limitaciones para dar dosis de refuerzo
  • En intervenciones posteriores, Bourla ha defendido el uso del ARN mensajero
 
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Páginas web y perfiles conocidos por verter bulos sobre las vacunas contra la COVID-19 (ver ejemplos 1, 2, 3, 4) están usando unas declaraciones del director ejecutivo de la farmacéutica Pfizer, Albert Bourla, para desinformar sobre el uso del ARN mensajero (ARNm) en la vacuna contra la COVID-19. Bourla afirma en una entrevista que el uso del ARNm era “contraintuitivo” en comparación a otros tipos de vacunas pero que, finalmente, se decidió optar por esta tecnología.

Esto se ha leído por los antivacunas como un distanciamiento del director de Pfizer sobre su vacuna. El mensaje que más repiten es el siguiente: “El CEO de Pfizer empieza a desmarcarse de todo lo que ha pasado. Él no sabía nada, se ha guiado por consejos, nunca se había probado una vacuna así... mayores los beneficios que los riesgos. Ven venir un duro revés y no saben por dónde escapar…”. Vamos a dar contexto a estas declaraciones y explicar por qué no es cierto que Bourla se “desmarque” de la vacuna de Pfizer/BioNTech.

Qué es lo que dijo el director de Pfizer concretamente

Las declaraciones de Albert Bourla proceden de una entrevista en vídeo que realizó el directivo con el columnista de opinión Jonathan Capehart para el Washington Post en marzo de 2022. La entrevista fue un evento exclusivo para suscriptores del periódico y dedicado a presentar un libro recién publicado por el directivo. Varios clips de vídeo así como la transcripción completa de la conversación están disponibles en abierto. El clip que emplean los antivacunas es el siguiente:

En la secuencia de vídeo, se puede comprobar cómo Capehart pregunta por una afirmación que recuerda el directivo en su libro, cuando la compañía aún estaba decidiendo cómo iba a desarrollar la futura vacuna contra la COVID-19: “La ruta del ARNm era más contraintuitiva”.

“El ARNm era una tecnología en la que teníamos menos experiencia, con solo dos años trabajando en ello. Nunca había dado un producto hasta ese día, ni una vacuna o medicina. Era contraintuitivo y me sorprendió cuando me sugirieron [los compañeros de Bourla en Pfizer] que este era el camino a seguir. Lo cuestioné, les pedí que me justificaran cómo podían decir tal cosa, pero estaban muy, muy (sic.) convencidos de que era el camino correcto a seguir”. Los “dos años” que menciona Bourla se refieren a una colaboración entre que hicieron Pfizer y BioNTech desde 2018 para desarrollar una vacuna de ARNm para prevenir la gripe.

“Consideraron que los dos años de trabajo en ARNm desde 2018 con BioNTech para desarrollar una vacuna de gripe les hizo creer que la tecnología estaba madurada y estábamos a punto de entregar un producto. Así que me convencieron, seguí mi instinto de que ellos sabían lo que decían. Son muy buenos y tomamos esta decisión muy difícil en ese momento”, concluye el clip.

Una parte de la conversación que no aparece en el vídeo, que se puede consultar en la transcripción de la entrevista, incluye las razones por las que Pfizer optó por la tecnología de ARN mensajero. Bourla responde que los beneficios de ésta, en caso de tener éxito, eran que el tiempo necesario para producirla —excluyendo los ensayos clínicos en humanos— sería “mucho menor” y más facil “reajustar y reeditar para cualquier virus con el que se estuviese tratando de hacer una vacuna”. “El ARNm puede lograr en semanas aquello para lo que otras tecnologías requieren meses”, resume el directivo.

Otro motivo que esgrime Bourla para optar por vacunas de ARNm es que, en comparación con las vacunas de adenovirus, estas tienen menos limitaciones para dar dosis de refuerzo, en caso de ser necesarias.

A pesar de que son las primeras vacunas de ARNm, la tecnología lleva años de investigación

Es cierto, como indica Bourla, que el SARS-CoV-2 ha permitido el desarrollo de las dos primeras vacunas de ARNm aprobadas y disponibles para la humanidad. Antes de la pandemia, esta tecnología había mostrado resultados prometedores para producir anticuerpos, nuevas terapias contra el cáncer y enfermedades como la rabia, el zika o la gripe, pero en un contexto de ensayos clínicos con pocas personas o de fase previa. Una perspectiva publicada en septiembre de 2020 en la revista JAMA recuerda alguno de los hitos previos del ARN mensajero.

Sin embargo, las vacunas de ARNm llevan investigándose durante décadas. Como indican los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, siglas en inglés), esta tecnología interesa porque “se puede desarrollar en un laboratorio, con materiales que están disponibles fácilmente”: “Esto significa que se pueden desarrollar y producir grandes cantidades de vacunas más rápido que con los otros métodos de producción”.

La velocidad con la que se han desarrollado las vacunas contra la COVID-19, las más rápidas logradas en la historia humana, no ofrece la imagen completa de lo que hay detrás de este hito: décadas de investigación previa, el aprovechamiento del conocimiento adquirido en otras alertas públicas por coronavirus como la de 2002 o 2012, la optimización de las fases de estudio para probar el producto en humanos y el hecho de que las agencias reguladoras de medicamentos hayan dado prioridad a este trabajo burocrático.

Intervenciones posteriores de Bourla en las que defiende el uso del ARN mensajero

Después de esta entrevista de marzo de 2022, Albert Bourla ha tenido otras intervenciones públicas después de esta entrevista en las que ha defendido y apostado por el uso del ARNm.

Un ejemplo de ello es su aparición en el podcast “Meet The Leader”, del Foro Económico Mundial, en junio de 2022. En conversación con Klaus Schwab, presidente del Foro, Bourla dedica varias frases a hablar del ARNm: “Creo que es una tecnología muy poderosa. No creo que sea la panacea, el santo grial o que sea capaz de tratar todas las enfermedades del mundo, pero creo que acabamos de rascar la superficie de lo que se puede ver”.

Posteriormente, cree que próximamente se verán “un montón de avances” utilizando la tecnología propia del ARNm: “Lo bueno del éxito de la vacuna del COVID es que, ahora mismo, tenemos una oleada sustancial de compañías, biotecnológicas y grandes farmacéuticas, que trabajan con ARNm. Muchas, que trabajan con múltiples aplicaciones de ARNm”.

Otra intervención posterior de Bourla, donde también defiende la tecnología, data de abril de 2022 para el podcast “Leadership Matter”. Alan Fleischmann, conductor del episodio, pregunta al directivo de Pfizer si cree que el ARN mensajero y otras tecnologías tienen “grandes sueños y objetivos optimistas”. A esto, el directivo responde: “Sí, por supuesto. Estamos involucrados en varios de ellos. Y, lamentablemente, no todos ellos verán la luz de la vida. Pero estoy seguro de que algunos lo harán. Estamos tratando de pensar en grande”.

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