¡Buenos viernes, malditas y malditos! Fieles a la cita semanal, aquí llega Maldita Ciencia con las respuestas que las evidencias científicas y los expertos tienen para todo aquello que te inquieta o te perturba. Porque sí, sabemos que a lo largo del día se te ocurren mogollón de cuestiones que quizá habías dado por sentadas hasta ahora, pero que empiezan a oler regular.
¿Solución? ¡Fácil! No nos vamos a cansar de recordarte que puedes preguntarnos cualquiera de esas dudas utilizando nuestro chatbot de WhatsApp (+34 644 229 319), e-mail ([email protected]) o redes sociales (tanto Twitter como Facebook). Nosotros investigamos por ti y te contamos qué dice la ciencia sobre ellas, así que esperamos leerte pronto. Y ahora sí que sí, ¡manos a la obra!
¿Tiene la masturbación efectos negativos para la salud?
Una de las cuestiones que nos habéis planteado esta semana está relacionada con la masturbación y sus posibles consecuencias en nuestra salud. En concreto os interesa si, de alguna manera "darse amor a uno mismo" puede causar una pérdida de testosterona en los hombres. La respuesta, según las evidencias científicas y los expertos a los que hemos consultado es que no, sino más bien al revés: físicamente la masturbación es beneficiosa siempre que no se convierta en un comportamiento compulsivo que afecte a nuestra vida cotidiana.
“Físicamente, la masturbación lo único que tiene son ventajas”, explica a Maldita Ciencia Francisca Molero, presidenta de la Federación Españolas de Sociedades de Sexología (FESS). "Lo que es a nivel fisiológico y de salud mental, en absoluto conlleva ningún problema", añade.
Además, añade que practicarla no tiene ningún efecto físico negativo, a excepción de su realización compulsiva. Puede tener repercusiones psicológicas si, por algún motivo, la persona se siente culpable por hacerlo. "Pero es un tema personal, que no tiene que ver con el acto físico de masturbarse, sino con una creencia, actitud y educación propia", añade.
Como cualquier conducta, también es importante que no se convierta en un comportamiento que se realice de forma compulsiva. No debe llegar a comprometer la vida normal porque se dedique a ello un tiempo exagerado, según Molero. Lo que esto podría conseguir es que "se entrase en un círculo de malestar y culpa".
La masturbación, de hecho, y tanto en hombres como en mujeres, tiene beneficios físicos. Con respecto al onanismo femenino, Molero recuerda que "la función hace al órgano" y que "lo que no se utiliza se atrofia". "Esto es un muy importante tenerlo en cuenta”, apunta la presidenta de la FESS y añade que “la masturbación femenina está relacionada con cambios positivos a nivel genital (en la mucosa o la lubricación, por ejemplo) y con la activación del sistema vascular, neuroendocrino, entre otros".
En el caso de los hombres, la masturbación podría incluso prevenir determinados problemas de próstata ya que, cada vez que hay una eyaculación, de alguna manera también hay un arrastre en la expulsión de posibles gérmenes, como explica Molero.
Además, según la experta, esta práctica no tiene nada que ver con la disminución de testosterona, como nos habéis preguntado, ni en hombres ni en mujeres. “Que una persona se masturbe de manera más o menos habitual tampoco quiere decir que tendrá menos deseo de estar con su pareja o que no tenga deseo hacia ella”, señala Molero. “El objetivo de la masturbación puede ser diverso: obtener placer, conseguir tranquilidad cuando estamos algo más tensos o nerviosos… Lo que hace es activar el sistema de dopamina y modular la descarga de serotonina, lo que también ayuda al estado de ánimo”.
¿Y qué ocurre si se busca un embarazo? En ese caso, Molero hace un apunte: sí recomienda que la frecuencia de la masturbación masculina se controle. “Lo más útil en este caso, evidentemente sería tener más relaciones durante los días cercanos al día fértil (3 o 4 días antes). Si además se disminuye la masturbación durante los días previos a estos, la cantidad de espermatozoides al eyacular será mayor. Pero aun así, la masturbación nunca perjudicará a la calidad del semen en sí”, concluye la experta.
En deportes aeróbicos grupales, como el remo, ¿es recomendable utilizar mascarilla para evitar posibles contagios?
Hoy añadimos a nuestro (ya más que amplio) repertorio una nueva duda acerca del uso de mascarilla. Esta vez en relación al deporte aeróbico en grupo, en general, y al remo, en particular: queréis saber si en estos casos es recomendable utilizar mascarillas quirúrgicas para entrenar y competir, de cara a reducir la posibilidad de contagio. En esta práctica deportiva, al ser necesario un esfuerzo intenso en un corto periodo de tiempo, no es obligatorio llevar la mascarilla durante el desempeño de la actividad, pero sí antes y después de este.
"Las medidas que deben tomar los remeros son similares a las recomendadas para población en general (en cuanto al lavado de manos, el distanciamiento y demás)", explica a Maldita Ciencia Norma Alejandra Doria Carlín, presidenta del club de remo Lago de Madrid, médico de atención primaria y vocal de la junta directiva de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN). "En cuanto al uso de mascarilla, los deportistas siempre la llevan antes y después del ejercicio. Durante el mismo la retiran ya que normalmente, y sobre todo en competición, realizan mucho esfuerzo en un periodo muy corto de tiempo y pueden tener sensación de falta de aire. Pero sí: antes y después sí es obligatoria", explica Doria.
Por su parte, Luis Pastor, médico de familia, experto en medicina deportiva y nutrición y maldito que nos ha prestado sus superpoderes, coincide en que "el uso de mascarilla es complicado, ya que puede limitar la cantidad de aire inhalado y con ello el rendimiento (pero no, su uso general no causa ni hipoxia ni hipercapnia)". "Por otra parte, la distancia a la que está un remero del otro es menor de dos metros, lo que incrementaría el riesgo de contagio notablemente", explica a Maldita Ciencia. "Por ello la única modalidad de remo posible sin riesgo, sería la individual", continúa y añade que el remo en banco o indoor tiene, además, la limitación de hacerse en espacios cerrados.
Ahora bien, en las embarcaciones donde hay más tripulación se puede jugar con la distancia de seguridad entre los sitios. "Salvo en el remo de mar, donde los carriles son fijos, estos suelen ser móviles; con lo cual la tripulación mantiene constantemente la distancia, aunque se muevan", apunta Doria.
Junto al resto de medidas preventivas (lavado de manos, distancia de seguridad...), recuerda que, para esquivar la COVID-19, la mascarilla es una herramienta útil. Esta disminuye tanto la posibilidad de contagiar como de contagiarnos, al dificultar el contacto con las gotículas y aerosoles que una persona infectada emite al hablar, toser o estornudar.
¿Y qué dicen las autoridades? Según el Real Decreto-ley 21/2020, de 9 de junio, de medidas urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19, la mascarilla "no es exigible en el caso de ejercicio de deporte individual al aire libre, ni en los supuestos de fuerza mayor o situación de necesidad o cuando, por la propia naturaleza de las actividades, su uso resulte incompatible, con arreglo a las indicaciones de las autoridades sanitarias". El BOE también apunta que "es obligatorio que todos los deportistas y resto de integrantes de los equipos (técnicos, auxiliares, equipos arbitrales, etc.) utilicen las mascarillas mientras no estén dentro de la zona de competición".
En general, respecto a la disminución del rendimiento por el uso de mascarillas en la práctica deportiva, la Sociedad Española de Medicina del Deporte (SEMED) y el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) señalan que, al igual que sucede en muchos aspectos relacionados con la COVID-19, la información científica disponible es escasa por lo reciente de aparición de la enfermedad y la dificultad de realizar estudios en muchos ámbitos del conocimiento de la pandemia.
Uno de las investigaciones que ha analizado los efectos del uso de mascarillas quirúrgicas y FFP2 en el esfuerzo máximo en adultos sanos, publicado en la revista científica Clinical Research in Cardiology en agosto de 2020, concluye que, mientras que el uso de las mascarillas FFP2 disminuía algunos de los parámetros estudiados (cardiorrespiratorios, metabólicos y de rendimiento del deportista), el uso de mascarillas quirúrgicas no afectaba más que a algunos parámetros de confort (calor, resistencia a la respiración, picor, presión, desazón).
Si quieres consultar la regulación sobre el uso de mascarillas de tu comunidad autónoma u otras referencias científicas sobre su eficacia y repercusión en actividades deportivas, puedes encontrar más información en el dossier ‘Mascarilla en educación física, actividad física y deporte en tiempos de la COVID-19’ del Consejo COLEF, con la colaboración oficial del Consejo Superior de Deportes (CSD) y la Agencia Estatal Antidopaje (AEPSAD).
¿Las setas alucinógenas pueden borrar recuerdos traumáticos?
Nos habéis preguntado por un estudio de 2013 que dio pie a titulares que decían que “los hongos alucinógenos pueden borrar memorias traumáticas y reprogramar la mente”. Sin embargo, esto no es así. Según las evidencias disponibles, que son limitadas, las setas alucinógenas no borran recuerdos traumáticos pero sí pueden ayudar a dar un significado distinto a estas memorias y a tratar la depresión persistente.
El estudio por el que nos habéis preguntado se realizó en ratones y midió los efectos de la psilocibina, un alucinógeno presente en hongos del género Psilocybe. En este estudio lograron que los ratones desaprendieran una respuesta antes asociada a un estímulo que produce rechazo (en este caso un pitido asociado a una pequeña descarga eléctrica) de forma que recuperaron la conducta normal antes que si no hubiesen usado esta sustancia.
"Es un modelo de recuerdos traumáticos porque la respuesta de miedo ante esos recuerdos se supone que es aprendida. También muestra cómo esa respuesta está mediada por neurogénesis", es decir, creación de neuronas, explica a Maldita Ciencia José Carlos Bouso, psicólogo clínico, doctor en Farmacología y director científico del International Center for Ethnobotanical Education, Research and Service (ICEERS).
"Hay otros estudios recientes que también muestran cómo los fármacos alucinógenos promueven la neurogénesis tanto in vitro [en células y tejidos] como in vivo en modelos animales. Pero sólo en modelos animales”, no en personas, añade Bouso. Esa neurogénesis podría estar relacionada con la resignificación de los recuerdos traumáticos.
Para Marc Grifell, psiquiatra e investigador del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas, la respuesta corta es que los hongos alucinógenos no borran recuerdos traumáticos. Grifell explica a Maldita Ciencia que la expresión “borrar recuerdos traumáticos” no se puede medir en estudios científicos. “Aunque no hay ensayos clínicos, hay alguna evidencia anecdótica de la utilidad de la psilocibina pero no con el fin de suprimir memorias, sino para trabajar el contenido traumático y devolverle la funcionalidad a la persona”, indica Bouso.
“No existe evidencia de que los hongos psicodélicos puedan borrar recuerdos traumáticos. Sin embargo, existen razones para investigarlo ya que existe evidencia que apunta a que los hongos psicodélicos generan una reorganizacion del funcionamiento del cerebro al incrementar la plasticidad cerebral”, aclara a Maldita Ciencia Chris Timmermann, doctorando en neuropsicofarmacología en el Centro de Investigación Psicodélica del Imperial College de Londres.
Sin embargo, sí que hay evidencia clínica de que estas sustancias pueden tener efectos negativos en personas con recuerdos traumáticos y por tanto hay que manejar este tema con cuidado. "Los hongos psicodélicos suelen generar un estado que favorece el recuerdo de experiencias dolorosas o traumáticas. Si la experiencia ocurre en un contexto terapéutico, la experiencia traumática puede ser procesada terapéuticamente, lo cual conduce a mejoras en la salud mental”, añade Timmermann.
La hipótesis es que la psilocibina “funciona mediante el reencuadre de recuerdos traumáticos junto con acompañamiento terapeútico. Esta combinación permite reestructurar los recuerdos traumáticos”, explica Grifell, quien aclara no hay evidencia científica sobre cómo funciona realmente. Para lo que sí sirve la psilocibina, indican tanto Bouso como Grifell, es para el tratamiento de la depresión mayor o persistente junto con acompañamiento terapeútico.
En resumen, “la psilobicina permite reestructurar los recuerdos traumáticos y les da un significado distinto pero no los borra”, concluye Grifell.
¿Hay relación entre los edulcorantes y el cáncer?
También nos habéis consultado sobre si el consumo de edulcorantes como la sacarosa (azúcar de mesa), la sacarina y el aspartamo tiene relación con el cáncer. La respuesta corta es que con la evidencia científica actual no hay relación entre consumir edulcorantes con la aparición de cáncer.
“El mito de la relación entre los edulcorantes y el incremento de riesgo de cáncer parte de estudios realizados en los años 70, fundamentalmente en Canadá, que vinculaban la ingesta de sacarina con el desarrollo de cáncer de vejiga en rata”, explica a Maldita Ciencia Beatriz Robles, tecnóloga de alimentos y dietista-nutriconista. “Una evaluación del IARC (Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer por sus siglas en inglés) de 1987 consideró que la sacarina era ‘posiblemente carcinogénica para humanos’. No obstante, a la luz de las evidencias posteriores, el propio IARC reclasificó la sustancia en 1999: sí que produce carcinogénesis en la vejiga de ratas, pero es mediante un mecanismo irrelevante en humanos, debido a las diferencias entre las especies”.
La sacarina estuvo prohibida en Canadá desde 1977 hasta 2014, cuando se levantó su prohibición. En Estados Unidos también se dejó de considerar seguro en 1977 y desde el año 2000 se puede usar sin las advertencias anteriores sobre su relación con el cáncer, añade Robles.
Otros edulcorantes como el aspartamo o el ciclamato también son seguros, explica Robles: “Todos los edulcorantes que se emplean en la Unión Europea han pasado una evaluación por la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria por sus siglas en inglés) y se reevalúan periódicamente. Una vez que se comprueba su seguridad, la Comisión Europea los autoriza sólo para alimentos específicos y en determinadas dosis, que se establecen con un margen de seguridad lo suficientemente amplio como para que no haya riesgo de que aparezca ningún efecto adverso: sería necesario beberse cientos de litros de bebidas con edulcorantes para observar algún síntoma”.
El Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, la Sociedad Estadounidense del Cáncer y el Fondo Mundial de Investigación del Cáncer también concluyen que no hay evidencia actualmente que relacione los edulcorantes con el cáncer.
Pero que su consumo sea seguro no significa que sea sano. “Los edulcorantes son seguros en las cantidades en que se utilizan en la industria alimentaria. La cantidad máxima a utilizar está muy por debajo de aquella que puede provocar algún tipo de daño. Ahora bien, un consumo elevado de productos edulcorados está relacionado con un estilo de vida poco saludable y eso conlleva otros factores como el sedentarismo, el consumo excesivo de harinas refinadas y el bajo consumo de frutas y verduras. Un estilo de vida poco saludable está relacionado con el aumento de las probabilidades de desarrollar distintos tipos de cáncer, así como otro tipo de enfermedades cardiovasculares”, aclara a Maldita Ciencia el dietista-nutricionista Daniel Ursúa.
Antes de que os vayáis...
Como todas las semanas llegados a este punto nos gustaría recordaros que estamos aquí para resolver todas las dudas y preguntas que tengáis respecto a información científica, pero que si lo que te inquieta tiene que ver con un diagnóstico, tratamiento o afección personal, lo único que podemos aconsejarte es que acudas a un profesional sanitario que conozca personalmente tu caso y pueda tratarte adecuadamente.
En este artículo ha colaborado con sus superpoderes el maldito Luis Pastor. Gracias a vuestros superpoderes, conocimientos y experiencia podemos luchar más y mejor contra la mentira. La comunidad de Maldita.es sois imprescindibles para parar la desinformación. Ayúdanos en esta batalla: mándanos los bulos que te lleguen a nuestro servicio de Whatsapp, préstanos tus superpoderes, difunde nuestros desmentidos y hazte Embajador.
Primera fecha de publicación de este artículo: 22/10/2020.