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Una imagen que ha sido compartida por redes sociales afirma que las víctimas de la pandemia de SARS-CoV-2 serían muchas menos que las de otras epidemias y por lo tanto que esta sería una “falsa pandemia”. Pero es una comparativa sesgada. Os explicamos por qué.
Los datos que da sobre la gripe A corresponden a la estimación máxima de víctimas hecha dos años después
La primera afirmación en esa imagen es que las víctimas de la pandemia de gripe A en 2010 fueron 575.000, sin poner ninguna fuente que sustente esta afirmación.
La gripe A, gripe porcina o gripe H1N1 (por el nombre del virus que la causa) fue detectada en abril 2009 en EEUU y se propagó rápidamente por todo el mundo. Ese nuevo virus H1N1 contenía una combinación de genes de virus de influenza que nunca antes había sido identificada en personas o animales y fue designado como virus de la influenza A (H1N1)pdm09. El 11 de junio de 2009 la OMS declaró que se trataba de una pandemia. El estado de pandemia fue levantado por la propia OMS el día 10 de agosto de 2010.
Un estudio publicado en la revista Lancet dos años después, en junio de 2012, estimó el número de víctimas reales de enfermedad comparándolo con el número oficial de víctimas que se conocía hasta la fecha, que eran 18.500. Este estudio es el que se considera más fiable hoy en día.
Según sus estimaciones, el número real de víctimas es de entorno a 200.000, con una horquilla de error entre las 106.000 y las 396.000. A estos números, los investigadores añaden las muertes causadas por “enfermedades cardiovasculares asociadas a la pandemia”, llevando el total de defunciones a 284.000, con una horquilla de error entre las 152.000 y las 575.000.
Por lo tanto, el número 575.000 que aparece en la gráfica se refiere a una estimación máxima de víctimas, que se hizo dos años después del fin de esa pandemia, teniendo en cuenta todos los datos y añadiendo a las víctimas de enfermedades asociadas a la pandemia.
El dato sobre la gripe estacional es también la estimación más pesimista
A continuación aparece el número de víctimas de la gripe estacional cada año. Se estima que ese número está entre los 290.000 y las 650.000, como hace la OMS usando datos de 2017 aquí y aquí, mientras que según un estudio del Journal of Global Health del diciembre 2019 este número es de 389.000 personas, con una horquilla entre 294.000 y 518.000. Es decir, en línea con las estimaciones oficiales.
Según la gráfica de las redes sociales las víctimas anuales serían 650.000, que es la cantidad máxima según las estimaciones más pesimistas.
Las víctimas contabilizadas por COVID-19 a día de hoy ya son más de 300.000
La situación actual de la pandemia de SARS-CoV-2 hace que solo podamos contabilizar, de momento, las víctimas oficiales, que a 20 de mayo 2020, son 325.000 en todo el mundo (en la imagen compartida por las redes sociales, que está sin fechar, se habla de 265.000).
Por lo tanto, la comparativa está sesgada ya que compara los datos más pesimistas de las estimaciones de víctimas de pandemias cuya información completa ya tenemos con el número de fallecidos por COVID-19, que va aumentando ya que la pandemia aun está activa.
El “exceso de mortalidad” nos sugiere que las víctimas reales de COVID-19 podrían ser el doble de las oficiales
Mirando el “exceso de mortalidad”, es decir la diferencia entre el número de muertes en “circunstancias normales” y el número de muertes durante la pandemia, el Economist calcula por ejemplo que el número de víctimas reales puede ser hasta el doble del oficial, al menos en algunos países como Italia, uno de los más afectados en el mundo.
En España, según estos cálculos, las víctimas de COVID-19 son el 78% del “exceso de mortalidad”: es decir, se calcula que entre el 11 de marzo y el 28 de abril han muerto un total de 30.700 más personas de lo habitual, de las que 23.800 se han atribuido oficialmente al COVID-19.
En este artículo de la BBC es posible seguir cómo la pandemia está aún en fase de crecimiento en muchos países, como México, Brasil o Rusia.
