A pesar de que fue el pasado 7 de abril cuando el Gobierno anunció su intención de iniciar, a lo largo de la semana posterior (entre los días 13 y 19 del mismo mes), un estudio de seroprevalencia para estimar el porcentaje de población española que ha desarrollado anticuerpos frente al COVID-19, no ha sido hasta hoy cuando este se ha puesto en marcha.
Durante el 27 de abril, han comenzado las llamadas a las personas seleccionadas para llevar a cabo los test de anticuerpos o serológicos que servirán como base para este estudio, diseñado por el Ministerio de Sanidad y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) con la colaboración de las comunidades autónomas.
Las pruebas se realizarán en un total de 36.000 hogares, lo que supone invitar a la participación a un total de unas 90.000 personas. Se estima que la muestra final estará compuesta por un mínimo de 60.000 participantes.
El Estudio Nacional Epidemiológico de la infección por SARS-CoV2 en España (ENE-COVID), uno de los primeros estudios de inmunidad a gran escala en un país, constará de tres pruebas por individuo (con un margen de tres semanas entre ellas), la primera de las cuales comienza a realizarse hoy, y se prolongará durante las próximas dos semanas.
Objetivos del ENE-COVID: dimensión de la infección y número de contagios
Según ha explicado Raquel Yotti, directora del ISCIII, en la rueda de prensa telemática diaria del Comité de Gestión Técnica del Coronavirus el 27 de abril, este estudio permitirá "conocer la verdadera dimensión de la infección en España y estimar el número de ciudadanos que han tenido contacto con el virus" desde el inicio de la pandemia a través de análisis de los anticuerpos generados por el mismo.
Para conseguirlo y con el apoyo del Instituto Nacional de Estadística (INE), se ha seleccionado previamente una muestra que se considera representativa de la población española (siguiendo unos criterios estadísticos para que representen a toda la población), participantes a los que se les solicitará la colaboración en el estudio. Para ello, se les contactará de forma telefónica desde las comunidades autónomas. "Desde aquí quiero animar a la participación que, a pesar de ser voluntaria, tiene una relevancia que trasciende lo científico y está dirigida a poder tomar decisiones en el ámbito de la salud pública", ha expresado Yotti.
Además, ha incidido en la importancia de este estudio para conocer la magnitud de la epidemia a distintos niveles: nacional, autonómico y local [...] que va a permitir tomar las decisiones más adecuadas. También obtener información sobre la dimensión de la epidemia en los distintos estratos de edad y en las distintas condiciones demográficas, así como si la transmisión del virus se ha producido a nivel comunitario y en qué medida ha podido suceder dentro de los hogares.
De ahí que la unidad de estudio sean estos últimos. "Es importante que, si se contacta con un hogar, se haga todo lo posible para que participen todos sus miembros", ha indicado Yotti. De esta manera, podrán cumplirse los criterios estadísticos necesarios.
¿En qué consistirán las pruebas? Cuestionario, test rápidos y muestras de suero
Según la nota de prensa emitida por el Ministerio de Sanidad, los participantes en el ENE-COVID responderán a un breve cuestionario, en el que, según Yotti, "se incluyen preguntas relacionadas con la infección y otros factores que puedan ser importantes para analizar la información" y se realizarán pruebas serológicas para determinar si tienen anticuerpos frente al virus.
En primer lugar, bien en el domicilio o bien en el centro de salud, se les hará un test rápido de determinación de anticuerpos en sangre, para saber si la persona ha estado infectada, a través de un pinchazo en el dedo y cuyos resultados, según Yotti, estarán disponibles en 10 minutos.
Para asegurar la fiabilidad de los resultados se considera recomendable obtener una muestra de suero en todos los pacientes que den su consentimiento, a través de la extracción de sangre mediante un pinchazo en el brazo. Estas se analizarán utilizando una técnica serológica más sofisticada y precisa que los test rápidos.
"Es un estudio ambicioso, potente y complicado, importante para el proceso de transición a la nueva normalidad", ha calificado Yotti.
Serán necesarios al menos dos meses para conocer los resultados definitivos
Ante la cuestión acerca de cuándo se dispondrá de los primeros resultados, Yotti ha informado de que ya la primera mitad de la muestra (la que se realizará durante esta semana) empezará a dar algún dato, una primera impresión, que "habrá que tomar con mucha cautela".
"Para conocer los datos consolidados y bien analizados, habrá que esperar a la inclusión de los resultados de todos los participantes y dar un tiempo a los científicos para analizar con rigor los datos obtenidos". La llegada de la información final, con los resultados de las tres pruebas por participante, se prolongará unos dos meses.