Nos habéis preguntado si la cafeína que contiene un café depende de si es largo o corto. La respuesta rápida es que los cafés largos tienen más cafeína. Beatriz Robles, tecnóloga de alimentos y divulgadora especialista en alimentación, explica a Maldita Ciencia que el paso de la cafeína al agua depende de varios factores:
- El método de preparación: a mayor tiempo de contacto entre el agua y el café, cantidad de agua, temperatura del agua o presión aplicada, mayor extracción de cafeína.
- El propio café: aunque tienen menos influencia que el método de preparación, el contenido en cafeína del café y el grado de molienda afectan a la concentración final.
La nutricionista afirma que "si igualamos estas variables (cantidad y tipo de café, temperatura del agua, presión, tiempo de contacto del agua con el café…) y hablamos exclusivamente del contenido en cafeína al hacer pasar más o menos agua, tendríamos una mayor extracción de cafeína en el café más largo". Robles aclara que estamos hablando del contenido total de cafeína, no de concentración: el café largo contiene más cafeína pero está más diluida.
La cafeína es una de las "drogas" más usadas, que se suele tomar como estimulante. Además de encontrarse en el café, también la contienen el té y las bebidas de cola. Esta sustancia fue identificada por primera en 1819, por un químico alemán. Curiosamente, en algunos países el café llegó a estar prohibido en algunas épocas, como en Suecia. Si quieres saber más sobre los efectos del café sobre nuestra salud, puedes leer este artículo.