Circula por internet un post que asegura que un estudio habría demostrado que la quimioterapia, y no la enfermedad, es lo que mata a muchos pacientes de cáncer. No hay evidencias de que esto sea así. Existen otros bulos parecidos, como este que desmentimos aquí, pero creemos que la mención a un estudio científico concreto requiere un desmentido específico.
Porque el estudio científico al que se refiere este post, efectivamente, existe, pero no dice lo que afirma el titular. Fue publicado en 2016 y trató de analizar cuántos pacientes de cáncer (de mama y de pulmón en este caso) fallecían en los 30 días siguientes a iniciar lo que se llama una Terapia Sistémica Anticáncer o SACT por sus siglas en inglés.
Estas terapias son tratamientos que se distribuyen a través de la sangre para alcanzar a las células cancerígenas allí donde se encuentren, a diferencia de las terapias que se aplican directamente sobre el tumor, como las cirugías. Incluyen la quimioterapia pero también la inmunoterapia o terapias hormonales. En el estudio se analiza el efecto de distintas SACT, no solo de la quimioterapia.
Para este trabajo analizaron los datos de 23.228 pacientes con cáncer de mama y 9.634 pacientes con un determinado cáncer de pulmón, recolectados entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2014.
A partir de ahí hacen un análisis de algunos factores que parecen aumentar o disminuir la mortalidad en ese periodo. Por ejemplo, encuentran una relación directa entre la edad y una mayor mortalidad de los pacientes, y también entre la mortalidad y el hecho de ser la primera vez que se sometían a este tipo de terapias (es decir, que las personas que ya las habían recibido antes mostraban un menor riesgo de muerte).
Pero en ningún momento este estudio compara la mortalidad entre pacientes que reciben quimioterapia y los que no, lo que sería necesario para sacar la conclusión de que "muchos pacientes con cáncer mueren por la quimioterapia y no por la enfermedad", algo que no afirman los autores del estudio en ningún momento.