“Voy a dejarle libertad (let him go wild) en sanidad, en alimentación y en medicinas”. Así se refirió Donald Trump, candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, al abogado inicialmente ambiental y activista antivacunas Robert F. Kennedy (RFK) Jr. en un mitin de campaña. Eso sí, Trump dijo que Kennedy se encargaría de sanidad, alimentos y medicamentos, pero que no le iba a poner a cargo del petróleo y el gas, cuya quema contamina y mata a las personas y otros seres vivos, además de contribuir a la crisis climática. Además, Kennedy era originalmente un abogado ambiental.
RFK Jr. se presentó como candidato presidencial en las primarias demócratas, luego concurrió como independiente a presidente de Estados Unidos para terminar retirando su campaña y apoyar a Donald Trump. Tanto RFK Jr. como Trump han insinuado que si Trump vuelve a ser presidente de Estados Unidos, Kennedy ocupará un puesto en su Gobierno relacionado con sanidad.
Desinformador sobre las vacunas COVID-19
Kennedy ha diseminado mucha desinformación sobre las vacunas. Tanto que el Centro para Combatir el Odio Digital (CCDH por sus sigla en inglés) nombró a Kennedy y a su organización Defensa de la Salud de los Niños (CHD por sus siglas en inglés) como parte de la “Docena de la Desinformación” (o los 12 mayores difusores de información incorrecta sobre las vacunas contra el COVID-19 en línea). Factcheck.org ha dedicado un reportaje a sus afirmaciones falsas sobre la COVID-19, sus tratamientos, su origen y sus vacunas.
Desinformación sobre las vacunas y el autismo
Más allá de las vacunas COVID-19, también ha afirmado falsamente que las vacunas están detrás del aumento de casos de trastorno del sistema nervioso y el autismo por el conservante timerosal. Pero es un bulo que haya una relación entre las vacunas y el autismo. En cuanto al timerosal, se usa para evitar el crecimiento de bacterias y hongos en algunas vacunas y no se ha demostrado que interfiera en el desarrollo cerebral del feto o el lactante.
Kennedy participó en una campaña contra la vacuna triple vírica en Samoa Americana tras un problema puntual de seguridad, se redujo la tasa de vacunación y ocurrió un brote mortal de sarampión
En 2018, dos bebés en Samoa Americana murieron cuando las enfermeras prepararon accidentalmente la vacuna triple vírica (MMR, por sus siglas en inglés) con un relajante muscular caducado en vez de agua. Las autoridades pausaron los programas de vacunación hasta que dieron con la causa de las muertes. Estos fallecimientos fueron usados por activistas como Kennedy y su fundación para atacar a las vacunas MMR. Kennedy llegó a viajar en 2019 a Samoa Americana y se reunió con antivacunas locales.
La tasa de vacunación cayó y al año siguiente un brote de sarampión enfermó a más de 5.700 personas y 83 murieron, la mayoría de ellos niños pequeños. CHD sugirió en redes sociales que la vacuna fue la culpable, aunque lo borraron posteriormente, según un reportaje publicado en Mother Jones. En 2021 RFK Jr. relacionó las muertes por el brote “leve” de sarampión con la introducción de las vacunas MMR que buscaban paliarlo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) atribuyó la baja tasa de vacunación en parte a la desinformación sobre las vacunas: “Ha tenido un impacto muy notable en el programa de inmunización”.
Además, el abogado ha quitado importancia a la gravedad del sarampión, una enfermedad “muy contagiosa y grave” y que en 2022 provocó unas 136.000 muertes, en su mayoría niños no vacunados, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Desinformación sobre la seguridad de las vacunas
Como recoge Factcheck.org, RFK Jr. defiende que las vacunas no prueban su seguridad antes de ser aprobadas y se hacen ensayos sin un grupo control, a diferencia del resto de medicamentos. Pero es falso: las vacunas también pasan por fases de ensayo clínico, incluyendo grupo de control con placebo, antes y después de su comercialización para asegurar su seguridad.
De hecho, el nivel de seguridad es incluso mayor en las vacunas que en el resto de fármacos. “Generalmente se espera un mayor nivel de seguridad de las vacunas que de otras intervenciones médicas porque, a diferencia de la mayoría de los productos farmacéuticos que son administrados a personas enfermas con fines terapéuticos, las vacunas por lo general se administran a personas sanas para prevenir enfermedades”, según se explica en el Libro Rosa de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Además, el libro de los CDC aclara que existe una menor tolerancia al riesgo asociado a las vacunas que a otros medicamentos, por lo que es necesario evaluar correctamente los acontecimientos adversos de las vacunas para ”distinguir entre verdaderas reacciones adversas a las vacunas y eventos casuales y no relacionados”.
Desinformación sobre el papel histórico de la vacunación en la reducción de la mortalidad
“Hubo una enorme reducción en la mortalidad por enfermedades infecciosas, que sucedió en el siglo XX. Y lo que causó eso no fueron las vacunas. La verdadera reducción ocurrió en realidad por frigoríficos, que permitían guardar alimentos […], mejores viviendas, saneamiento, la invención del cloro, el tratamiento de las aguas residuales. Pero, principalmente, la nutrición. La alimentación es absolutamente crítica en la formación del sistema inmunitario. Y entonces lo que estaba realmente matando a esos niños era la desnutrición”. Esta declaración de Kennedy busca socavar la efectividad de las vacunas en reducir las muertes por enfermedades infecciosas.
Pese a que hubo más factores en la caída de la mortalidad más allá de las intervenciones médicas, como indica el estudio en que Kennedy se basó para esas declaraciones, ese mismo trabajo recoge que las reducciones en las enfermedades prevenibles mediante la vacunación “son impresionantes”. Varios modelos y estimaciones han calculado las vidas salvadas por las vacunas contra la COVID-19 en millones. Y la viruela ha sido erradicada en seres humanos gracias a las vacunas.
Confunde eventos ocurridos tras la vacunación, aunque no estén causados por esta, con efectos secundarios provocados por el fármaco
Como en alguna desinformación que ya desmentimos, Kennedy cita un documento de una compañía de seguros de salud para decir que “se notifican menos de 1 de cada 100 lesiones por vacunas”. En realidad, esas “lesiones por vacunas” son problemas de salud que ocurren después de la vacunación, pero que no son necesariamente causadas por una vacuna. Muchas simplemente coinciden en el tiempo.
Kennedy ha llegado a decir (y luego negarlo) que ninguna vacuna es segura y efectiva. Puedes leer más desinformaciones sobre vacunas defendidas por RFK Jr. y su organización en este artículo de Factcheck.org.
Negacionista de la verdadera causa del sida
“Hay candidatos mucho mejores que el VIH para lo que causa el sida”. Esta frase de Kennedy es una muestra de cómo este abogado desinforma sobre la salud. Porque el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es la causa detrás del sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida).
Ataques al agua con flúor
“Como presidente, voy a ordenar a los CDC que tomen todas las medidas necesarias para eliminar el fluoruro neurotóxico del agua potable estadounidense”, afirmó Kennedy cuando todavía era candidato independiente a presidente de Estados Unidos. Pero, como ya contamos, el flúor es un mineral que en las dosis adecuadas es necesario para mantener una adecuada salud dental. Cuando su aporte en la dieta es insuficiente, se puede tomar la medida de añadir flúor al agua potable de forma que se aumente ese aporte a la población. No hay evidencias de que causen cáncer y los CDC señalan que es seguro y efectivo.
Culpa de los tiroteos a los antidepresivos
Antes de la introducción del Prozac (nombre comercial del antidepresivo fluoxetina), casi no había tiroteos masivos en Estados Unidos, según Kennedy. Pero correlación no es causalidad. Si los fármacos psiquiátricos fuesen la causa, la frecuencia de los tiroteos sería mucho mayor, según los expertos consultados por PolitiFact.
Afirma sin pruebas que la disforia de género se debe a sustancias químicas
“Muchos de los problemas que vemos en los niños, en particular en los varones, probablemente se subestima cuánto de eso proviene de exposiciones químicas, incluyendo mucha de la disforia sexual que estamos viendo”. Con estas declaraciones RFK Jr. culpa a sustancias químicas como el herbicida atrazina de que haya personas trans. Se basa en un estudio en una especie de ranas al que esta sustancia induce una “feminización completa y castración química” en los machos. Pero la mayoría de las personas no están expuestas a la atrazina de forma regular, según los CDC, y no hay evidencias de efectos similares en humanos.