“Todo parece indicar que, efectivamente, ha habido un pucherazo” es uno de los mensajes que se están difundiendo en este vídeo, que dice que ha habido fraude electoral por el hecho de que Vox “se mantuviese con los mismos escaños” desde que estaba el 15% de los votos escrutados hasta el final. Pero es un bulo que eso signifique que ha habido un “pucherazo”.
Desde que se empiezan a contar los votos se reparten todos los escaños en función de ese recuento, aplicando el sistema D’Hont. Por eso los escaños van fluctuando mientras se realiza el escrutinio. Es decir: los 350 escaños del Congreso se distribuyen según el porcentaje de voto de cada partido en cada provincia, independientemente de que queden votos por contar. Esa distribución se va actualizando conforme avanza el porcentaje escrutado pero la suma en todo momento da 350.
Por eso es posible que no aumente el número de escaños conforme avanza el escrutinio o que incluso este disminuya, como en el caso del PSOE, que consiguió menos escaños con el 100% de los votos escrutados que cuando había un 15% contado.
Los votos se reparten en los 350 escaños aplicando el sistema D’Hont desde que se inicia el escrutinio
Este y otros contenidos que circulan afirman que ha habido un “pucherazo” en las elecciones generales del 23 de julio de 2023. Según dicen, el hecho de que Vox se mantuviera casi con los mismos escaños desde el comienzo del escrutinio demuestra ese supuesto fraude, pero no es cierto.
Cuando comienza el recuento de votos en unas elecciones generales, se reparten los 350 escaños en función del número de votos contados hasta ese momento, aplicando el sistema D’Hont. Es decir, que los 350 escaños se reparten entre los partidos votados, aunque sólo se haya contado un porcentaje pequeño de esos votos.
Los primeros datos del recuento provisional del domingo 23 de julio los conocimos cuando había un 6,19% de los votos escrutados, como os contamos en nuestro programa especial de Twitch en el que fuimos viendo los resultados conforme se iban conociendo. En ese momento, a Vox se le asignaron 31 escaños, dos menos que los que ha conseguido. Con el 15,87% escrutado, seguía teniendo 31.
Mientras que Vox no vio alterado sus escaños en ese periodo, otros partidos como PP, PSOE y Sumar, sí lo hicieron. Al 6,19% de los votos escrutados, PSOE tenía 129 escaños, PP 124 y Sumar 23. Al finalizar el recuento provisional, los resultados electorales de estos partidos fueron los siguientes: PSOE 122 escaños, PP 136, Sumar 31 y Vox 33.
Finalmente, tras el escrutinio definitivo y el recuento del voto CERA, el Partido Popular le ha quitado un escaño al PSOE por Madrid, por lo que los socialistas se han quedado con 121 escaños y los populares con 137.
Por lo tanto, aunque haya sólo un 15% escrutado, los partidos votados se reparten los 350 escaños. Por eso es posible que, por ejemplo, el PSOE comenzara con más escaños de los que ha conseguido cuando se ha finalizado el recuento definitivo.
Uno de los contenidos que difunde esta desinformación dice que el escrutinio lo hace Indra, pero como ya os hemos contado en varias ocasiones, Indra no realiza el recuento de votos, sino que son los miembros de las mesas electorales quienes lo hacen.
En definitiva, no es cierto que el hecho de que Vox apenas variara el número de escaños desde que comenzó el recuento de votos de las elecciones generales del 23 de julio demuestre un “pucherazo”. Los 350 escaños se reparten desde el principio y es posible que haya partidos que disminuyan su número de escaños conforme avanza el recuento o que este no varíe.