“Australia la vacuna está produciendo SIDA en la gente”, afirma un contenido desinformador. Pero es un bulo: ninguna vacuna contra el coronavirus, aprobada o experimental, está provocando sida.
En realidad, una potencial vacuna contra el coronavirus que estaba desarrollando la Universidad de Queensland (Australia) se descartó en la fase 1 por dar falsos positivos al virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) entre sus voluntarios.
Como afirman desde la Universidad de Queensland, “la vacuna no puede causar infección de VIH” y “los análisis confirman que no hay presencia de VIH” entre los voluntarios de la vacuna descartada. La Universidad de Queensland ha explicado a Maldita Ciencia que la vacuna no tiene VIH y los falsos positivos se deben a la presencia de fragmentos de una proteína también presente en el VIH, pero que por sí solos “esos fragmentos son inofensivos y no provocan enfermedades”.
La explicación de los falsos positivos
Pese a generar respuesta inmune frente al coronavirus y no tener efectos secundarios, la posible vacuna ha sido descartada y no pasará a la fase 2 de desarrollo. Los falsos positivos se deben a que la posible vacuna generaba anticuerpos contra fragmentos de una proteína (gp41, que se usa para estabilizar la vacuna) y que precisamente esta proteína también está presente en la envoltura del VIH, según ha explicado la Universidad de Queensland.
Con el comienzo de la vacunación contra el coronavirus, se está viralizando mucha desinformación sobre estas vacunas. Por eso hemos preparado un manual para defenderte y desmentir los bulos que circulan sobre la vacuna contra la COVID-19.
Primera fecha de publicación de este artículo: 28/12/2020