Varias webs han publicado que la DGT (Dirección General de Tráfico) va a modificar la clasificación de etiquetas ambientales de los vehículos a motor, en referencia a las pegatinas CERO, ECO, C y B que permiten clasificar los vehículos en función de sus emisiones.
En sus titulares han indicado que "el gobierno va a modificar las etiquetas de la DGT para recaudar más impuestos" (esdiario), "llegan cambios a las etiquetas ambientales de la DGT: los híbridos serán los grandes perjudicados"(Forococheselectricos.com) y "cambios en las pegatinas de la DGT: el 'sablazo' a los coches híbridos con más impuestos y sin etiqueta 0" (El Español). ¿Qué sabemos al respecto? La DGT niega que tenga cambios previstos en los distintivos ambientales a fecha de 18 de febrero de 2020.
"La clasificación del parque de vehículos con criterios medioambientales es estable, no se va a cambiar", según la DGT
La DGT ha enviado un comunicado en el que niega que esté estudiando ninguna modificación de la clasificación de los distintivos medioambientales. Según el organismo, "la clasificación del parque de vehículos con criterios medioambientales es estable, por tanto no se va a cambiar, tal y como aparece publicado en algunos medios".
Siempre según estas webs, la DGT estaría estudiando modificar el sistema de etiquetas con el fin de "endurecer el acceso a las zonas restringidas a la circulación". Por otro lado, afirman que la DGT estudia que los híbridos enchufables pasen de llevar la etiqueta 0 a Eco. Y también aseguran que estaría valorando que estos coches (los híbridos enchufables) "paguen un impuesto de matriculación del 7% al tener un nivel de emisiones que superan los 80 gramos por kilómetros". Preguntado por Maldita.es a qué se refiere su comunicado, la DGT especifica que se refiere a que no va a cambiar las condiciones técnicas de las etiquetas de los vehículos.
Los ayuntamientos fijan el impuesto de circulación
Con respecto a las zonas restringidas a la circulación y su regulación depende de los ayuntamientos (como Madrid y Barcelona). También el impuesto de circulación (Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica), el cual está gestionado de forma directa por los ayuntamientos. Hay un mínimo fijado por la ley estatal y los Presupuestos Generales del Estado aunque los ayuntamientos pueden hasta duplicar esta cuota.
En Cataluña el impuesto sobre las emisiones de dióxido de carbono de los vehículos de tracción mecánica es gestionado y recaudado por la Agencia Tributaria de Cataluña.