Nos habéis preguntado si comer demasiada fruta puede desgastar los dientes, y la respuesta es que no, no hay pruebas de que comer fruta desgaste más los dientes que comer cualquier otro alimento de la misma textura. Además, la fruta es rica en vitaminas, esenciales para mantener entre otras cosas el buen estado de nuestros dientes.
Sin embargo, sí podemos hacer algunas puntualizaciones. Por un lado, muchas frutas son ricas en azúcares (el melón, por ejemplo) o en ácidos (los pomelos, por ejemplo), y ambos componentes pueden suponer un riesgo para los dientes si los consumimos en exceso. Los primeros porque alimentan a las bacterias de nuestra boca facilitando las caries, y los segundos porque abrasan el esmalte que recubre y protege los dientes.
Por eso, el servicio National Dental Care da algunas recomendaciones para evitar estos daños. Principalmente, que después de comer estas frutas nos lavemos los dientes o nos enjuaguemos la boca para reducir este riesgo, y también optar por las frutas menos dulces y ácidas, como las manzanas, los melocotones o las bayas (arándanos, moras, frambuesas...).
También es buena idea comer la fruta entera y no convertida en zumo. Así aprovechamos todos sus nutrientes (incluida la fibra, que no está en el zumo) y favorecemos la masticación, parte fundamental del proceso de digestión que además mantiene en forma los músculos, huesos y encías de la boca.