A pesar de que el 10 de noviembre se conocieron los resultados de las elecciones a las pocas horas de que se cerraran los colegios electorales, el recuento que se hizo era provisional. El definitivo se hace a partir del 13 de noviembre en las distintas juntas electorales provinciales. Maldita.es ha acudido a una de ellas, la de Madrid, para comprobar de primera mano cómo se hace este recuento.
La Junta Electoral Provincial, como explica el artículo 10 de la Ley Electoral (LOREG), está formada por cinco vocales:
- 3 magistrados de la Audiencia Provincial correspondiente elegidos por el Consejo General del Poder Judicial
- 2 catedráticos o profesores titulares de Derecho o de Ciencias Políticas seleccionados por la Junta Electoral Central
El recuento, tal y como señala la ley, es un acto público, por lo que cualquier ciudadano puede acudir a verlo. A éste pueden asistir también los representantes de las distintas candidaturas que se han presentado a las elecciones para controlar cómo se desarrolla el proceso.
Lo primero: recontar y añadir el voto CERA
El primer paso del proceso es el recuento del voto de los españoles residentes en el extranjero (CERA), el responsable de que en los resultados provisionales la cifra de electores y los porcentajes de participación no cuadren con los resultados definitivos de las elecciones más cercanas, lo que suele ser objeto de conspiraciones. Los funcionarios de la oficina del Censo introducen estas papeletas en urnas. Además, en estas elecciones también se añaden los votos de los miembros de la Policía Nacional y la Guardia Civil que se desplazaron a Cataluña durante la jornada electoral. Se comprueba que las personas se encuentran en el censo y se introducen sus votos en las urnas.
Después de introducir estos votos en sus correspondientes urnas, se realiza el recuento del voto CERA y el de los policías y guardias civiles desplazados. Manuel Herrera, miembro de la Junta Electoral Provincial de Madrid, explica a Maldita.es que “este recuento se hace de forma manual por los funcionarios y es supervisado por los miembros de la Junta, y según la circunscripción puede tardar más o menos. En Madrid esta vez hemos recibido en torno a 35.000 papeletas”
Posteriormente se comprueban las actas de cada una de las secciones censales. Manuel Herrera explica que “comprobamos si los datos en nuestras actas se corresponden con los facilitados por el Gobierno en la noche electoral, y en caso contrario la Junta toma una decisión. Además, se decide si los votos calificados como nulos en las mesas electorales lo son. Cuando este proceso termina, las Juntas Electorales Provinciales enviamos los datos a los partidos y nos reunimos con ellos para ver si nuestros resultados coinciden. Los representantes de los grupos políticos tienen dos días para presentar reclamaciones y protestas, que serán resueltas en un máximo de otros dos días.”
Algunos escaños pueden cambiar con este recuento
Como ya hemos contado en Maldita.es, en este recuento se tiene en cuenta el voto CERA (electores residentes en el extranjero) y en algunas provincias unos pocos cientos de votos pueden hacer bailar el último escaño. De hecho, estos resultados, sumados a errores en algunas mesas y subsanados por la Junta Electoral Provincial, han hecho que el PP obtenga un diputado por Bizkaia (País Vasco) que no conseguía con los datos provisionales. Antes del recuento definitivo, se estimaba que el escaño iba a ser para el PNV, que se queda con tres en la provincia.
Indra no cuenta votos, sólo difunde los resultados provisionales
Como ya os hemos explicado en Maldita.es, Indra no hace el recuento de votos. La empresa adjudicataria sólo se encarga de difundir los datos provisionales, no de contar papeletas.
El primer recuento lo hacen los miembros de las mesas electorales, y el definitivo las Juntas Electorales Provinciales. Ambos se hacen a mano.
El artículo 95 de la LOREG explica que el recuento se hace de la siguiente manera: el presidente de la mesa abre cada uno de los sobres y lee en voz alta la candidatura votada (o, en caso de las elecciones al Senado, la de los candidatos elegidos); después muestra la papeleta a los vocales, interventores y apoderados y la apunta. Al final se comprueba que el número de sobres se corresponde con el de votantes anotados (art. 97) y se destruyen todas las papeletas, excepto las nulas y las que hayan sido objeto de alguna reclamación.Una vez que acaba el escrutinio, la mesa hace públicos los resultados en un acta y hace varias copias: una para colocarla en la parte exterior o en la entrada del colegio electoral, otra para cada uno de los representantes de cada candidatura que la solicite y otra para la la persona designada por la Administración, (art. 98 de la LOREG), que envía por teléfono o mediante una aplicación informática los resultados provisionales al centro de datos electorales y a la empresa adjudicataria, que se encargan de su difusión.