El funcionamiento de las redes sociales es algo que os sigue generando curiosidad y sobre esto concretamente, os hemos hablado alguna que otra vez. Por ejemplo, cuando os hablamos de TikTok y cómo decía la compañía que ordenaba el contenido.
La realidad es que en las principales redes sociales y plataformas de contenido (Facebook, Instagram, Twitter, TikTok, YouTube…) quienes deciden lo que ves y lo que no ves cuando inicias sesión en una de ellas o abres la aplicación son algoritmos. Así es como se llama al conjunto de instrucciones y secuencias con las que los desarrolladores crean programas informáticos y que estos sigan una serie de órdenes.
Es decir, que en principio no hay personitas moviendo los hilos en tiempo real sobre lo que ves en tus redes, sino que lo decide un programa informático que se va actualizando en función de cómo te comportes tú en ella. A qué le das más veces “me gusta”, qué perfiles buscas más habitualmente, con quién hablas por mensajes privados, a quién etiquetas en tus fotos, qué publicaciones retuiteas más, etc.
Además de estas cosas, que nosotros como usuarios ponemos en práctica de forma relativamente consciente, intervienen otras muchas técnicas que no vemos y que también analizan nuestra navegación y las cosas en las que hacemos click. Son las que dejan la llamada huella digital y también ayudan a las empresas a saber qué te interesa y qué no para colocártelo en primera fila cuando abres una plataforma. Por ejemplo, las cookies.
Los algoritmos de recomendación de las redes sociales son secretos
No es posible saber en qué se basan exactamente estas empresas para diseñar un algoritmo que interprete que si me gustan las zapatillas de Nike me pueden gustar las de Reebok o que si le doy tantas veces al botón de ‘me gusta’ a los memes de mi vecina sea porque a partir de ahora quiero ver todas las publicaciones que cuelgue.
¿Por qué? Porque las grandes tecnológicas no ‘liberan’ sus algoritmos para que otros desarrolladores puedan estudiarlos y entender cómo funciona esa parte de la red social. Por eso se dice que algunos algoritmos son como “cajas negras”.
Como os explicábamos en otro artículo, los algoritmos que deciden las publicaciones que vemos explotan un fenómeno llamado el “filtro burbuja”. En el libro “Cómo la red decide lo que leemos y lo que pensamos”, el ciberactivista Eli Pariser explica que navegamos dentro de una burbuja comunitaria donde nuestros contactos piensan como nosotros y comparten cosas afines a nuestras creencias.
Esa burbuja se forma en parte gracias a cómo funcionan estos algoritmos: estos van a tratar de mostrarte aquellos contenidos que consideren que van más contigo. El meollo de la cuestión: ¿hay manera de evadirlos o evitar su influencia? Veamos algunos consejos.
Lo principal que nos dejan cambiar en esta red social es si queremos ver el tablón con el algoritmo de recomendación de Facebook (y que sea este comando el que coloque los posts por ti) o si preferimos ver las publicaciones en orden cronológico, según van saliendo. Para elegir esta opción, ve al menú de la columna izquierda, haz clic en “Ver más” y en el botón “Más recientes”. Si estás con la aplicación, abre el menú desde el icono con las tres rayas .
Desde el menú de “Configuración y Privacidad” > “Preferencias de la sección de noticias” veremos que Facebook también nos da a elegir si hay cuentas concretas que queremos ver al principio del todo (aunque vaya a elegir por su cuenta otros perfiles si no lo hacemos nosotros a mano en este menú).
En esta red social, el truco es muy parecido al de Facebook, solo que con más opciones que toquetear. También nos da la opción de ordenar nuestro tablón de noticias en orden cronológico (según se van publicando los tuits) o mostrando los tuits destacados primero (los que Twitter quiere destacar, claro está). Podemos elegir la opción que prefiramos haciendo clic en las estrellitas que aparecen en la esquina superior derecha de la pantalla.
Además, Twitter nos permite seguir “temas”, no solo personas, y silenciar palabras concretas de las que no queramos oír hablar. Por ejemplo: “desempleo”. Desde la página web, en “Configuración” > “Privacidad y Seguridad” > “Contenido que ves” puedes gestionar lo primero y en ese mismo submenú, en “Silenciar y bloquear”, la segunda opción que te decimos.
Aunque aquí no podemos elegir si vemos los posts en orden o no (hace tiempo que en esta red social se cargaron esta opción), sí que podemos volver a dar unos likes a personas que ya ni nos aparecían activando una pequeña opción. Si vamos a nuestro perfil y de ahí a la lista de “Siguiendo”, veremos un botón al lado de la frase “Ordenado por”. Haced clic ahí y decidid si queréis ordenar el tablón según las personas más recientes que habéis seguido o las más antiguas.
YouTube
Para atajar el problema de YouTube y sus vídeos de recomendación de raíz, os diríamos que probéis a entrar en la plataforma sin iniciar sesión en Google y preferiblemente en una ventana de incógnito. Ahora bien, como sabemos que eso no siempre es posible, os dejamos un pequeño truco: desactivar la “Reproducción automática” al ver un vídeo. Así, al menos evitaréis entrar en el bucle en el que decida meteros su algoritmo de recomendación.
TikTok
De cómo funciona el algoritmo de recomendación de TikTok os hemos hablado más a fondo en el artículo que enlazamos, a raíz de que la propia compañía publicara un post explicando algunas de las cosas en las que se fijaban.
Primera fecha de publicación de este artículo: 20/11/2020.
Primera fecha de publicación de este artículo: 20/11/2020