Nos habéis preguntado cómo es posible que un buscador por el que no tenemos que pagar sea capaz de ganar dinero y, encima, plantar árboles con él. Todo esto mientras asegura ser más respetuoso con nuestra privacidad que otros, como Google, que es la herramienta más usada para realizar búsquedas en internet. Es el caso de Ecosia, un buscador que funciona a modo de extensión para nuestro navegador o usando una aplicación en nuestro móvil.
Ecosia se nutre de los resultados de otro buscador: Bing, de Microsoft
Lo primero que hay que saber es que Ecosia no funciona con una estructura propia, sino que utiliza el sistema de búsquedas de Bing, propiedad de Microsoft. Es decir, que todos los resultados que nos ofrece al buscar algo son los mismos que obtendríamos al buscar en Bing.com. Partiendo de esa base, ya sabemos que algunos datos sí o sí tienen que transferirse a Microsoft: nuestras búsquedas, desde dónde las hacemos, en qué idioma, nuestra dirección IP, etc. porque si no no podrían darnos el servicio.
Con esa información, Ecosia nos muestra anuncios que, a su vez, le ha proporcionado Bing. Cada vez que los usuarios hacen clic en uno de esos anuncios, Ecosia (y Bing) se lleva un porcentaje. Lo que dice la organización es que con esos ingresos pagan a otros socios para que planten árboles. Además, también venden ropa y otros productos personalizados.
Ecosia asegura que datos personales como nombres, fechas de nacimiento o direcciones no se almacenan, pero sí datos menos específicos sobre nuestros dispositivos. Por ejemplo, guarda el idioma en el que buscamos o la dirección IP desde la que nos conectamos, así como los datos de localización de nuestro teléfono (si le damos acceso a ella), que recoge para “mejorar la experiencia” o para “mostrar resultados de búsqueda o anuncios más relevantes”. Al final, Ecosia actúa como un intermediario, lo que añade una capa más de privacidad para los usuarios, a pesar de no ser infalible.
Gana dinero a través de los clics que hacemos en anuncios publicitarios
“Esta empresa tiene la capacidad de reducir muchos costes operativos porque no tiene que mantener una infraestructura ni tampoco una araña para ir buscando los resultados”, comenta a Maldita Tecnología Carlos Fernandez Barbudo, profesor de Teoría Política y Ciberseguridad en la Universidad Rey Juan Carlos e investigador en tecnología. “Tiene un modelo de negocio muy sencillo: hace negocio de los anuncios que sirven a través de Bing”.
Barbudo explica cómo operan la mayoría de servicios gratuitos que generan ingresos mediante la publicidad: “En este caso, dicen que no almacenan la información ni recopilan datos sobre tu comportamiento, lo cual es bastante cierto. El problema es que sí que transmiten información a Microsoft: te adjuntan un identificador único y cada vez que tú utilizas su buscador se lo trasladan, de modo que es esta empresa y en concreto Bing y su sistema de publicidad los que realizan esa personalización”.
Esa personalización es por la que luego pagan las empresas, ya que les interesa saber a quién dirigir su publicidad exactamente para aumentar las probabilidades de que alguien compre su producto. En ese sentido, añade Barbudo, este buscador “es menos intrusivo, amenaza menos a la privacidad porque ellos hacen de intermediario, poniendo una capa más, pero al final sigue basándose en tus búsquedas, en qué haces clic o qué anuncios son más útiles, van personalizando tu contenido”.
La infraestructura de grandes empresas como Google, Amazon o Microsoft no tienen tanta competencia
Aparte de usar la infraestructura de Bing, de Microsoft, Ecosia utiliza otros servicios de grandes tecnológicas: por ejemplo, usan rastreadores de Facebook, Google o Amazon para medir si una campaña de publicidad ha tenido éxito al mostrarse en diferentes páginas web. Al final, siempre suele haber una dependencia de servicios más pequeños hacia estas grandes empresas porque son las que acaparan la infraestructura a nivel global y no hay competencia posible que hacerles.
¿De qué le sirve a estas grandes tecnológicas entonces que un servicio mucho más pequeño aproveche sus herramientas y encima lo vendan como una alternativa? “Muchas veces los beneficios de ofrecer determinados servicios no son necesariamente económicos”, recuerda Barbudo. “Todo lo que tenga que ver con competir por ser la plataforma de referencia para hacer búsquedas en la web refuerza su posición”, añade.
Mantenerse como la compañía referente en el mercado tecnológico es imprescindible para las llamadas GAFAM: Google, Amazon, Facebook, Apple y Microsoft. Pero no solo se trata de mantener su posición dominante: también les permite seguir entrenando sus modelos de personalización de contenidos y de publicidad, porque aunque haya un intermediario como en el caso de Ecosia, siguen recibiendo datos de comportamiento.