El rey emérito Juan Carlos I abandonó España según él por "la repercusión pública" de "ciertos acontecimientos pasados" de su "vida privada". Este anuncio, realizado a través de una carta que envió a su hijo el rey Felipe VI, no es algo nuevo en la monarquía española, han sido varios los reyes que han tenido que dejar el país por motivos diferentes.
CARLOS IV
El siglo XIX, una época convulsa en la historia de España, ha sido testigo del exilio de varios monarcas por la inestabilidad social y política del país. En 1808, durante los últimos años del reinado de Carlos IV y tras la ocupación de las tropas napoleónicas, se produce el Motín de Aranjuez, impulsado por su hijo el príncipe Fernando con el objetivo de destituir a Manuel Godoy, secretario de Estado del rey, y obligar a Carlos IV a abdicar en su hijo. Ante esta situación, Napoleón vio en la inestabilidad de la institución una oportunidad para controlar el trono español, por lo que convocó a todas las partes a una reunión en Bayona donde pactaron, sin que Fernando VII supiera el trasfondo de la decisión, que la devolución del trono a su padre supondría otorgarle el poder al hermano de Napoleón, José Bonaparte.
Aunque ambos monarcas estuvieron exiliados, Fernando VII pudo volver a España y reinar unos años después, Carlos IV no. Tras pasar por varias localidades francesas, finalmente se trasladó a Nápoles donde murió por un ataque de gota en 1819.
ISABEL II
Isabel II, hija de Fernando VII, también tuvo que hacer frente al exilio después de que estallara la Revolución de 1868, conocida como La Gloriosa. La reina abandonó España en tren desde San Sebastián hacia París, donde murió varios años después. Ya fuera del país, en 1870 abdicó en favor de su hijo Alfonso XII pero no pudo reinar porque las Cortes proclamaron rey a Amadeo de Saboya.
AMADEO I
El reinado de Amadeo de Saboya fue breve, de tan solo tres años. Este monarca, hijo del rey de Italia, tuvo que renunciar el trono por la falta de apoyos de un gobierno que había entrado en crisis tras la muerte del general Prim, principal valedor del rey. Esto provocó su exilio, primero a Portugal y más tarde a Turín, su localidad natal, donde fallecería en 1890.
ALFONSO XIII
Ya en el siglo XX, Alfonso XIII, abuelo de Juan Carlos I, también tuvo que abandonar el país tras varios periodos dictatoriales convulsos que terminaron con la monarquía después de unas elecciones municipales en las que ganaron las fuerzas socialistas y republicanas en las principales ciudades españolas. En la noche del 14 de abril de 1931, Alfonso XIII se exilia en España pero no abdica, tiene la esperanza de poder volver. Pero no ocurrió. Finalmente, tras apoyar a Franco en la Guerra Civil con vistas a que pudiera restaurar la monarquía, Alfonso XIII presenta en 1941 su renuncia en favor de su hijo Juan, conde de Barcelona y padre de Juan Carlos I.
Primera fecha de publicación de este artículo: 04/08/2020