Entre aquellos que tenéis mascotas, existe un eterno debate: ¿mejor perro o gato? Para los que habéis escogido la primera opción, esta semana en Maldita Ciencia vamos más allá, tratando de dar respuesta a otra gran cuestión: ¿qué perros son más inteligentes, los de raza o los mestizos? ¿Tienen ventajas o inconvenientes unos frente a otros? Lo cierto es que no hay estudios científicos que señalen a unos u otros: dependerá, en gran medida, de la educación recibida por la mascota.
Antes de responder estas preguntas habría que precisar qué entendemos por inteligencia, que ya genera mucho debate cuando se habla de la especie humana. “Como apunta esta revisión de etología canina, al estudiar la inteligencia en perros deberían tenerse en cuenta varios factores: genes, cultura humana, capacitación de sus progenitores, experiencias tempranas, desarrollo cerebral en el útero y en etapas tempranas del crecimiento”, señala a Maldita Ciencia Javier HM Aranda, veterinario de sanidad animal y maldito que nos ha prestado sus superpoderes.
"Asignar a los animales atributos humanos (necesidades de alimentación, comportamiento, alojamiento, ejercicio, socialización...) se denomina humanización y supone un sesgo a la hora de valorar ciertos rasgos, entre ellos la inteligencia", coincide la veterinaria y maldita Mercedes González.
Aranda es claro: “Los perros de raza no son más inteligentes que los mestizos”. Desde la prehistoria, la especie canina ha sido seleccionada artificialmente para potenciar comportamientos como la caza, el pastoreo, la protección de la comunidad, etc. Así se han ido conformando lo que conocemos como razas caninas. Sin embargo, muchos de los perros de compañía actuales, herederos de aquella selección, ya no están dedicados a las mismas tareas ancestrales. Según las evidencias científicas, dentro de una raza canina, supuestamente homogénea, las capacidades para resolver un mismo test son muy variables entre individuos.
González explica a Maldita Ciencia que los etólogos o especialistas en conducta han descrito tres tipos de inteligencia canina: instintiva, adaptativa y de trabajo.
La primera es la utilizada para llevar a cabo las funciones para las que el perro ha sido seleccionado genéticamente. "Los perros de las razas seleccionadas para una función o aptitud determinada obtendrán mejores resultados que los que no lo están, pero eso no significa que sean menos inteligentes, sino que no están genéticamente adaptados", puntualiza la experta.
La inteligencia adaptativa hace referencia a la capacidad de resolver problemas. Según explica la veterinaria, si hacemos que un perro tenga que pensar, aprender y razonar utilizando sus recursos cognitivos y sensoriales por encima de los emocionales, es capaz de resolver retos que se le ponen delante. En este caso, las diferencias se deben más a los individuos, el ambiente, la experiencia, el entrenamiento y la motivación que a la raza en sí.
Por último, la inteligencia de trabajo y obediencia se refiere a la capacidad de aprender de los humanos. "Al responder a las órdenes, los perros muestran la parte más importante de la inteligencia canina, que es la obediencia, y es una de las características que más valoramos de ellos y por las que los domesticamos", indica González.
La inteligencia canina, por lo tanto, no es un concepto único. La raza influye en aquellas para las que está genéticamente seleccionado. En el resto, como recapitula González, hay diferencias individuales, más las influencias del entorno, de la estimulación, del estado de salud, de la educación o entrenamiento recibidos, de la presencia de elementos motivadores, respeto de los tiempos de actividad y descanso, de la implicación emocional con las personas presentes, de las experiencias previas, etc.
“Esto sugiere que las habilidades cognitivas aparecen de forma similar en las poblaciones humanas y caninas: independientemente de su origen genético”, coincide Aranda.
En este artículo han colaborado con sus superpoderes los malditos Javier HM Aranda y Mercedes González.
Gracias a vuestros superpoderes, conocimientos y experiencia podemos luchar más y mejor contra la mentira. La comunidad de Maldita.es sois imprescindibles para parar la desinformación. Ayúdanos en esta batalla: mándanos los bulos que te lleguen a nuestro servicio de Whatsapp, préstanos tus superpoderes, difunde nuestros desmentidos y hazte Embajador.
Primera fecha de publicación de este artículo: 14/04/2021