Una parada cardiorrespiratoria es el cese brusco, inesperado y potencialmente reversible del latido cardíaco y de la respiración.
Ante una situación como esta, debemos empezar cuanto antes una RCP. Este es “el conjunto de maniobras que se dirigen primero a sustituir y después a restaurar el latido cardíaco y la respiración”, según explica la Asociación Española de Enfermería en Cardiología (AEEC).
Como explicaba a Maldita.es Juan Carlos Montalvá, coordinador del grupo de trabajo de Urgencias de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), ante una parada cardiorrespiratoria, todo el mundo debería chequear ciertos factores. Tras valorar el nivel de conciencia de la persona (estimulándola para ver si está consciente o inconsciente), si no responde, lo primero es comprobar si respira o no (ver-oír-sentir).
“Si no se sospecha de riesgo de lesión medular, situaremos al paciente boca arriba y echaremos hacia atrás la cabeza, colocando una mano en la frente y otra en la mandíbula para despejar las vías aéreas. Comprobaremos si respira acercando nuestra mejilla a su boca y nariz para mirar hacia su pecho, ver si sube y baja el tórax, oír la respiración y sentir si respira”, indica la Asociación de enfermeros.
Si no respira debemos avisar al 112. “Aportaremos la mayor cantidad de información que podamos: tiempo transcurrido, situación, cómo ha ocurrido en caso de haberlo presenciado…”, recuerda la AEEC. Tras ello, iniciaremos la RCP.
“La reanimación debe realizarse a través de compresiones torácicas con las dos manos a nivel del centro del tórax y una cadencia de unas 100 por minuto hasta que llegue la ayuda. En caso de precisar cambio de reanimador, este debe hacerse cada dos minutos”, explica Montalvá.
Ahora bien, ¿cómo nos aseguramos de seguir una cadencia de 100 compresiones por minuto? En 2018 un equipo de investigadores españoles dirigido por Enrique Carrero Cardenal propuso una sencilla respuesta a esta pregunta: seguir el ritmo de determinadas canciones. La mejor alternativa, según los expertos, La Macarena, de Los del Río. También serviría Stayin’ Alive de los Bee Gees.
“Es importante que no se acumule gente alrededor del paciente, para evitar la falta de ventilación. Por supuesto, no hacer nada si no se tienen nociones mínimas o no se dispone de las indicaciones de sanitarios o del sistema de urgencias 112”, añade.
Por si todavía no la conoces, a través de la app Ariadna, impulsada por la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y Cruz Roja, puedes acceder a un mapa colaborativo con los desfibriladores más cercanos a tu posición. Como apunta la experta en Medicina Regenerativa y comunicadora Esther Semper en Twitter, esta información puede ser vital si estás ante alguien con un fallo cardíaco y no sabes si hay algún desfibrilador cerca.