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Los compañeros de Maldito Bulo han explicado cómo se están utilizando falsas declaraciones y fotos de famosas para vender unas píldoras llamadas Keto Plus que supuestamente ayudan a adelgazar.
Además, queremos contaros qué sabemos sobre esas píldoras, qué llevan y por qué no han demostrado tener ningún efecto a la hora de ayudarnos a adelgazar.
Qué es una dieta keto y en qué consiste la cetosis
Para eso tenemos que retroceder un poco y empezar por explicar qué es la dieta keto y la cetosis.
Para empezar hay que saber un poco sobre cómo funciona el metabolismo del cuerpo humano, la serie de reacciones por las que los nutrientes que ingerimos en la comida se convierten en energía que permite al organismo llevar a cabo todas sus funciones. En esa serie de reacciones, el combustible más habitual es la glucosa que el cuerpo extrae de los carbohidratos.
Aunque esa es la principal fuente de energía y a la que el cuerpo recurre primero, no es la única posible. Otra opción son los cuerpos cetónicos, que el cuerpo obtiene procesando la grasa corporal cuando el aporte de carbohidratos no es suficiente. Cuando el cuerpo recurre a ellos es cuando se encuentra en estado de cetosis.
Una dieta keto, o dieta cetogénica, es aquella en la que precisamente se consigue ese estado de cetosis a base de reducir drásticamente el consumo de carbohidratos en la alimentación para obligar al cuerpo a recurrir a la grasa para funcionar. Para una persona sana y dentro de una alimentación controlada, esta opción puede ser válida siempre que se haga durante un tiempo limitado. Eso sí, tiene algunos efectos secundarios temporales: mal aliento, mareos o dolores de cabeza hasta que el cuerpo se acostumbra.
En cualquier caso, las dietas drásticas como esta no son la mejor opción si lo que queremos es perder peso de forma sostenible ya que no se puede prácticar durante mucho tiempo, y si no cambiamos la alimentación a patrones más saludables, es muy probable que el peso perdido se recupere rápidamente.
¿Qué son estas píldoras?
Estas píldoras contienen cetonas exógenas. Es decir, que proporcionan al organismo los cuerpos cetónicos que deben servir como combustible al cuerpo ante la ausencia de la glucosa derivada de los carbohidratos.
El objetivo es, en teoría, conseguir el mismo efecto, la cetosis, sin reducir tan drásticamente la ingesta de carbohidratos y potenciar el efecto adelgazante de la dieta.
Pruebas incompletas y contradictorias
El problema es que no hay evidencias sólidas de que esto efectivamente funcione, y sí algunas de que de hecho podría tener justamente el efecto contrario. Algunos estudios sugieren que el consumo de cetonas exógenas es una forma eficaz de ayudarnos a alcanzar el estado de cetosis, pero esto solo tendrá algún impacto si va acompañado de la misma dieta keto de la que antes hablábamos, alta en grasas y muy, muy baja en carbohidratos.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que el cuerpo tiene un sistema que controla la cantidad de cuerpos cetogénicos presentes en la sangre, ya que un exceso podría hacer la sangre demasiado ácida, de forma que si a través de estos suplementos le damos al organismo suficientes cuerpos cetogénicos, inhibirá el procesamiento de grasa corporal para producir más. Y con eso, daremos al traste con el objetivo de perder peso.
Algunos estudios preliminares sí que han demostrado efectos positivos en la pérdida de peso, aunque por otro motivo: según un estudio publicado en la revista Obesity, el consumo de cetonas exógenas disminuye la sensación de hambre, ayudando a comer menos y con ello a adelgazar.
Pero en conjunto, los argumentos a favor del efecto adelgazante de estas pastillas son pocos, incompletos y contradictorios.
Algunos efectos secundarios
El consumo de cetonas exógenas en principio no tiene riesgos, siempre que estemos seguros de que eso es lo que estamos tomando (es decir, que compremos un producto regulado en una tienda autorizada y no las primeras pastillas que nos encontremos por internet).
Sin embargo, hay principalmente un posible riesgo asociado, que es que para facilitar su absorción a menudo estos compuestos contienen altas cantidades de sales como sodio, magnesio o calcio. Estos minerales, en cantidades limitadas, forman parte de una dieta saludable, pero si nos pasamos, pueden suponer algunos problemas de salud. El exceso de sodio, por ejemplo, está asociado a problemas cardiovasculares (y por eso en personas con hipertensión, por ejemplo, se recomienda reducir y limitar la ingesta de sal).
A esto hay que añadir su mal sabor y el precio que cuestan antes de decidir tomarlas (nuestro consejo sería, de todas formas, que no lo hagas).
En resumen: no hay evidencias de que realmente ayuden a adelgazar
Es decir, que si bien el estado de cetosis puede ayudar a quemar grasa corporal (aunque no debería llevarse a cabo sin control de un nutricionista profesional ni durante demasiado tiempo) consumir estas píldoras o cualquier otra con cetonas exógenas no ha demostrado tener efecto para ayudarnos a perder peso.
Recuerda que una de las estrategias para la venta de estas pastillas por internet está basads en un bulo: están utilizando supuestas declaraciones de famosas como Pilar Rubio o Kim Kardashian en entrevistas ficticias para promocionarlas.
