Hace unos días, Vichy Catalan se convirtió en el centro de cierta polémica científica y nutricional (sí, eso también existe) a raíz de unas declaraciones de su director de Innovación asegurando que un litro de Vichy Catalan al día ayuda a frenar el envejecimiento cerebral. El mensaje se veía reforzado ese mismo día con un tuit de la cuenta de la marca con la misma idea.
¿Y por qué la polémica? Pues porque asegurar que un producto sirve para "luchar contra el Alzheimer" para vender más es meterse en un terreno delicado para el que hace falta tener evidencias sólidas (que no parece haber) y cumplir unos requisitos legales (que no cumplen).
El litio y el cerebro
La relación entre el litio y la salud mental viene de lejos: lleva décadas siendo la base del tratamiento más utilizado contra el trastorno bipolar. Además, algunos estudios recientes han observado que, en gusanos y en moscas de la fruta, el litio es capaz de evitar que se genere una enzima llamada GSK-3.
Esa enzima está presente también en los seres humanos y se sabe que tiene relación con algunas enfermedades neurodegenerativas, como la demencia senil o el alzhéimer. Esto quiere decir que es un elemento prometedor en el estudio de estas enfermedades y en el diseño de futuras terapias y tratamientos.
Sin embargo, pasar de los estudios en insectos a prometer que el litio sirve para luchar contra el alzhéimer es dar un salto científico demasiado grande: por un lado, porque la fisiología de los insectos es diferente a la humana y está por comprobar que la misma reacción se dé en las personas; y por otro porque la relación entre la enzima GSK-3 y el alzhéimer aún no se conoce al detalle, al menos no lo suficiente como para asegurar que inhibiendo la primera se luche contra el segundo.
Pablo Barrecheguren, doctor en Biomedicina y divulgador especializado en neurociencia, desarrollaba a raíz de las declaraciones de Vichy Catalán una explicación de por qué es muy arriesgado relacionar directamente el litio del agua que bebemos con el deterioro neuronal y "muy irresponsable usar temas de salud pública y desinformar a la población solo para vender tu producto". Os recomendamos leer todo el hilo que publicó en Twitter al respecto.
Lo que dice la legislación
Precisamente para que los consumidores no sean bombardeados con publicidad engañosa en cuanto a las propiedades saludables de los productos en el mercado, la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (la EFSA por sus siglas en inglés) debe valorar y aprobar qué se dice de cada alimento o ingrediente respecto a estas propiedades.
Beatriz Robles, nutricionista y tecnóloga de los alimentos, nos explica que "las declaraciones nutricionales de propiedades saludables se pueden mostrar en el etiquetado, la presentación y la publicidad de alimentos que se venden en la UE solo si se ajustan a lo que dispone el Reglamento 1924/2006".
Para que la EFSA apruebe una de estas declaraciones, deben solicitarse basándose en suficientes evidencias científicas, y una vez aprobadas, son públicas y aparecen reflejadas en el texto del reglamento. En ese listado no hay ninguna declaración aprobada para el litio, ni hay en el registro ninguna solicitud enviada para que se apruebe pronto.
Lo que dice Vichy Catalan
Desde Maldita Ciencia nos hemos puesto en contacto con Vichy Catalan para que nos explicase el origen de estas declaraciones nutricionales en su producto. Nos han remitido la misma información que ellos mismos hicieron pública como respuesta a las críticas recibidas.
Pero según Robles, esto no es suficiente para justificar legalmente sus afirmaciones "ni de lejos". De hecho, el documento no es un estudio ni una investigación científica, sino un artículo de una empresa llamada Life Extension, una compañía que se dedica a la venta de suplementos alimenticios.
En él se refiere a los mencionados estudios en moscas y en otros en ratones para justificar las afirmaciones del efecto del litio sobre el alzhéimer y la degeneración cerebral. Sin embargo, no aporta enlaces ni referencias para comprobar a qué estudios se refiere. "Si de verdad están justificando su alegación con este argumento, es muy poco serio", concluye Robles.
En resumen
El litio es un elemento cuya relación con la salud mental es conocida y forma parte de tratamientos para algunas patologías como el trastorno de bipolaridad. Por otro lado, una bebida como el agua con gas que no tiene sin azúcar es una opción saludable y una buena alternativa a bebidas con alcohol o con azúcar.
Sin embargo, el litio no ha demostrado tener ese efecto contra el alzhéimer que la marca le atribuye. Además, asegurarlo incumple la legislación vigente ya que la EFSA no ha aprobado ninguna de estas declaraciones para este elemento.
Publicitar un producto otorgándole efectos concretos sobre la salud es algo que debe estar convenientemente fundamentado y debe cumplir los reglamentos al respecto. Especialmente si va a hacer referencia a una enfermedad tan severa como el alzhéimer para la que a día de hoy no hay cura.