La canícula, el periodo del año en el que más calor hace, se produce en España aproximadamente entre el 15 de julio y el 15 de agosto. En cambio, el solsticio de verano, el día con más horas de sol, ocurre un mes antes: entre el 21 y 22 de junio. ¿No debería hacer más calor cuando hay más insolación? En realidad no, hay un desfase temporal porque las masas de aire necesitan un tiempo para calentarse.
Se trata de la inercia térmica del sistema climático. “Cuando se están produciendo esos días más largos del año al principio del verano astronómico estamos todavía influenciados por masas de aire menos cálido que cuando estamos a finales de julio o agosto porque en ese tiempo se han calentado las masas de aire del hemisferio norte”, ha explicado a Maldita.es Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
En el propio día pasa algo similar. El mediodía solar, cuando el sol está más elevado y más directos caen sus rayos, no es cuando más calor hace. En España, la temperatura más alta del día en verano se registra entre 3 y 4 horas después del mediodía solar, entre las 17 y las 19 horas, explican en tiempo.com. La razón es tanto el calor absorbido durante el día en las superficies, que contribuyen a las islas de calor al liberarse a lo largo del día y calentar el aire, como el calor que aún provocan los rayos bastante perpendiculares a esa hora. Esto hace que siga subiendo la temperatura del aire pasado el mediodía.
Ocurre lo mismo pero al revés en invierno. Los días más fríos del año suelen ocurrir un mes después del solsticio del invierno por el enfriamiento progresivo de las masas del aire en el hemisferio, concluye Rubén del Campo.
Foto de Ben Mack en Pexels