La teoría de la conspiración de los chemtrails, que no tiene ninguna evidencia que la respalde, está detrás de bulos y desinformaciones que describen supuestas fumigaciones sobre la población con sustancias químicas para causar enfermedades o provocar sequía, según el caso. Imágenes de estelas dejadas por los aviones se señalan como supuesta evidencia de esta teoría. Pero, ¿qué son las estelas de los aviones? ¿Por qué se generan? ¿Por qué algunas persisten y otras no? Respondemos algunas de las preguntas más habituales sobre este tema.
¿Qué son los supuestos ‘chemtrails’?
Según las teorías conspirativas, los chemtrails son supuestas estelas químicas que emiten los aviones con diversos efectos perjudiciales. La palabra chemtrail es una contracción de los términos chemical trails o estelas químicas. Se utiliza como oposición a contrails o condensation trails (estelas de condensación) que son las que con frecuencia dejan los aviones al expulsar vapor de agua como parte de su funcionamiento.
Según estas teorías, en los chemtrails no habría vapor de agua, sino unas supuestas sustancias químicas con diversos efectos perjudiciales. Algunos contenidos de esta teoría dicen que buscan causar daño a la población (esparcir enfermedades, favorecer el control mental, causar infertilidad...) y otros que el objetivo es controlar el clima o afectar a las cosechas (robar la lluvia, acidificar el suelo...).
¿A qué se deben las estelas que vemos en el cielo?
Pueden ser cirros, un tipo de nube que se genera en la troposfera —la capa de la atmósfera que está en contacto con la superficie terrestre— y que puede tener aspecto de estelas, o bien pueden ser contrails, estelas de condensación de los aviones. En 2017, la Organización Meteorológica Mundial definió como 'cirrus homogenitus' a las estelas de condensación que duran más de 10 minutos.
¿Por qué los aviones producen estas estelas?
La quema de combustible en los motores de los aviones produce grandes cantidades de vapor de agua que al entrar en un ambiente frío (los aviones vuelan a alturas donde el aire se encuentra a -35°C o menos grados) forma gotas y cristales de hielo, es decir, se condensa formando una estela. Dependiendo de la trayectoria del avión y de las condiciones meteorológicas, se forma una estela, explica a Maldita.es José Luis Sánchez Gómez, investigador sobre física de la atmósfera en la Universidad de León. Estas estelas también pueden dejar de aparecer bruscamente en ciertas condiciones de humedad o temperatura.
“Si los coches de combustión que circulan por nuestras carreteras circularan a temperaturas de -35°C o -40°C”, explica el experto, “veríamos lo mismo, vapor de agua condensándose y generando ‘estelas’”. “Cuando hervimos agua vemos que sale vapor (transparente), que en contacto con aire más frío se condensaría y formaría ‘una estela’”, continúa Sánchez Gómez.
¿Por qué algunas estelas persisten en el cielo y otras no?
Los defensores de los chemtrails argumentan que es posible distinguir un contrail de una supuesta estela química a simple vista: mientras que los contrails serían cortos, finos y durarían menos tiempo en el cielo antes de dispersarse, los chemtrails serían más densos, gruesos y persistentes. Pero, de nuevo, esto tiene que ver con la altura del vuelo y las condiciones atmosféricas del momento, explica Sánchez Gómez.
Cuando los gases que emite el avión se mezclan con el aire circundante, se enfrían rápidamente y, si la humedad en la atmósfera es suficiente para que la mezcla alcance la saturación, se producirá la condensación del vapor de agua, explica la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Esta saturación dependerá de la temperatura y humedad del aire, así como de la cantidad de vapor de agua y la temperatura de las emisiones del avión. Además, si en el ambiente las estelas se encuentran con viento, el aire dispersa las gotas, esa concentración se difumina y la estela desaparece rápidamente, mientras que si el viento es más débil y el ambiente es húmedo, las gotas permanecen más tiempo en el aire, explica Sánchez Gómez.
La AEMET indica que hay tres tipos de estelas: las de vida corta, las persistentes que no se extienden y las que sí lo hacen, cuya evolución depende de las condiciones atmosféricas.
¿Por qué algunos días vemos más estelas en el cielo que otros? ¿Por qué a veces parecen formar una cuadrícula en el cielo?
Como explicamos, las condiciones meteorológicas son el principal factor para entender por qué se forman las estelas, por qué algunas persisten más que otras y por qué a veces el paso de los aviones no deja ese rastro.
El tráfico aéreo también nos sirve para entender por qué algunos días vemos más estelas. Como los aviones circulan por zonas concretas del cielo, esas estelas de condensación se pueden ver en días despejados. Además, ahora los aviones vuelan ligeramente más alto, lo que favorece la formación de estelas. En resumen, si hay más tráfico aéreo, más humedad y menos viento, es probable que veamos más estelas.
¿Las estelas de los aviones provocan una ‘modificación artificial del tiempo’?
No. El principal impacto de las estelas es visual y su efecto es insignificante para el tiempo meteorológico, según la Asociación Meteorológica Española (AME). Las estelas de condensación no tienen nada que ver con cualquier forma de modificación artificial del tiempo, de alteraciones meteorológicas. Tampoco tiene relación con la geoingeniería, un campo de estudios que investiga si se puede contrarrestar el calentamiento global enfriando la atmósfera.
¿Los aviones contribuyen al cambio climático?
Sí. La quema de combustible en los motores de los aviones emite dióxido de carbono (CO2), un gas de efecto invernadero que es el principal responsable del cambio climático. Pero los aviones contribuyen a la crisis climática no sólo con el CO2 que emiten al quemar su combustible. Las estelas de condensación de los aviones representan más de la mitad de su contribución a la crisis climática porque esas nubes recién formadas actúan como si fueran una manta que retiene el calor en la atmósfera, reforzando el efecto invernadero.
El dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero no dejan ninguna huella visible en la atmósfera cuando se emiten desde los aviones, al contrario de lo que sucede con las estelas de condensación formadas por cristales de hielo.
¿Existe evidencia que avale la teoría de los ‘chemtrails’?
No, no existe ninguna evidencia científica a favor de esta conspiración y sí muchas en contra. Los defensores de la teoría de los chemtrails muestran, como pruebas, vídeos y fotos de estelas en el cielo o casos anecdóticos que vinculan a estas supuestas estelas químicas. . Como hemos dicho, las estelas pueden formarse por otros motivos (los aviones) o ser simples nubes.
Por otro lado, el tamaño de esta supuesta conspiración implicaría que cientos o miles de personas estuviesen involucradas, desde altas autoridades internacionales hasta operarios de a pie y pilotos y, sin embargo, asumir que ninguno de los implicados ha roto nunca el secreto. “El coste de un hora de avión pequeño de los que suben hasta 35.000 pies de altura es muy caro. Si le añades el material que deberían emplear para envenenarnos a gran escala, y siempre alrededor del mundo, el coste se dispara, de forma que no creo que haya partida presupuestaria de nadie que la soporte”, agrega Sánchez Gómez a Maldita.es.
Para más información sobre la teoría de los chemtrails y sobre los bulos y narrativas sobre el tema se puede leer más aquí.
¿De dónde surge la teoría de los ‘chemtrails’?
La teoría de los chemtrails empezó a finales de los 90 especialmente a través de webs dedicadas a difundir ideas conspiratorias. En 1997 se podía encontrar un texto, considerado el punto de partida de esta idea en concreto, en el que se afirmaba que "las líneas que llenan nuestros cielos no son estelas de condensación. [...] Todo esto apesta a un programa gubernamental de control de población".
Dos años después, la teoría se expandió por todo Estados Unidos y de ahí a todo el mundo, cuando el periodista William Thomas recogió y emitió estas preocupaciones en el programa de radio Art Bell. Para más información sobre el origen de esta teoría se puede leer aquí.
¿Puedo comprobar qué avión estoy viendo pasar?
Consultar la información de estos aviones para evitar que nos la cuelen con supuestos aviones soltando chemtrails es tan fácil como descargarse una aplicación en nuestro teléfono móvil. Son los conocidos como rastreadores de vuelos, programas que nos permiten consultar en tiempo real el espacio aéreo y conocer todo tipo de información sobre la nave, así como su ruta, velocidad y altitud, entre otros datos.
Por ejemplo, podemos consultar portales como Flightradar24 o ADB-S Exchange. Estas plataformas nos permiten observar de un simple vistazo los aviones que están volando en nuestra zona, conocer cuál es el aeropuerto de origen y realizar un seguimiento detallado de cada nave. Aquí puedes consultar en tiempo real el mapa generado por FlightRadar24. Esta información es accesible para todo el mundo ya que es pública.
Además, estos radares también ofrecen información sobre naves militares y privadas, siempre y cuando tengan activado este sistema de seguimiento.