Maldita Ciencia

Algunos consejos para lidiar con la soledad no deseada en estas fiestas

Publicado el Actualizado el
Tiempo de lectura: 8 minutos
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En corto:
  • Los seres humanos somos animales sociales y es normal buscar herramientas para no encontrarse en soledad no deseada en las fiestas navideñas
  • Las amistades virtuales y comunidades 'online' y centrarse en actividades y aficiones que se puedan hacer en soledad son algunas herramientas para afrontarlo
  • Es importante no patologizar ni medicalizar los sentimientos normales y habituales como esta soledad en estas fechas

Las campañas publicitarias o los eventos que se organizan en diciembre insisten en este mensaje: las Navidades son una celebración para estar en compañía de la familia, amigos, pareja o compañeros. Pero esto no siempre es posible ni controlable: hay quienes, sin quererlo, se ven obligados a pasar estas u otras fechas importantes en soledad (para otras personas, en cambio, la soledad puede ser algo deseado, hablamos aquí de cómo transmitirlo a tus seres cercanos). Ya sea por trabajo, por encontrarse lejos de los seres queridos o por una situación sobrevenida, existen muchos contextos por los que una persona puede pasar la Nochebuena, el Año Nuevo o el Día de Reyes en soledad no deseada.

Los seres humanos, como animales sociales, vivimos en sociedad, una de nuestras principales características como especie. Es lógico que sociabilizar —cuando es lo que queremos y buscamos— sea una necesidad básica y que se busquen herramientas para no encontrarse en soledad, aunque sea transitoria.

La psicóloga clínica Aurora Gómez recomienda a Maldita.es ser muy conscientes de las relaciones primarias que tiene una persona “y qué se puede hacer para mantenerlas”, al tiempo de acordarse de las relaciones secundarias “que parece que no, pero rellenan nuestra ‘barrita’ de Los Sims de socialización (Los Sims es una serie de videojuegos que simulan a la vida cotidiana y cuyo objetivo principal es ir satisfaciendo sus necesidades físicas, mentales y sociales), incluso cuando se tienen interacciones pequeñas, por teléfono o internet”. 

Por situarnos, las relaciones primarias suelen ser los amigos, la pareja, la familia y compañeros vitales en general, mientras que las secundarias son aquellas personas con las que coincidimos habitualmente “como el frutero” y a las que les ponemos cara y nombre.

Métodos para ‘romper’ la soledad en estas fiestas

“Yo recomiendo reconocer (dentro de las relaciones primarias y secundarias) las amistades virtuales. Aceptarlas como tal, dar el paso, hablar y ponerles nombre. Intenta hacer una quedada virtual, jugando al Monopoly online, al Minecraft o invitando a la gente a tu isla de Animal Crossing. Se puede socializar en digital”, propone Gómez.

Una de las estrategias que recomienda es hacer uso de pequeñas comunidades virtuales (clubs de lectura, juegos de mesa online… ): “En ellas existe la oportunidad de hablar con las personas que participan y que los usuarios del chat hablen entre ellos”. Eso sí, Gómez insiste en que hay que ser conscientes de que son interacciones parasociales y no son sustituibles por los apoyos reales.

En este contexto, y aunque haya contenidos y usuarios que sugieren el uso de la inteligencia artificial (IA) como “compañía”, Gómez desaconseja su uso: “Hay muchos motivos, pero especialmente a nivel de privacidad y salud mental es una herramienta realmente peligrosa. Existen casos documentados en los que estas tecnologías han agravado problemas de salud mental previos, e incluso, alentado suicidios”, añade.

Centrarse en actividades y aficiones que se puedan hacer en soledad

“La soledad no deseada puede generar malestar, pero se pueden hacer cosas para mitigarlo”, explica a Maldita.es Ricardo de Pascual, doctor en psicología clínica y psicólogo en Desmarcadxs. Su principal consejo pasa por identificar aquellos elementos y actividades que están en nuestro entorno, que ofrecen tranquilidad y bienestar y que se puedan hacer sin compañía. “Siempre es bueno tener aficiones y gustos que uno pueda hacer en soledad, como cocinar, leer, ver series…”.

Según De Pascual, la soledad no deseada es un factor común en las consultas psicológicas, en los que esta situación puede convivir con otros problemas: “En estas circunstancias se busca que los pacientes convivan con esa soledad de forma menos dolorosa”. Desde su punto de vista, se nos enseña que la Navidad debe girar entorno a reunirse con gente y, cuando esto no se consigue, “la gente puede sentirse peor, incluso para personas que viven solas y a las que esta soledad no les incomoda el resto del año”. Además, “estamos acostumbrados a que ‘en soledad’ signifique sentirse mal, cuando no tiene por qué ser así”.

Gómez explica una herramienta que ayuda a personas que sienten que están en soledad no deseada: un mapa del territorio donde aparezcan los espacios públicos y señalar aquellas actividades de ocio cerca de nuestro hogar donde se pueda interactuar con alguien. “Vamos situando actividades que puede hacer esa persona con los recursos que tenga y aconsejo que tenga citas consigo mismo. A muchísima gente le da vergüenza hacer ocio en solitario”.

Desde el punto de vista del experto, mapear los espacios públicos para tener citas en solitario también puede ser útil para propiciar interacciones con otras personas y mantener conversaciones interesantes. “Se puede ir a eventos de todo tipo, donde es más probable que se entable una conversación interesante con alguien y que se pueda conectar con otra gente. Conocer bien el territorio y apropiarse de él es importante”.

Para aquellas personas que no puedan salir de su hogar o esto le suponga un gran esfuerzo, Gómez incide en que estos espacios no tienen por qué ser físicos: también existen comunidades en internet (en videojuegos, en foros, en servidores de Discord, en redes sociales…) donde se puede llevar esta soledad o coincidir con otras personas en una situación similar estas fiesta.

Es importante no patologizar ni medicalizar los sentimientos normales y habituales

Algo sobre lo que alertan los expertos en salud mental es en la problemática de patologizar o medicalizar los sentimientos humanos, también los negativos, como es esta soledad no deseada o la tristeza que conlleva esta situación. 

Gómez define la soledad como un sentimiento más, “como el hambre”, y destaca que es “saludable” sentir esta soledad no deseada “porque te dice que en ese momento tienes un déficit de sociabilización y necesitas conectar con alguien”. Para ilustrar la soledad dentro del catálogo de sentimientos humanos, la experta recomienda el corto del canal de divulgación germano-anglosajón Kurzgesagt – In a Nutshell.

Por su parte, De Pascual incide en el mensaje de que “no todo lo que implica sentirse mal es evitable”. “Hay malestares, como este, que ocurren y no hay más remedio o con los que se puede hacer algo para mitigarlos. Pero no son un indicativo de que estemos haciendo algo mal”.

Observar la soledad no deseada y transitoria como algo que precisa de ayuda profesional, patologizarlo, “puede llevar a la persona a pensar que hay algo mal consigo”. Lo compara con estar frustrado, estresado o cansado por el trabajo: “Eso no requiere terapia, eso requiere un sindicato”.

Irene Fernández, psicóloga sanitaria en Libertia Psicología, explica que parte de la vida consiste “en lidiar con emociones desagradables y dificultades” y que situaciones como esta constituyen nuestra existencia.

En este contexto, la terapia psicológica es un espacio formal de ayuda donde se reciben herramientas y estrategias para reducir aquello que genera malestar psicológico. Este espacio, insistimos, no da respuestas a todas las preguntas ni tiene la solución exacta para cada problema, sino las herramientas para lograr que sea la propia persona la que pueda aprender a afrontarlo. A su vez, tampoco se debe esperar metas irrealistas como conseguir que no nos afecten las cosas, no sentir tristeza o ser felices todo el tiempo.