MENÚ
MALDITA CIENCIA

Por qué el yogur no es un remedio útil frente a la candidiasis vaginal

Publicado
Claves
 
  • El yogur no sirve para tratar la candidiasis vaginal
  • Las bacterias que proporciona no son las mismas que las propias de la vagina
  • Recurrir a 'remedios naturales' no es lo más efectivo y puede retrasar el diagnóstico y el tratamiento adecuado 

Comparte
Categorías
Recursos utilizados
Expertos
Superpoderes
Literatura científica

“El yogur es un remedio casero común para las infecciones vaginales por hongos”, sostienen artículos de diferentes páginas web. Pues bien: no. ¿Te gusta condimentar tus recetas con ajo o vinagre? Perfecto, puede que así te resulten más sabrosas. ¿También sueles utilizar colutorio para tener un aliento refrescante? Okey, tiene sentido. Lo que no lo tiene es hablar de 'beneficios' cuando nos referimos al contacto de ese vinagre, ese ajo o ese colutorio con la vagina. ¿Qué queremos decir con esto? Que, aplicados en las partes nobles, ni estos ni cualquier otro producto, objeto o sustancia que no esté destinado a ello, van a mejorar la salud de las mismas.

“Ni estos ni cualquier otro producto, objeto o sustancia que no esté destinado a ello”, repetimos. En este combo, también se incluye el yogur.

Por qué no es buena idea aplicar yogur en la vagina para eliminar la candidiasis (ni cualquier otra infección)

“Existe la popular creencia de que el yogur aplicado en la vagina es un buen remedio para mejorar la mal llamada ‘flora’ (hoy microbiota) o para tratar la candidiasis”, introduce la farmacéutica y divulgadora Marián García (aka Boticaria García) en su blog. Añade que, como todos los mitos, este se sustenta en alguna teoría “más o menos peregrina, pero con algo de ‘fundamento’”. En este caso, se alega que el yogur es eficaz porque contiene ‘bacterias beneficiosas’ que, en teoría, ayudan a aliviar los síntomas de la candidiasis.

Por muy lógica que parezca esta idea, “los probióticos de los yogures no son los mismos que necesita nuestra vagina”, ni los genitales, en general. Mientras que, para tal objetivo, algunos de los más estudiados con posibles efectos positivos son L. acidophilus, L. rhamnosus y L. reuteri, para que el yogur pueda llamarse yogur, según la legislación, este debe estar fermentado por obra y gracia de L. bulgaricus y S. thermophilus. Es decir, las bacterias necesarias para cada cometido son diferentes.

Es más, aun tratándose de las mismas, “los probióticos no han demostrado evidencia concluyente” (mucho menos aplicados a través la aplicación de yogur en la vagina): “Hasta la fecha no hay ninguna alegación aprobada por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés) que permita decir que los probióticos ‘suben las defensas’”, aclara García.

Como añade, es cierto que existen estudios prometedores sobre el uso de algunos probióticos vía vaginal, “pero la última revisión Cochrane publicada en noviembre de 2017 arroja esta conclusión: ‘No hay pruebas suficientes para el uso de probióticos como adyuvantes de los medicamentos antimicóticos convencionales o para usar aisladamente en el tratamiento de la candidiasis vulvovaginal en mujeres no embarazadas’”.

Otro estudio más reciente, publicado en la revista científica Frontiers en febrero de 2023, concluye que se ha demostrado que el uso de Lactobacillus tiene cierto efecto en la prevención y el tratamiento de la candidiasis vulvovaginal en muchos experimentos in vivo (en animales) e in vitro (en condiciones de laboratorio), pero que los datos clínicos aún son escasos y deben explorarse más a fondo. “Se cree que con el avance de la tecnología, la composición del microbioma vaginal y los efectos preventivos y terapéuticos del microbioma vaginal sobre la candidiasis vulvovaginal sintomática pueden dilucidarse aún más”, indican los autores.

¿Cuál es la forma correcta de abordar las infecciones vaginales?

Como recordaba Amèlia Acera, ginecóloga y maldita que nos ayudó con sus superpoderes, más allá del yogur, “más de la mitad de las mujeres que se automedican por candidiasis vaginal nunca tuvieron una candidiasis” y añadía que, en realidad, la irritación (en caso de tenerla) puede deberse a algo temporal y con rápida solución (repetimos, lejos de lo que guardamos en la nevera). También destacaba la posible entrada en escena de un viejo conocido: el efecto placebo.

Según Pablo Tobías, ginecólogo miembro de la comunidad de malditos que nos prestan sus superpoderes, ante casos de infecciones vaginales, se debería consultar a un especialista en Medicina de Familia o Ginecología, o matrón/a. Al ser causadas, generalmente, por especies invasivas del hongo Candida albicans, “los tratamientos habituales son antifúngicos orales (más efectivos) o vaginales”. Eso sí, añade que, en casos recurrentes o complicados, el tratamiento puede (y de hecho suele) cambiar.

Para prevenir la candidiasis vaginal, la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) recomienda evitar duchas vaginales y ropa apretada o sintética y no abusar de los salvaslips. "Recurrir a 'remedios naturales' no es efectivo: puede retrasar la instauración del tratamiento más adecuado que evite complicaciones mayores y no están exentos de efectos secundarios (no todo lo que es natural es inocuo), concluía Vicent Carmona, ginecólogo y maldito que también nos ayudó con sus superpoderes.

En este artículo han colaborado con sus superpoderes Vicent Carmona, Pablo Tobías y Amèlia Acera, ginecólogos.

Amèlia Acera forma parte de Superpoderosas, un proyecto de Maldita.es en colaboración con FECYT que busca aumentar la presencia de científicas y expertas en el discurso público a través de la colaboración en la lucha contra la desinformación.

Gracias a vuestros superpoderes, conocimientos y experiencia podemos luchar más y mejor contra la mentira. La comunidad de Maldita.es sois imprescindibles para parar la desinformación. Ayúdanos en esta batalla: mándanos los bulos que te lleguen a nuestro servicio de Whatsapp, préstanos tus superpoderes, difunde nuestros desmentidos y hazte Embajador.

Hazte maldito, Hazte maldita
Te necesitamos para combatir los bulos y la mentira: sólo juntos podemos pararla. En Maldita.es queremos darte herramientas para protegerte contra la desinformación, pero sólo con tu apoyo será posible.

Eres muy importante en esta batalla para que no nos la cuelen. Seguro que tienes conocimientos útiles para nuestra batalla contra los bulos. ¿Tienes conocimientos de idiomas? ¿Lo tuyo es la historia? ¿Sabes mucho sobre leyes? ¡Préstanos tu Superpoder y acabemos juntos con los bulos!

También puedes apoyarnos económicamente. Maldita.es una entidad sin ánimo de lucro y que sea sostenible e independiente, libre de publicidad y con profesionales bien remunerados dedicados a luchar, contigo, contra la desinformación depende de tu ayuda. Cada aportación cuenta, cualquier cantidad es importante.