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Viruela del mono: qué es, cómo se transmite y hasta qué punto supone un riesgo

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El pasado 15 de mayo, Reino Unido lanzó una alerta sanitaria tras detectar los cuatro primeros casos de infección por viruela del mono (Monkeypox, en inglés) en Europa. Desde entonces, las autoridades sanitarias de Madrid (España), Portugal, Canadá y Estados Unidos han informado de posibles nuevos casos de infección. Esta enfermedad zoonótica viral, que es poco frecuente, generalmente se presenta con fiebre, dolores musculares y una erupción que comienza en la cara y se extiende a otras partes del cuerpo. Os contamos todo lo que sabemos al respecto. 

¿Qué es la viruela del mono?

La viruela del mono es una infección zoonótica rara emergente que puede propagarse a los humanos y que suele aparecer en África occidental y central, donde ahora es endémica, según explica en The Conversation Raúl Rivas González, catedrático de Microbiología de la Universidad de Salamanca.

La patología fue descubierta en 1958. Según Rivas, fue entonces cuando ocurrieron dos brotes de una enfermedad similar a la viruela en colonias de monos mantenidos para labores de investigación. Por esta razón recibió el nombre de “viruela del mono” o “viruela del simio”.

¿Cuáles son los síntomas?

“En los seres humanos, los síntomas de la viruela del simio son similares a los de la viruela, aunque algo más leves”, afirma Rivas. La enfermedad comienza con fiebre, dolor de cabeza, muscular y de espalda, escalofríos y agotamiento. La principal diferencia entre los síntomas de la viruela humana y la viruela del simio es que “la segunda hace que los ganglios linfáticos se inflamen, mientras que la primera no”.

El período de incubación de la viruela símica, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), suele ser de 6 a 16 días, pero puede reducirse a 5 y elevarse a 21 días y los síntomas normalmente duran unas tres semanas.

“Es normal desarrollar una erupción, que a menudo comienza en la cara y luego se extiende a otras partes del cuerpo, particularmente a las manos y los pies”, añade Rivas. Al poco tiempo, la erupción “cambia y pasa por diferentes etapas antes de formar una costra y caer finalmente”. 

Desde la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica aconsejan que si tienes dudas de que puedes estar infectado, contactes con tu centro de salud para tomar las decisiones de diagnóstico terapéuticas oportunas.

Mariano Esteban, virólogo del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC), explica a Science Media Centre (SMC) España que si el virus es el del Congo, puede provocar una mortalidad del 10% en las personas infectadas. “Es más letal que el de África del Oeste, cuya letalidad es del 1%”, señala.

Los casos más graves se producen con mayor frecuencia entre los niños y su evolución depende del grado de exposición al virus, el estado de salud del paciente y la gravedad de las complicaciones, tal y como señala la Organización Mundial de la Salud.

No obstante, la mayoría de los casos se resuelven favorablemente, “hecho que también está ocurriendo en los casos detectados en estos días”, según asegura a SMC Jacob Lorenzo-Morales, profesor titular del Área de Parasitología y director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias de la Universidad de La Laguna. 

¿Cómo se transmite el virus?

La viruela del mono se transmite de simios a humanos de forma muy rara, según Lorenzo-Morales. En humanos, la enfermedad se contagia por contacto estrecho. “Se cree que la transmisión se produce a través de la saliva o excreciones respiratorias, o por contacto con el exudado de la lesión o el material de la costra”, afirma Rivas. La excreción viral a través de las heces “también puede representar otra fuente de exposición”. Pese a que el virus tiene muchas formas de transmisión, Esteban subraya que no es tan transmisible como el SARS-CoV-2 o la gripe. 

La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid señala que todo parece apuntar a que el contagio de los 23 casos sospechosos detectados en la región se ha producido por contacto con mucosas durante las relaciones sexuales.

Mar Faraco, presidenta de la Asociación de Médicos de Sanidad Exterior (AMSE), explica a Science Media Centre España que “el hecho de que varios de los casos sean entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres no implica que sea una enfermedad de transmisión sexual como tal”.

¿Cuál es el riesgo de que se produzca un gran brote en España?

A 18 de mayo de 2022 la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha detectado 23 posibles casos de infección por viruela del mono en la región, que están pendientes de confirmación.

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha asegurado este miércoles que no es probable que la viruela del simio vaya a generar una transmisión importante en España, pero ha alertado de que hay que tener cuidado porque tampoco se puede descartar.

Estamos trabajando con todas las hipótesis posibles y cuando tengamos información un poco más sólida, ya se explicará y se darán los datos necesarios”, ha apuntado Simón, según recoge la Agencia SINC.

En general, según Lorenzo-Morales, en humanos esta viruela “tiene una tasa de transmisión baja y los brotes que han ocurrido anteriormente no tenían más de una segunda generación de transmisión”. En los últimos días, el experto señala que se ha detectado tercera y cuarta generación. “Aunque es poco probable que la viruela del mono genere una transmisión importante, hay que estar atentos, de ahí que se haya declarado alerta sanitaria”, señala.

Para Faraco, el riesgo de que se produzca un brote importante en España es muy bajo. “Si lo hubiera, no estamos en absoluto en una situación similar a la de la COVID-19”, señala. 

¿Existen vacunas contra la viruela del mono?

Desde el Comité Asesor de Vacunas (CAV) de la Asociación Española de Pediatría subrayan que las vacunas originales de la viruela (primera generación) ya no están disponibles en el mundo. En Maldita.es ya os hemos explicado lo que aprendimos con la erradicación de la viruela, certificada por la OMS en 1979.

Pese a que se han desarrollado nuevas vacunas (de segunda y tercera generación) con actividad frente a la viruela humana y la del mono, el CAV señala que “tienen una disponibilidad muy limitada”.

A diferencia de la COVID-19, Faraco subraya que, en este caso, se trata de una enfermedad conocida y que hay tratamientos antivirales que, aunque no están aprobados para esta indicación, se sabe que funcionan y también hay vacunas: la de la viruela humana y también la más reciente específica contra este virus de la viruela de los monos. 

“Hay muy poca cantidad de ambas ahora mismo, no sería rápido disponer de la cantidad suficiente para todo el mundo, pero tampoco sería como empezar de cero sin una vacuna”, concluye.

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