En los últimos meses desde Maldita Ciencia hemos resuelto todo tipo de consultas sobre los niños: desde si se resfrían por caminar descalzos a si es malo para la salud que se pinten las uñas o si corren riesgo de infarto por llevar mascarillas durante horas. Ahora nos habéis preguntado cuándo empiezan a hablar. A los tres meses suelen empezar a gritar. Poco después comienzan a balbucear y al año, a decir sus primeras palabras.
Lidia Rodríguez, presidenta de la Asociación Española de Logopedia, Foniatría y Audiología e Iberoamericana de Fonoaudiología (AELFA-IF), cuenta a Maldita Ciencia que el desarrollo del lenguaje comienza con la comprensión y sigue con la expresión: “Se inicia con la escucha y la mirada, con los sonidos y los gestos, y luego con las palabras y las frases”.
“El niño aprende a hablar porque está con gente que habla con él desde que nace o incluso desde antes”, señala la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap). Para un buen desarrollo del lenguaje, esta entidad considera necesario que la madre, el padre o los hermanos “hablen” con el niño. También “que le transmitan el mensaje verbal con un gesto amable y le cuenten lo que pasa en su ambiente”.
Desde la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (Sepeap) indican a Maldita Ciencia cuál es el proceso por el que pasan los niños para empezar a hablar. La etapa prelingüística es la que va desde que nacen hasta los 18 meses. Desde un primer momento pueden bostezar o suspirar y poco después empiezan a imitar melodías y sonidos del adulto o a emitir sonidos graves (gruñidos) o muy agudos (chillidos).
Verónica del Villar, vocal de Valladolid en la Asociación de Logopedas de España (ALE) y logopeda pediátrica en el centro Gaia de Valladolid, cuenta a Maldita Ciencia que los niños comienzan a gritar a partir de los tres meses de vida: “Aquí es donde se dan cuenta que tienen voz y empieza a llamarles la atención”.
“Cerca de los seis meses se produce un balbuceo, donde le escucharemos todo el tiempo decir “bababababa”, “gagagaga”, “papapapa”... Dependerá del bebé y con qué se encuentre más cómodo”, comenta Del Villar, que también es experta en atención temprana.
Al balbuceo, según explica Rodríguez, le sigue la “fase de jerga”, en la que el bebé puede sonar como si dijera algo, “pero su ‘discurso’ no sonará como palabras reconocibles”. “Las primeras palabras con significado suelen empezar alrededor de los 12 meses”, añade.
Del Villar confirma que, a partir del año, este balbuceo se irá transformando en las palabras que más empezará a usar. Por ejemplo, “papá”, “mamá”, “pis”, “pan” o “caca”. Aproximadamente a los 18 meses “ya debería tener un repertorio de aproximadamente 20 palabras”.
De los 18 meses a los dos años la mayoría de los niños empiezan a unir dos palabras en “frases” cortas, según Rodríguez: “El niño entenderá gran parte de lo que sus padres dicen y ellos pueden entender la mayor parte de lo que su hijo dice. Las personas desconocidas entenderán aproximadamente la mitad de lo que diga”.
Desde los dos años, según explican desde Sepeap, los menores empiezan a asociar varias palabras, a utilizar la entonación y a hacer frases algo más complejas utilizando el orden “sustantivo-verbo-adjetivo”.
A partir de los tres años su vocabulario crece: puede saber hasta 600 o 1.000 términos, según la Sepeap. “Puede esperar conversaciones más largas y complejas sobre los pensamientos y sentimientos de su hijo”, explica Rodríguez.
El niño puede “preguntar sobre cosas, personas y lugares que no tiene delante”. Por ejemplo, podría decir “¿también llueve en casa de la abuela?”. Además, es posible que “comprenda la gramática básica y empiece a utilizar frases con palabras como “porque”, “si”, “así” o “cuando”.
Eso sí, a la hora de aprender a hablar, cada niño “tiene su propio ritmo de aprendizaje”, tal y como indica la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria: “Puede ser normal que un niño haga frases de 2 palabras a los 15 meses o que las haga a los 24 meses, de la misma forma que unos niños andan con 10 meses y otros con 17 meses, aunque lo más normal sea que anden a los 12 o 13 meses”.
“Menos bulos, más rigor científico” es un proyecto de DKV Salud con contenido editorial de Maldita.es.
Primera fecha de publicación de este artículo: 31/05/2021