Desde al menos 2012 se mueve este bulo. Fue uno de los primeros que desmentimos en Maldita.es y ahora regresa. Una cadena en redes asegura que "Japón mantiene a raya al islam poniendo restricciones al islam y a todos los musulmanes", que "Japón es la única nación que no concede la ciudadanía (ni residencia permanente) a los musulmanes" y que "en las universidades de Japón no se imparten las lenguas o la cultura árabe...". Todo ello para dar a entender que el islam, los musulmanes y la cultura árabe han sido vetados en el país, pero esto no es cierto.
Estos mensajes no solo se han movido en español sino también en inglés, francés, italiano y alemán, entre otros idiomas, y también en diferentes formatos: carteles en las redes, un post en Facebook, una cadena en Twitter... Os lo contamos:
Japón es la única nación que no concede la ciudadanía (ni residencia permanente) a los musulmanes.
Falso. Japón no pregunta por la religión a la hora de conceder nacionalidad. Aquí puedes ver los tipos de adquisición de nacionalidad que aparecen del Ministerio de Justicia japonés: por nacimiento, por residencia, etc. En ninguno de estos casos aparece la religión como un requisito a favor o en contra del solicitante. De hecho, lo que tienen en cuenta es el tiempo que el o la solicitante lleva viviendo en el país, la edad o la solvencia económica, entre otros requisitos.
Japón ha establecido una legislación férrea sobre la divulgación cultural: en las Universidades no se imparte el idioma o cultura árabe
Falso. Universidades como Tokyo University of Foreign Studies (TUFS) dan clases e historia del mundo árabe, también la de Osaka University.
Japón prohíbe expresamente la importación de ejemplares del Corán editados en idioma árabe.
Falso. En la International Islamia School Otsuka en Tokyo Japón, se enseña a leer el Corán en las clases a alumnos de primaria. Además, también se venden ejemplares del Corán en japonés.
Los musulmanes residentes en Japón son empleados de empresas extranjeras. La política de contratación nacional excluye a los musulmanes.
Falso. En las peticiones de visa no se pregunta por religión. Por ejemplo, aquí puedes echar un vistazo al formulario que se rellena para los españoles donde no preguntan por ningún tipo de religión: ni islámica ni católica.
Los 2 lakhs musulmanes con residencia temporal deben seguir la ley japonesa de la tierra, hablar japonés y profesar su fe sólo en su casa
Falso. Hay mezquitas en Japón que permiten profesar la fe abiertamente. Entre ellas, se encuentran Fukuoka, Kobe o Tokyo Camii.
Japón es el único país del mundo que tiene un número mínimo de embajadas ubicadas con misiones diplomáticas en países islámicos.
Falso. Hay embajadas en Bahrein, Irán, Iraq, Jordania, Kuwait, Líbano, Omán, Qatar, Arabia Saudí, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, entre otros países. Aquí puedes consultar el listado completo del país y sus embajadas.
Los musulmanes no pueden alquilar una casa en Japón y si alguien sabe que su vecino lo es, informa al vecindario para estar alerta.
Falso. Hay unos 100.000 musulmanes en Japón, según datos de la Universidad de Waseda (Tokyo), y alquilan casas. Además, la Constitución del país prohíbe discriminar por credo (artículo 14). "Todos los ciudadanos son iguales ante la ley y no existirá discriminación política, económica o social por razones de raza, credo, sexo, condición social o linaje".
El Gobierno japonés opina que el Islam es fundamentalista y que en la era de la globalización no están dispuestos a adaptarse al entorno.
Falso. Como ya os contamos, el primer ministro ha llegado a decir que el espíritu del islam es el amor por otros. Y también que Japón y la comunidad musulmana "tienen una cultura común que otorgan importancia al hecho de vivir unos con otros en un espíritu de tolerancia".
Como os decimos, esta cadena de WhatsApp también se ha movido en otros idiomas y, de hecho, los compañeros de PolitiFact, del International Fact Checking Network también lo han desmentido.
Por lo tanto, ni el islam ni los musulmanes están vetados en Japón.
Esta pieza fue desmentida por Maldito Bulo con fecha 24/0/2017