Tras la investidura fallida de Pedro Sánchez, la posibilidad de unas nuevas elecciones generales en noviembre está cada vez más cerca, y nos habéis preguntado mucho cuál sería el precio de unos nuevos comicios. Si tomamos como base el presupuesto de las elecciones anteriores, lo más probable es que el precio se encuentre por encima de los 170 millones de euros. Os lo explicamos.
Las elecciones generales de los últimos años costaron entre 174 y 185 millones de euros
En 2019, el gasto para las elecciones generales fue de 138.961.516,72 euros. De ellos, la mayor parte (casi 135 millones) se sacaron del Fondo de Contingencia de ejecución presupuestaria, una cantidad prevista en los Presupuestos Generales del Estado para hacer frente a necesidades inaplazables, como se recoge en el artículo 50 de la Ley General Presupuestaria. A esta cifra hay que sumarle las subvenciones para los partidos, que suman 46.775.740,16 euros. Estas subvenciones se calculan en función a los resultados electorales que obtiene cada partido. En total entre gastos y subvenciones, se destinaron algo más de 185 millones de euros a las elecciones generales del 28 de abril.
En 2016 el presupuesto para las elecciones fue de 130,6 millones de euros en gastos generales. Además, se destinaron algo más de 44 millones de euros más para subvenciones a los partidos, por lo que en total se utilizaron 174,8 millones de euros. En las elecciones generales de 2015 se gastaron 130,2 millones más otros 44 millones de euros en subvenciones, lo que suma 174,3 millones de euros.
Gastos generales | Subvenciones | Total * | |
---|---|---|---|
2015 | 130.244.505,08 € | 44.101.439,34€ | 174.345.944,42 € |
2016 | 130.672.066,71 € | 44.113.209,55 € | 174.785.276,26 € |
2019 | 138.961.516,72 € | 46.775.740,16€ | 185.737.256,88 € |
Casi todo el presupuesto se dedica a gastos de las administraciones públicas y a gastos postales
De los casi 139 millones presupuestados en 2019, 58,8 millones de euros se han destinado a las administraciones públicas (donde se incluyen partidas como el despliegue policial), 56 millones y medio a gastos postales (voto por correo y buzoneo), 14 millones a logística electoral, 7,9 millones a la difusión del escrutinio provisional y las telecomunicaciones y 1,6 millones a gastos varios e imprevistos (p. 16).
En 2016, las administraciones públicas se llevaron 55,9 millones de euros y el operador postal 46,5 millones de euros. Para la difusión del escrutinio se destinaron 13,9 millones de euros, 12,6 millones para logística electoral y 1,7 millones para imprevistos (p.17).
En 2015 se destinaron 55,1 millones de euros a las administraciones públicas, 48 millones al operador postal, 12,8 millones se dedicaron a la difusión del escrutinio electoral y a las telecomunicaciones y 12,6 millones de euros euros para la logística electoral. El gasto para imprevistos fue de 1,7 millones de euros (p.17).
2015 | 2016 | 2019 | |
Administraciones Públicas | 55.135.377,82 € | 55.985.939,45 € | 58.790.665 € |
Operador Postal | 48.000.000 € | 46.473.236,98 € | 56.500.000 € |
Difusión del escrutinio | 12.839.000 € | 13.942.321,45 € | 7.912.305,5 € |
Logística electoral | 12.596.890,28 € | 12.596.321,45 € | 14.095.565,7 € |
Otros gastos e imprevistos | 1.673.236,98 € | 1.673.687,55 € | 1.662.980,73 € |
Entre 44 y 46 millones de euros en subvenciones para los partidos en las elecciones generales desde 2015
Como hemos dicho antes, en 2019 se presupuestaron 138.961.516,72 euros para gastos electorales. A esta cifra habría que sumar 46 millones de euros destinados a financiar las campañas de los partidos, 38 de ellos del Fondo de Contingencia.
Este presupuesto se calcula a partir de los resultados electorales, y se desglosa de la siguiente manera: por cada diputado o senador, los partidos obtienen 21.167,64 euros. Además, los que consiguen representación obtienen 0,81 euros por cada voto al Congreso y 0,32 euros por cada voto al Senado. Por último, se les asigna 0,21 euros por cada votante en función de financiación para sus campañas por correo. Para obtener esta última financiación es necesario que el partido consiga constituir un grupo parlamentario, los que quedan en el Grupo Mixto no la obtienen.
En 2019 la fuerza política que más subvención ha recibido ha sido el PSOE, con 18.451.536,2 euros, seguido del PP, que recibió 8.744.958,94 euros. La fuerza que menos ha recibido ha sido Agrupación Socialista de La Gomera, que obtuvo un senador: 22.963,16 euros.
En 2015 y 2016 el Partido Popular fue quien más votos y escaños sacó, por lo que también fue el grupo que mayor subvención recibió: 17.664.545,4 en 2015 y 19.758.652,63 en 2016. Estos años el PSOE recibió 9.968.201,13 y 9.680.906,39 euros, respectivamente. Durante estos años, la formación que menos subvención recibió también fue Agrupación Socialista de La Gomera, que obtuvo 22.586,84 en 2015 y 22.556,44 euros en 2016.
La previsible cifra de unas nuevas elecciones se sitúa por encima de los 170 millones de euros*
Como hemos visto, en todas las elecciones generales de los últimos cuatro años la cifra de dinero público utilizado se encuentra entre los 174 y los 185 millones de euros. Pero en 2016 se modificó la Ley Orgánica del Régimen Electoral Central para reducir los gastos en caso de que se volviera a vivir una repetición electoral tras una investidura fallida.
Esta modificación fija el gasto por subvenciones a los partidos políticos en un 30% menos de dinero recibido por el número de diputados, senadores y votos que obtengan en cada una de las cámaras. Con respecto a la subvención para las campañas por correo, se reduce a la mitad.
Así, si se repitieran las elecciones y se repitieran los resultados del 28A, las subvenciones pasarían a ser de 31 millones de euros frente a los 46 de los últimos comicios. Por lo tanto, el coste total sería de 170.397.679,66 euros, si los costes generales de las elecciones también fueran iguales que el pasado mes de abril. Es decir, en caso de repetición electoral habría un coste de 15 millones menos respecto a los anteriores comicios.
De todos modos, hay que tener en cuenta que se trata de una estimación que puede variar ligeramente al alza o a la baja, ya que es prácticamente imposible que todos los partidos sumen cada uno exactamente los mismos votos y los mismos diputados que en las pasadas elecciones generales y, por lo tanto, reciban las mismas subvenciones. Por otra parte, si subiera la abstención, las subvenciones también serían menores porque el número total de votos disminuiría.
Además, grupos parlamentarios más pequeños como el PNV no obtendrían la subvención relacionada con los gastos para la campaña por correo si no consiguiesen volver a formar grupo parlamentario y tuvieran que pasar al Grupo Mixto. Lo mismo podría suceder al revés, si, por ejemplo, partidos como Junts per Catalunya en una supuesta repetición electoral mejoraran sus resultados y sí consiguiesen en esta ocasión formar grupo propio en la cámara baja.
*En una supervisión posterior hemos revisado los cálculos de esta tabla y se han ajustado algunas de las cifras.
*Una primera versión de este artículo no había tenido en cuenta la modificación de 2016 de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General. Por ello, se ha actualizado la información con los cambios que se producirían en las subvenciones en caso de que se produjera una repetición electoral.