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MALDITA TECNOLOGÍA

Por qué puede que una empresa siga llamando si estamos apuntados en la Lista Robinson

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Para los que no os suene la Lista Robinson, es un fichero al que nos podemos apuntar para que las empresas no nos contacten a nuestro correo o teléfono personal con ofertas comerciales. Hemos explicado cómo funciona la lista en este otro artículo, pero nos habéis preguntado también por qué, una vez apuntados, nos siguen llamando.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que la acción no es inmediata. Las empresas no van a dejar de llamar el mismo día en el que me apunto a la lista porque el proceso lleva un tiempo: desde Adigital, la asociación que la fundó y que se ocupa de gestionarla, explican que la inscripción puede tardar hasta dos meses en ser plenamente efectiva.

Esto se debe a que si una empresa tiene una campaña comercial en curso y cuenta con tus datos de contacto para ella, podrá llamarte independientemente de que figures recientemente en la lista. Así que regla número uno: ser pacientes.

Imagen: Giphy.

Puede que hayamos dado consentimiento para que usen nuestros datos sin ser conscientes

Regla número dos: estar pendientes de dónde introducimos nuestros datos personales. Puede que una empresa tenga tus datos de contacto porque te has apuntado a alguna suscripción o promoción que no tiene que ver con la empresa que te llama. Por ejemplo, muchas páginas publican sorteos que para participar nos piden nombre, correo electrónico, número de teléfono, etc. Otras piden los datos de contacto para informarnos sobre un producto súper novedoso. ¿Sabemos realmente lo que estamos firmando en esos casos? A veces los Términos y Condiciones de esas promociones esconden pequeñas trampas, como que vayan a compartir los datos que demos con terceros.

En estos casos entra en juego el concepto del consentimiento, del que os hemos hablado alguna que otra vez: las empresas se aprovechan de nuestros descuidos al leer sus políticas para usar y compartir nuestros datos para cosas que no contemplábamos en un principio. Una vez que hemos marcado la casilla de “Aceptar”, pueden usarlos (y compartirlos con otras empresas que estén interesadas en comprarlos).

Verónica Alarcón, abogada especializada en protección de datos en ePrivacidad, incide en Maldita Tecnología en este punto: “Es posible que  te inscribas en la lista y posteriormente aceptes una contratación o suscripción vía aplicación, hayas dado el consentimiento y no te hayas dado cuenta. Si has dado tu consentimiento expreso después de inscribirte en la lista, tampoco funciona”.

"Si una persona inscrita en la Lista Robinson quiere que una determinada teleoperadora le llame para ofrecerle una oferta, si le da su consentimiento no habría impedimento alguno. Es decir, que la inscripción en la Lista Robinson no tiene por qué impedir que una persona reciba aquellas comunicaciones comerciales que expresamente quiera recibir", añade Emilio Suárez, responsable jurídico de Adigital.

En estos casos, podemos dirigirnos a las empresas individualmente y retirar el consentimiento, pero ya requiere un esfuerzo por parte de la persona afectada. La propia Lista Robinson tiene un apartado para comunicar a empresas específicas que queremos retirar nuestro consentimiento.

Podemos oponernos a que nos llamen en la propia llamada

Otra cosa que se debería hacer y no suele pasar en este tipo de llamadas telefónicas es que las empresas nos den la opción de oponernos en la propia llamada a que nos llamen para vendernos la publicidad. Incluso en los casos que mencionamos antes, en los que nos toca marcar o no una casilla, recalca que no debe ir marcada por defecto. Muchas veces, mencionar que figuramos en la Lista Robinson es suficiente.

Como último consejo, os recordamos que la Lista Robinson permite seleccionar los medios por los que no queremos que nos contacten (número de teléfono o correo electrónico, por ejemplo) y también los sectores. Puede que no estéis interesados en que os llamen de una operadora telefónica pero sí de una de viajes. Podéis elegir estos puntos una vez creéis una cuenta:

Menú en el panel de usuario en la página de la Lista Robinson.

Suárez recuerda: "La Lista Robinson únicamente abarca las comunicaciones comerciales, por lo que la inscripción no impediría la recepción de un email confirmando una compra online, una notificación de cambios en las condiciones de prestación de un servicio o una llamada de una empresa de recobro".

La empresa puede ignorar la lista, pero en ese caso puede ser sancionada

Con todo, hay que tener en cuenta una cosa que nos recuerda Alarcón: “Que una norma prohíba una conducta no implica que se vaya a respetar, siempre habrá infractores”. Si tras llevar algunos meses inscritos en la Lista Robinson algunas empresas siguen contactando con sus ofertas, podréis poner una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD).

De hecho, reclamar ante la AEPD esta práctica puede llevar a que se sancione a la empresa por no respetar el derecho de oposición de las personas apuntadas en la lista. De modo que presentar la reclamación puede tener un efecto positivo, a pesar de que sea un trámite que seguramente muchas personas prefieran ahorrarse. Lo vemos con el ejemplo de la multa de 10.000 euros que la agencia impuso a la empresa Tecnocube Marketing, que había sido contratada por Vodafone para vender sus campañas comerciales. Entre las personas a las que llamaron, se encontraba una usuaria que llevaba apuntada en la lista de 2018 y que decidió reclamar las llamadas ante la AEPD. *

* Hemos actualizado este artículo el 20 de octubre de 2022 para incluir una referencia a la sanción a una empresa por llamar a una persona apuntada en la lista.


Primera fecha de publicación de este artículo: 28/12/2020

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