MENÚ

"El hielo de los polos está creciendo": cómo se usa esta narrativa desinformadora para negar la crisis climática

Publicado
Claves
  • Una narrativa desinformadora que lleva al menos dos años circulando dice que está creciendo el hielo en los polos, lo que supuestamente desmiente “las predicciones catastrofistas del cambio climático”
  • Los mensajes de esta narrativa usan varias estrategias: se fijan en tendencias locales olvidando las globales, no explican cómo funciona el hielo marino y hacen cherry-picking de las predicciones y evidencias que apoyan su discurso
  • Sin embargo, la evidencia científica es nítida: el hielo de los polos está reduciéndose a nivel global, lo que tiene implicaciones en el clima de la Tierra, en el nivel del mar y en las temperaturas
Comparte
Etiquetas

Una narrativa desinformadora lleva circulando de forma constante al menos dos años: “El hielo de los polos crece, desmintiendo las predicciones catastrofistas del cambio climático”. Las narrativas son mensajes generales transmitidos a través de distintas afirmaciones. Estas afirmaciones se comparten en redes, páginas web, portales de noticias, foros de internet… alimentando esa narrativa.

Estos son algunos de los contenidos que se comparten dentro de esta narrativa desinformadora.

  • El hielo del Ártico creció tanto que ha cerrado por completo las rutas marítimas (desmentido por Maldita.es)

  • La Antártida ganó hielo entre 2009 y 2019 (desmentido por Maldita.es)

  • Medios digitales decían que el Ártico se iba a quedar sin hielo y aún no ha sucedido

  • Científicos contra el alarmismo climático niegan que el Polo Norte se esté derritiendo

  • Un glaciar en Groenlandia ha crecido 16 kilómetros desde 2012

  • El hielo antártico alcanza niveles similares a 1980, dejando en ridículo a los modelos climáticos

Son al menos 13 contenidos diferentes que han llegado un total de 40 veces al chatbot de WhatsApp de Maldita.es (+34 644 229 319) desde abril de 2023. Detectar esta tendencia ha sido posible gracias a una herramienta de Maldita.es que usa inteligencia artificial para agrupar en una misma narrativa los distintos contenidos que llegan al bot y que son temáticamente similares. Estas narrativas son analizadas por humanos, ofreciendo contexto y desmentidos para luchar contra la desinformación. En redes sociales también circulan contenidos similares, que vigilamos como parte de nuestro trabajo diario.

Sí, ambos polos pierden hielo

Para desmentir el mensaje global que apunta esta narrativa, es necesario explicar en qué estado se encuentran las masas de hielo del Ártico y de la Antártida y cómo se relacionan con el cambio climático. Muy resumidamente, tanto las banquisas como el hielo continental están perdiendo volumen, lo que tiene implicaciones en el clima de todo el planeta.

Distintas instituciones constatan que el Ártico pierde hielo marino: NASA (-12,2% por década), Copernicus (-13,5% por década) y el NSIDC (-13,4% por década). Sin embargo, la Antártida no muestra una tendencia clara, no parece que haya perdido ni ganado hielo marino de 1979 a 2020, aunque el NSIDC destaca que los últimos cuatro años han sido los de menor tamaño de banquisa antártica desde que hay registros (1979), tomando como referencia el mes de marzo, cuando tiene su mínimo tamaño anual. 

Además, para entenderlo, es importante explicar que el hielo es diferente en ambos polos, así como la diferencia entre el hielo marino y el hielo continental.

  • El Ártico es una gran masa de agua que la mayoría del año está cubierta por hielo marino flotante (banquisa), que es agua de mar congelada. Además, en el círculo polar ártico también está Groenlandia, que es una isla cubierta de hielo. Bajo el Ártico no hay un continente.

  • La Antártida es un continente y la mayoría del hielo se encuentra sobre él, que es agua evaporada que cae en forma de nieve y hielo. A esta plataforma continental la rodean varias banquisas.

El hielo continental, más común en el ‘polo sur’ (aunque también está en el ‘polo norte’), se está derritiendo. Copernicus indica que, entre 1979 y 2022, la Antártida ha perdido 109 gigatoneladas al año, mientras que Groenlandia ha perdido 107 gigatoneladas anuales.

El hielo marino, más relevante en el ‘polo norte’ (aunque también se encuentra en la Antártida), se reduce en todo el planeta a un ritmo de 2,73% por década entre 1979 y 2025, según el Centro Estadounidense de Datos sobre Nieve y Hielo (NSIDC, siglas en inglés). Es importante decir que este hielo marino tiene un máximo (al final del invierno) y un mínimo (al final del verano) a lo largo del año, y que el ritmo de este deshielo es diferente en el Ártico y en la Antártida.

El hielo es, por sí solo, un indicador importante del clima. Pero, además, cada tipo de hielo tiene su impacto en el cambio climático:

  • La pérdida de hielo continental está directamente vinculada con el aumento del nivel del mar. Si se derritiera todo el hielo de Groenlandia, aumentaría 7,4 metros de altura. Si ocurriera en la Antártida, crecería 58 metros, según la NASA.

  • La pérdida de banquisas se asocia a la amplificación polar, un fenómeno que muestra que los polos se calientan a un ritmo más rápido que el resto del planeta. El hielo marino, de color blanco, refleja parte del calor del sol de vuelta al espacio. Cuando no hay hielo, estas zonas del planeta absorben más calor, aumentando la temperatura, lo que produce más pérdida de hielo marino y a su vez más absorción de calor, creando un bucle que se retroalimenta.

Por qué esta narrativa desinforma: solo habla de una parte de la Antártida y da datos sin contexto

Uno de los motivos por los que esta narrativa desinforma es que destaca la situación de la banquisa antártica, que no tiene una tendencia tan clara como el hielo marino ártico y no parece ganar ni perder extensión entre 1979 y 2020. Las imágenes y textos que señalan este hecho omiten que la mayoría del hielo en la Antártida se encuentra sobre la tierra, que este hielo continental sí está en declive y que en el global del planeta el hielo marino tiende a reducirse. En ocasiones, estos contenidos hablan de una ganancia de hielo en la Antártida, sin precisar si se refieren a marino o continental, lo cual es engañoso.

Otra estrategia que siguen los contenidos es destacar los momentos en los que el hielo marino está creciendo, ignorando que tiende a crecer y decrecer en momentos puntuales del año: crece en el invierno de cada hemisferio y decrece en sus respectivos veranos. También omiten que, con el cambio climático, este hielo marino cada vez crece menos.

Estos mensajes también comparten datos descontextualizados de cuánto ha crecido el hielo marino en un mismo año respecto al mínimo de ese año, sin especificar la tendencia interanual ni explicar que lo normal es que alcance su máximo en marzo/septiembre y su mínimo en septiembre/marzo. También suelen hablar del cierre de rutas marítimas polares por culpa del hielo o travesías árticas fallidas.

Una estrategia más que siguen los mensajes es el cherry-picking, seleccionar las evidencias y tendencias que interesan a la narrativa (la ya comentada de la Antártida, el crecimiento puntual de un glaciar, las poblaciones de osos polares…) obviando las que la desmienten, así como destacar predicciones sobre hielo y calentamiento global que parecen no haberse cumplido para catalogar la crisis climática como una exageración. Para esto último, emplean titulares de medios digitales, declaraciones sin contexto o escogen evidencia científica que ha quedado obsoleta.

Como muestra de esto último, uno de los contenidos más compartidos en redes sociales es la supuesta predicción del exvicepresidente estadounidense y premio Nobel Al Gore, quien en 2007 afirmaba que para el 2013 el Ártico podría estar completamente libre de hielo en verano. Esta predicción resultó errónea y provenía de una conferencia que hacía estimaciones muy agresivas y que no eran representativas de la evidencia científica del momento. Este contenido no ha llegado a nuestro chatbot, se ha localizado en mensajes en redes sociales que citan “las predicciones de Al Gore” sobre este deshielo.

Qué hemos hecho en Maldita.es para desmentir esta narrativa

Una de las tareas de Maldita.es es crear contenidos y herramientas para frenar esta desinformación. El equipo de Maldito Clima ha estado vigilando los mensajes y tendencias desinformadoras para actuar cuando era conveniente, al tiempo que se aportaba información sobre por qué es importante el hielo de la Tierra, cómo afecta al clima y qué relación guarda con el cambio climático.

Como esta narrativa necesita de desmentidos y conocimiento, uno de nuestros artículos útiles es “Dónde encontrar datos oficiales sobre el deshielo en los polos”. Enseñamos cómo usar dos herramientas para comprender de un vistazo la salud del hielo global: un gráfico interactivo del NSIDCsobre hielo marino y el recurso “signos vitales” de la NASA sobre hielo continental.

Gráfico interactivo del NSIDC sobre banquisa ártica en 2023 y 2024. Esto ayudó a desmentir un contenido que empleaba datos descontextualizados sobre el crecimiento del hielo marino.

Consulta las verificaciones de Maldita.es referidas a contenidos concretos de esta narrativa:

Hazte maldito, Hazte maldita
Te necesitamos para combatir los bulos y la mentira: sólo juntos podemos pararla. En Maldita.es queremos darte herramientas para protegerte contra la desinformación, pero sólo con tu apoyo será posible.

Eres muy importante en esta batalla para que no nos la cuelen. Seguro que tienes conocimientos útiles para nuestra batalla contra los bulos. ¿Tienes conocimientos de idiomas? ¿Lo tuyo es la historia? ¿Sabes mucho sobre leyes? ¡Préstanos tu Superpoder y acabemos juntos con los bulos!

También puedes apoyarnos económicamente. Maldita.es una entidad sin ánimo de lucro y que sea sostenible e independiente, libre de publicidad y con profesionales bien remunerados dedicados a luchar, contigo, contra la desinformación depende de tu ayuda. Cada aportación cuenta, cualquier cantidad es importante.