La crisis climática provocada por la actividad humana supone un planeta cada vez más caliente. Esta situación nos lleva a romper récords de temperaturas, de pérdida de hielo y de subida del nivel del mar. Os recopilamos algunas de esas marcas superadas en 2023, el que ya es el año más cálido desde que hay registros (incluso sin conocer los valores de diciembre) impulsado por El Niño en la segunda mitad del año.
El año en que se rompió el récord de la temperatura del océano
21,1 ºC es el nuevo récord de temperatura media en la superficie de los océanos. En concreto, la franja que abarca desde 60 º al norte hasta al sur del Ecuador, excluyendo las regiones polares. Desde mediados de marzo de 2023, la temperatura oceánica ha permanecido sin excepción por encima del resto de años registrados, según la serie histórica iniciada en 1981 por la Oficina Nacional de Estados Unidos de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA).
Las temperaturas de las aguas superficiales en el Atlántico Norte han sido especialmente cálidas. En esta zona, durante el mes de julio la temperatura media ha sido 1,05 ºC superior a la media 1991-2020, “una anomalía excepcional para la época del año”, indicó el Servicio de Cambio Climático de Copernicus, el programa de la Unión Europea de observación por satélite. La causa han sido varias olas de calor marinas. Algunas de ellas han provocado el blanqueamiento masivo de corales, como ocurrió frente a las costas de Florida (Estados Unidos).
Julio, el mes más cálido a escala global desde que hay registros
Julio de 2023 ha registrado la temperatura mensual más alta de la serie histórica iniciada en 1940. La temperatura del aire en superficie ha sido de 16,95 ºC de media, 0,37 ºC por encima del anterior récord de julio de 2019, indican los datos de Copernicus.
"Las temperaturas récord forman parte de la tendencia al aumento drástico de las temperaturas globales. Las emisiones antropogénicas son, en última instancia, el principal motor de este aumento de las temperaturas”, ha declarado Carlo Buontempo, director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus.
Septiembre, la mayor anomalía de temperaturas
Septiembre de 2023 ha sido el septiembre más cálido registrado con 1,82 °C sobre la media global de 1850 a 1900, el considerado clima preindustrial. Este mes también ha sido de récord por registrar la mayor anomalía mensual, al superarse por 0,5 °C el récord mensual anterior, “un margen asombrosamente grande”, según los datos y palabras de Berkeley Earth.
Noviembre, dos días a más de 2 ºC por encima del clima preindustrial
Dos días de noviembre de 2023, el 17 y 18, la temperatura media global ha estado más de 2 ºC por encima de la temperatura media en la época preindustrial (el clima que había entre 1850 y 1900), señala Copernicus. Esta superación puntual de los 1,5 ºC no significa que ya haya fracasado el Acuerdo de París, que obliga a limitar el calentamiento global a 1,5 ºC o como mucho 2 ºC, aunque no es buena señal.
Récord de subida del nivel del mar
“La subida del nivel del mar no tiene precedentes”, ha declarado Petteri Taalas, secretario general de la Organización Mundial de Meteorología (OMM) en la presentación de la versión provisional del informe de la OMM sobre el estado del clima mundial en 2023.
El nivel medio del mar a escala mundial ha alcanzado en 2023 un máximo histórico desde al menos 1993, cuando empezaron las mediciones por satélite. En los últimos diez años (2013-2022), la tasa de aumento del nivel medio del mar a escala mundial es más del doble que la observada en el decenio anterior (1993-2002), indica la OMM.
Mínimo de hielo marino en la Antártida
La extensión del hielo marino de la Antártida tuvo un mínimo histórico absoluto en febrero de 2023. La serie histórica comienza en 1979 con las primeras observaciones satelitales. En junio, la superficie cubierta de hielo llegó a un mínimo histórico para esa época del año. El máximo anual se alcanzó en septiembre con un millón de kilómetros cuadrados por debajo del máximo más bajo jamás observado, que ocurrió en 1986, indica la OMM. Es decir, el hielo marino antártico alcanzó la extensión invernal más baja jamás registrada.